𝑈𝑛 𝑝𝑜𝑐𝑜 𝑑𝑒 𝑡𝑢 𝑎𝑚𝑜𝑟

7. ¿Tomatito?

Yo agache mi mirada y seguí caminando, esto sí que sería incómodo. Sentí como Sasori apretó con más fuerza mi mano.
Un escalofrío me recorrió una vez que los tenis de Deidara aparecieron en mi campo visual.

—Hey—Lo saludó Sasori y yo levanté mi vista pero aún sin mirar a Deidara.

—¿La perdonaste?—Pregunta Deidara y siento su mirada en mi.

—Eso no es asunto tuyo—Le dice Sasori, pero con su usual tono de voz.

—¿Si sabes que no le gustas verdad? Solo te está usando—Dice cínicamente Deidara provocando mi enfado y por fin lo miro.

—Bueno ¿tu porque te metes?—Le hablo con él tono de voz más grosero que pudo salir de mi.

—Porque Sasori es mi mejor amigo y no quiero que lo uses—Frunció el ceño y yo solté una risa lo cual le enfado aún más.

—Deidara, eres mi amigo pero no provoques que peleemos—Dice tranquilamente Sasori.

—¿Puedes dejarnos solos un momento?—Digo mirando a Sasori. El mira a Deidara y luego me mira a mi con desconfianza pero asiente con la cabeza y se aleja un poco de nosotros—No entiendo porque de pronto actúas como un pendejo.

—¿¡Yo actuó como un pendejo!? ¡Mírate a ti!—Me grita.

—¡Ya déjate de estupideces y dime porque estás tan enfadado!—Le grito de igual manera.

—Porque me hiciste a un lado. ¿Sabes lo raro que fue saber que te gusto y que al día siguiente ya estés con mi mejor amigo pero también con el Uchiha menor?—Habla mas calmado y yo desvío mi mirada, creo entendía su punto—Siempre nos hemos contado todo y de la nada todo pareció cambiar. Dijiste que nada tenía que cambiar.

—Perdón, todo pasó tan rapido que no se lo conté a nadie ¡Ni siquiera a mi hermano!—Le explique y él soltó un suspiro—No pretendo lastimar a Sasori, el me pidió una oportunidad y si tú no puedes corresponderme ¿que tiene de malo que intente ser feliz con alguien más?.

—Tienes razón, perdón por alterarme tanto—Rascón su nuca y yo quise abrazarlo, pero no podía, no debía.

Voltee a ver a Sasori quien parecía hablar con alguien por llamada. Le hice una seña para que volviera. Cuando estuvo de nuevo a mi lado, el y Deidara se miraron y ambos asintieron con la cabeza.

—Te veo después—Le dice Sasori y Deidara solo se despide con la mano y sigue su camino.

Seguimos caminando pero el ya no tomo mi mano, parecía algo incómodo.
No quise decir nada, aparte de que no sabía que decir. Al llegar a mi casa, agradecí que no estuvieran los chicos afuera porque sabía que me dejarían en ridículo haciendo comentarios incómodos o sonidos de burla.

—Y bien... ¿todo en orden?—Me atreví a preguntar.

—Si—Dijo a secas y yo hice una mueca.

—No parece, estás algo raro.

—Es extraño para mi cuando te veo cerca de Deidara—Habla mientras miraba un punto fijo.

—Solo somos amigos y siempre seguirá siendo así—Hable tratando de no sonar herida, me dolía decir eso.

—Lo se, no te preocupes por mi—Beso mi mejilla—Te veo en la fiesta.

—Si, nos vemos—El asintió, se dio la vuelta y comenzó a caminar, yo me quede viendo como se alejaba. Cuando desapareció de mi vista, entré a casa y busqué a mi hermano y a mis amigos.

Los encontré en la habitación de Naruto, estaban charlando. Entre y me tire en la cama quedando encima de mi hermano.

—Te odio rubio idiota—Le dije y él me empujó.

—Tu eres la idiota que ya no me cuenta nada—Hablo indignado, Dios, ¿todos se iban a enfadar por eso?.

—¡Todo pasó muy rápido! No tuve tiempo de ir a buscarte y contarte—Me defendí y él hizo un puchero.

—Bueno, a mi me cuentas mientras nos arreglamos, sabes que tardo horas—Dijo Ino levantándose del suelo y yo solté un grito de frustración, no quería ir a la fiesta. Obtuve un golpe sin mucha fuerza en la cabeza por parte de Shikamaru. Yo tomé su brazo y lo mordí.

—¡AHG!—Grito—¡Quitame a este animal!—Le dijo a Naruto mientras trataba de apartarme colocando una de sus manos en mi frente.

Naruto solo se rio, Ino que la que me aparto.

—Defiendes a tu ex. ¿Que opinaría Sai?—Dije para molestarlos. Shikamaru solo rodo los ojos mientras que mi amiga me empujó fuera de la habitación.

Fuimos a mi cuarto y mientras ella se maquillaba, le conté todo lo que había pasado. Vaya que si me hacía falta desahogarme con alguien además de que,  Ino siempre daba los mejores consejos.
Abrí mi armario para ver qué podía ponerme, las fiestas en casa de los Uchiha solían ser más formales de lo habitual así que no podía vestirme como normalmente lo hacía. No encontraba nada bueno pero vi una caja que no sabía que tenía ahí, la tomé entre mis manos y la puse en mi cama para ver qué tenía dentro.
Habían fotos mías y de Naruto cuando éramos pequeños, sonreía al verlas pero hubo una que llamo mi atención, aparecía yo sola con maquillaje en mi rostro imitando a un gato, en un parque, un niño salía de espaldas detrás mío pero no era Naruto. Le di la vuelta y tenía algo escrito con una letra no muy legible.

Siempre seremos los mejores amigos.
Te quiero mucho Kiyan.

Atte: Tomatito 🍅

¿Kiyan?

¿Tomatito?

No tenía ni idea de quienes se trataban pero no le di mucha importancia, probablemente haya sido Naruto y Kiyan sería un apodo que me puso. Desde que recuerdo solía ponerme miles de apodos, la mayoría ridículos, cada semana se inventaba uno nuevo peor que el anterior. Ino me hablo y volví a guardar la caja, ella escogió mi outfit y ambas comenzamos alistarnos.