Luchaba internamente conmigo misma, yo no quería, siquiera pensar en la posibilidad de que el no me quisiera en su vida, yo…. Me había dado cuanta demasiado tarde que lo…amaba….. pero no fue fácil para mi dejarlo ir, pero lo estaba haciendo por ambos ¿acaso no importaba?
¿Acaso no fue lo mejor? ¿Qué era lo que pensaba el?, como era posible que el no sintiera la más mínima curiosidad de lo que me había pasado, mi cabeza estaba hecha un lió tenia miles de versiones por las cuales tal vez el nunca me llamo, por las cuales tal vez el no me dirigió la palabra ese mismo instante cuando me vio, pero todas eran completamente absurdas, como el echo de que nunca tuviera tinta, o su celular no haya funcionado un año entero... Ja, por supuesto que no. Tenia que tranquilizarme y lo sabia muy bien, caminar de una lado a otro lado del departamento no me ayudaría en nada, era un reflejo extremadamente tonto, pero no podía parar estaba nerviosa, tenia que pensar ¿que era lo que le diría cuando por fin estuviéramos frente a frente? ¿Tendría el valor para verlo otra vez? Estaba asustada, nerviosa, y enojada conmigo misma por ser una cobarde, yo tenia que haberle dicho que lo amaba frente a frente antes de irme al centro…. Pero yo estaba asustada…. No sabia como afrontar todo lo que me estaba sucediendo, era débil y yo simplemente no podía con todo.. -pensé mientras sentía que mis lagrimas bajaban lentamente al rededor de mi mejilla, pero las limpie suavemente. No lloraría, no ahora, no por mi pasado, por que estoy en mi presente, y mi presente es Justin.
Tome mi bolso rápidamente, necesitaba un respiro, necesitaba ir a buscarlo decirle todo lo que sentía, cuanto lo había extrañado, y cuanto lo quería en este mismo instante, el tenia que saber que estaba recuperada y que había regresado por el, que no me iría de su vida no sin antes luchar por el…
Me dirigí rápidamente hacia la puerta apague la luz de la sala del departamento, y salí decidida a todo y preparada para todo, tenia que tomar un taxi, no sabia si Justin seguía con Pattie, pero no sabia donde mas buscarlo, rápidamente tome el primer taxi que se paro en la acera donde me encontraba, le dije la dirección de la casa de los Bieber, tenía que pensar que es lo que diría cuando viera a Pattie , ¿Cómo me recibiría? ¿Me querría ver como yo a ella?. Miraba por la ventana del taxi , era realmente genial volver después de tanto tiempo, mi mirada estaba perdida al igual que mis pensamientos, sentí como el taxi separo frente a una casa grande color azul. Espera. ¿Azul? No era como la recordaba, cuando yo venía a visitar a Justin, la casa era color azul con blanco, ahora la casa parece una Iglesia, siempre apoye el buen gusto de Pattie, pero bueno, los años cambian, al igual que las personas.
Le pague al taxi lo correspondiente me baje de el, no sentía mis piernas, estaba temblando, no podía moverme estaba paralizada, tome todo el aire posible me llene de valor, y empece a caminar a paso lento, “tienes que hacerlo” me decía a mi misma una vez en la puerta la toque tres veces en tono audible, esperaba encontrarme con esos hermosos ojos color miel… era todo lo que deseaba…
Cuando finalmente abrieron la puerta, pude encontrarme con la mayor decepción de mi vida. Era una anciana, de buena pinta, nunca la había visto por este vecindario.
-¿Sí?-preguntó mientras me miraba del otro lado de la puerta-
-Oh.. -dije mirándola, seguramente es la abuela de Justin- Viven aquí.. los Bie-ber- mierda, odio tartamudear-
-No linda, me vendieron su casa hace como 6 meses -dijo mirándome-
-¿No sabe donde encontrarlos?-pregunté esperanzada-
-No, lo siento -me miro-
-¡Rose! -gritó un hombre levemente-
-Siento no poder ayudarte -me dijo para luego cerrarme la puerta-
{Justin}
¿Realmente era ella? Hace pocas horas que la acabo de ver, y esa luz en sus ojos estaba ahí, siempre estuvo ahí jamás se apagó, pero el echo de que ella no quiera volverme a ver, no me impediría ser feliz, a lado de una persona que quiera, mi vida no dependería de ella... aun que así fuera realmente. Cada mañana me costaba despertar sin haber recibido un mensaje como los que me mandaba diariamente; "Hola guapo, despierta que hoy te enamoras" o "Sonríe que eres hermoso" Bien, siempre me los mandaba, como sí se los mandara a una mujer, diciéndome que se me caerá la corona o un estilo así -reí por mi pensamiento y luego una amarga mirada se poso en mis ojos saliendo de la cocina... Mi futura suegra-
-¿Y bien? -preguntó la madre de Skyler-
-Pues, yo..-alargué- Hace mucho tiempo que conozco a su hija, somos mayores de edad, y podemos salir adelante..Juntos.-continué-
-Sigue -me miro más interesada-
-suspire largamente- ¿Estoy seguro de que quiero dar este paso?-pensé mientras miraba a Skyler que me miraba con una gran sonrisa, solo faltaba convencer a su madre- Señora Vega..-continué, quería buscar mi felicidad, y no podría hacerlo si pienso en _____ cada segundo de mi vida, prometí superarla pero se me hizo más difícil de lo que pensé, simplemente ella era la dueña de mis pensamiento, podría hacer lo que a ella se le plasca con tan solo pedírmelo.. cuanto daría por que fuera ella en estos momentos- Quiero decirle que quiero casarme con su hija -dije rápidamente mientras fijaba mi vista en ella que esbozaba una gran y abierta sonrisa-
