Angelo Guerriero

XV.- "Ignorancia"

Especial 1/3

No quería dejar a Alonso, suficiente tenía que se relacionará con Coel Corbin y Cam, como para que también se relacionará con Cornelia. Pero, cuando lo pensé bien, me di cuenta la importancia que le daba al asunto. Así que lo deje pasar.

Solo era Alonso.

Seguí a Gael hacía su despecho. Lo conocía tan bien que sabía algo le inquietaba. Y, como era usual, no lo diría abiertamente.

Lo normal para Gael era recurrir a Reaven o Nicolás para compartir sus inquietudes.

O el tema era muy serio, o me tocaba la reprimenda mensual.

—Pensé que se tardarían menos.

El despacho de Gael estaba como de costumbre. Libros, muebles, licorera, mesa de ajedrez. La diferencia se encontraba sobre uno de los muebles: Nicolás estaba sentado ahí ojeando distraídamente un periódico.

—Calmarlos nunca es fácil. —susurró Reaven, sentándose al lado de la licorera.

—Lyanna, ¿Entiendes por qué te llamé aquí?

Me senté al lado de Reaven.

—Quiero pensar para algo más importante que sermonearme.

Travis cruzó los brazos sobre su pecho, no parecía interesado en participar. Bien, porque no estaba segura de contener los comentarios mordaces que quería soltarle.

—Lyanna. —susurró Gael—. No podemos continuar con esto si sigues con ese comportamiento. Debes superarlo.

—No puedes escaparte de la realidad, Ly. —apoyo Reaven.

Suspiré.

—¿Qué debo superar? —pregunté con calma—. Soy totalmente consciente de la realidad.

—Mientes. —acusó Travis—. La Ly que conozco no es insensible en los temas familiares. Te preocupas más por la familia que por ti misma.

—Las personas cambian. —dije, dirigiéndole​ una mirada inexpresiva. De todos él era el menos indicado para opinar sobre mi comportamiento.

—O mueren. —susurró Nicolás. Cuando lo miré tenía una pequeña sonrisa en sus labios. No dije nada.

—Basta. Todos, afuera. —demandó Gael.

Reaven me sonrió, tratando de darme aliento, luego salió del despacho después de darme un suave golpe en la frente con sus dedos. Travis lo siguió sin mirarme, lo mismo pasó con Nicolás.

Ambos se parecían más.

—Pensé que discutiríamos algo más importante. —admití, una vez solo quedamos Gael y yo.

—Antes de hablar sobre Osvalt, tenemos que hablar sobre ese tema. —la expresión de Gael se tornó melancólica—. Lyanna, sé que te duele, pero tu indiferencia solo nos hace preocuparnos más.

¿De verdad me está diciendo eso?

—No me afecta que ella muriera.

—¿Te afectaría ver morir a alguien más?

No. No me afectaría.

Esas fueron las palabras que no pudieron salir de mi boca. ¿Por qué? Porque un nudo en la garganta me impidió responder.

¿Me afectaría?

No. Claro que no.

—Dolor, tristeza, cariño, añoranza, amor; son sentimientos que no puedo permitirme volver a senti...

Gael envolvió mi cuerpo con sus temblorosos​ brazos, impidiéndome terminar de hablar.

Abrí mis ojos a más no poder, casi al mismo tiempo mi cuerpo se tenso. Su aroma a eucalipto me resultó extraño, y un poco reconfortante a la vez.

—Estoy muy seguro que ella te amaba. —susurró sobre mi cabeza. La tensión seguía ahí. Nadie me había abrazado en un buen tiempo—. Tanto como tú lo hacías.

Después de unos segundos de sentirme incómoda, deshice su abrazo muy lentamente. Miré los mismos ojos azules que había heredado, y dije:

—Llorar por los muertos solo trae gasto de energía.

•••

DATO CURIOSO #7: Travis Tonny y Thomas tienen/tenían dos miedos en común: a). Ver molesta a Ly y b). Arañas.