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Flashback

Me miro en el espejo que tengo en frente.
El vestido blanco es muy bonito y esponjoso, tal y como me gustan.

-Estas preciosa - me dicen Vanesa, María y Jane al unisono. Noto como me sonrojo por su cumplido y aparto la vista.

Me acompañan hasta el parque donde se celebrará mi boda.

-¿Preparada?-me pregunta mi padre. Asiento temerosa.
Me escolta hasta Blair, quien va muy guapo y se sorprende al verme. Llegamos al altar y subo cuidadosamente para no caerme con el vestido. Está realmente guapo y su sonrisa brilla mas que nunca.
Me posiciono delante de Blair.

-Nos hemos reunido hoy para unir en matrimonio a...

-Estas hermosa-me susurra Blair. Me sonrojo.

-Igual que tu

El cura nos dice que nos pongamos los anillos. Los trae Tyler y Jane en una pequeña caja.

-Y ahora ¿Hay algo que queráis decir? - nos pregunta el cura una vez que acabamos con los anillos. Blair levanta la mano. Lo miro sorprendida.
El cura le cede la palabra.

-Yo, Blair Larwen, primero cuidarte, hacerte feliz, serte fiel, ser un buen marido, un buen padre y nunca alejarme de tí, solo hasta que la muerte nos separe y sobre todo... Prometo amarte siempre- tengo los ojos llenos de lágrimas. Nunca pensé que un chico me podría llegar a hacer tan feliz con unas simples palabras.

No lo beses

Si lo haré.

Falta que lo diga el cura

Al bote con lo que diga el cura.

Me abalanzo hacia él y lo beso. Lo tomo por sorpresa pero al final el cede y me sigue el beso.

-Puede besar a la novia, supongo...-dice el cura medio desconcertado, lo que provoca que nos riamos.

-¿Y tu que palabras me dedicarías?- me susurra Blair cuando unimos nuestras frentes. Todos nos están mirando.

-Prometo serte fiel hasta la muerte

-Con eso me basta- dice satisfecho y me vuelve a besar.

Fin del Flashback.

Entran por la puerta de casa. Me duele la barriga, así que no me levanto.

-¿Blair?- pregunto sin apartar la vista del televisor.

No obtengo respuesta. Me levanto a duras penas y noto que las piernas me flaquean. ¿Tan gorda estoy? Sólo llevo dos meses de embarazada y ya me cuesta levantarme.

-¿Blair?- vuelvo a preguntar. Se escucha un estruendo en la cocina. Cojo la escoba y me voy acercando despacio hacia allí. Las piernas me tiemblan y a mis brazos les cuesta sujetarlo
Me asomo. Es un chico y está comiendo.

Suspiro.
Uno, dos, tres... Salto al chico castaño y le empiezo a dar de palos en la espalda.

-¡¡SAL- DE- MI- CASA!!- grito como una maniática mientras cierro los ojos.

-¡Auch! ¡Para!-grita y sujeta la escoba para que no le dé más-Soy yo- abro los ojos al escuchar esa voz.

-¿Damon?-suelto el palo -Yo...- que vergüenza.

-Tranquila, suelo sorprender mucho con mi presencia - aquí está, tan egocéntrico como siempre. Dejo la escoba apoyada en la encimera de la cocina.

𝓝𝓸 𝓽𝓮 𝓮𝓷𝓪𝓶𝓸𝓻𝓮𝓼 𝓭𝓮 𝓵𝓪 𝓪𝓹𝓾𝓮𝓼𝓽𝓪   [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora