The Bloody One's Weeping

V

"Beso indirecto"

Ya eran más de las 11:00 p.m., Yurio se encontraba plácidamente dormido en la sala, Viktor lo había llevado cargando a la habitación de Yuuri por petición de él mismo; al llegar al piso superior se quedó boquiabierto al ver la cantidad de puertas que había en el pasillo. Pudo observar diferentes cosas, en primera, fotos del pequeño japonés, pero había algo que le llamaba la atención en todas el se mostraba "feliz", sus padres estaban con él, pero algo no se sentía natural.

Yu:-¿Viktor?-

V:- Ah, Yuuri, lo siento, nunca pensé que tuvieran antas habitaciones-

Yu-¿Qué tanto viste?-

V:- N-no sé de que hablas, cambiando de tema, ¿dónde se encuentra tu habitación?-

Yu:- Ara, era eso, ven sígueme-

Ambos caminaron hasta la habitación de Yuuri, el ruso quedó fascinado con el aroma a chocolate y vainilla que estaba presente en esta racámara, era el aroma que tanto lo tranquilizaba, pero no fue el único, el pequeño Yurio al sentir su rostro en las almohadas de Yuuri se aferró a estas. La escena que el nipón tenía enfrente era sumamente adorable, era como ver a un niño pequeño ante sus ojos; el peliplata se encontraba en una confrontación de pensamientos que daban vueltas en su cabeza, por una parte, no paraba de maldecir su suerte y envidiar a su sobrino y por la otra se imaginaba a Yuuri como la mejor madre que puede haber, tenía unas ganas de sacar su teléfono y tomar varias fotos, pero decidió por bajar con el japonés a la sala donde le esperaban sus amigos.

Estaban ya en la sala cuando Yuuri vio a su amigo en brazos de un tipo que al parecer parecía algo hostil y con una mirada un tanto pesada en incómoda, pero un tanto familiar.

Yu:- Phichit, ¿qué está pasando aquí?-

P:- Ah, Yuuri, que bueno que llegas al fin, tengo que presentarte a Seung Gill-Lee, es del que te hablé aquella vez-

S:- Un placer verlo de nuevo, joven Katsuki-

P:- ¿¡Joven Katsuki!?-

V:- Wow, no me la esperaba-

"Joven Katsuki", "Joven Katsuki", ya había pasado bastante desde que se había escuchado llamar así, trayéndole unos que otros recuerdos, amargos, felices, solitarios; el hombre que se encontraba enfrente de él era nada más y nada menos que el encargado de hacerle compañía y protegerle cuando vivía en japón.

*Flashback*

-Eres tan aburrido, lo único que tienes de bueno es dinero, ¡CERDO!-

-¡Hey!, aléjense de él, idiotas-. Dijo un pequeño niño con una mirada intimidante y una tenebrosa voz

-¿Y que harás al respecto?, somos más que tú-.

-Bien, ustedes lo pidieron-

Yuuri estaba hecho bolita en un rincón, solo escuchaba golpes y llanto a su alrededor.

-¡Y NO VUELVAN!, Hey tú, el niñito de ahí-

-Oh, e-este e-e-eh ¡NO ME LASTIMES!, te daré todo mi dinero o mi comida, no me lastimes por favor-

-E-E-Eh n-no lo haré, t-tu debes ser Yuuri-san, lamento mi imprudencia, mi nombre es Seung Gil Lee, a partir de ahora quiero que estés conmigo por favor-

-P-pero te A-a-aburrirás de mí-

-Claro que no-

-¿Me lo prometes?-