Familia de extraños. Parte I.

267 9 3
                                    

Título: Pensé que era amor

Ranking: M (Lemon al final)

Advertencias: UA/Posible OoC/RE-EDICIÓN terminada/Saltos temporales/Primera persona.

Pareja: SesshKag

Disclaimer: Todos los derechos de creación son de la maravillosa Rumiko Takahashi.

O

O

O

Familia de extraños. Parte I.

O

O

O

El resto del trayecto de regreso a la mansión fue corto y silencioso, probablemente debido al hecho de estaba nerviosa y las bromas de InuYasha habían dejado de surtir efecto conforme avanzábamos. Mis manos se movían de un lado a otro ansiosas, retorciendo la tela de mi abrigo cada tanto, el clima finalmente había decidido darnos un respiro, sin embargo yo seguía sintiendo mi cuerpo frío.

Si bien era cierto que estaba decidida a terminar con este asunto de una vez por todas no podía evitar imaginarme las mil y una consecuencias de mis actos.

Por supuesto que pedir explicaciones era lo mínimo que haría para empezar y probablemente el estrés podría llevarme a hacer un enorme berrinche de proporciones épicas para desahogarme e incomodarle, sabía cuánto le molestaba eso, pero sabía bien que me vería ridícula aunque fuera una de las muchas cosas que tengo ganas de hacer.

Y a partir de ahí empezaba mi problema. De ahí en más no tenía ni idea de cómo abordaría la situación, ni si sería capaz de sobrellevarlo de tal manera que conseguiría lo que buscaba. No podía olvidar que no estaba tratando con cualquier persona, sino el mismísimo Sesshoumaru Taishou, hábil experto en las artes de la manipulación.

Entre decir que quería respuestas a verdaderamente obtenerlas había un larguísimo trecho y tenía miedo de no poder lograrlo al final.

Yo podía ser bastante brava cuando me lo proponía, aunque hasta ahora el no haberlo demostrado me llena de vergüenza, pero aún así tenía que admitir que con solamente su fría y aterradora mirada bastaba para poner a cualquier persona a temblar.

Ni que decir de cuando estaba molesto, con solo su presencia lograba intimidarte y obligarte a retroceder por instinto, definitivamente el reto al que me enfrentaba era demasiado difícil de superar, pero probablemente lo fuera mucho más obtener mis recuerdos de regreso, si con toda esta situación apenas y había soñado con algo de ese oscuro pasado, de un día para otro no vendrían mágicamente de nuevo.

En medio de mi distracción me di cuenta de que no veía a InuYasha al lado mío. Miré de reojo a mi acompañante al percatarme de que me adelantaba varios centímetros en la marcha, mis pies habían disminuido el ritmo inconscientemente, y di unos pasos largos para retomarlo, alcanzándolo de inmediato.

Pude divisar el enorme terreno en la lejanía, y una sensación parecida a la asfixia comenzó a anidar en mi pecho. No faltaba casi nada para el gran momento.

Sabía que era normal tener miedo, no era solo la ferocidad y la autoridad que emanaba de ese hombre, sino los niveles a los que le había visto llegar, el solo recordar lo que pasó con la señora Kagura me hacía estremecer.

Era peligroso y yo iba directo a entregar mi cabeza en bandeja de plata, pero era inevitable.

Llegar a la entrada no nos costó demasiado, estaba inusualmente despejado, como si no hubiera vigilancia de ningún tipo y eso solo acrecentó mi malestar. Hasta ahora me daba cuenta de que nunca me fijé demasiado en si las puertas estaban resguardadas por guardias, cámaras o algo, o si solo era la servidumbre que estaba atenta a la puerta mientras nosotros permanecíamos ahí dentro.

Pensé que era amor [SesshoKagome] [InuYasha]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora