Capítulo 31

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Podría haberse quedado dormido, si no fuera por el puto sonido del celular. Ni los rayos de sol, pudieron despertarlo y es que ¡No habían!, el día había amanecido totalmente lleno de nubes, como si quisieran decirle algo.

Por primera vez en casi un mes, se duchó tranquilo y pasivo. Se vistió con sus pantalones, una polera que lanzaba un garabato no tan lindo, y una chaqueta, y sus infaltables zapatillas, ¡Cuanto las extrañaba!

Guardó los papeles que le había dado James en su mochila, y bajó las escaleras, para ver a su madre. Esta la miró extrañada, ¿No debería estar en el trabajo? Era hora de hablar con él.

-¿Y tú? ¿Qué haces aquí? -En su mano tenía con varías flores -¿No te fuiste a tu trabajo?

-Mamá. -abrió el refrigerador y sacó una botella de jugo -No, no fui, y bueno de eso quería hablarte.

Su madre siguió mirándolo extrañada, ¿Sería capaz de contarle la verdad? no, no podía, Tricia podía ser muy permisiva y comprensiva a la vez, pero contarle que se infiltró en un instituto de chicas, la pondría como loca, lo regañaría, hasta incluso podría hacer algo que hace mucho no hacía...podía castigarle y como él no podía desobedecer a su madre, nunca lo había hecho, estaría como un bueno hijo encerrado en la casa por un tiempo.

-¿Que sucede Zayn? -preguntó ella.

-Bueno, ya no estoy trabajando -mintió -renuncié y bueno, estaré por aquí, como siempre -aguantó su nerviosismo, tragando un poco de jugo de naranja.

-¡Oh! -exclamó ella -bueno, me pone muy triste que hayas renunciado, pero a la vez feliz, porque estarás aquí hijo -le sonrió.

-Si mamá, pero ahora debo salir, arreglar unos papales, ya vuelvo ¿Si? -dejó el jugo a un lado de él, y besó la mejilla de su madre.

Era hora de la verdad, pasó a recoger a Harry que lo acompañaría. El rizado presentaría los papeles de Marie y él los de Kate. Todo tenía que salir bien, como estaba ideado el plan, a menos que Leah se arriesgara y dijera toda la verdad, pero no eso no podía suceder. Como ahora estaba conociendo a la verdadera Leah, podía darse cuenta que la cobardía la atraparía una vez mas, ella no sería capaz de decir la verdad, porque o si no él también hablaría. Y bueno a ella no le convenía aquello.

Atrajeron varias miradas en cuanto entraron al instituto, pero ninguno se detuvo si quiera a notar eso. Hablaron con una secretaria, para que les comunicara a la directora y así fue.

Luego de inventar una historia en donde, los padres de Marie y Kate eran socios y debían mudarse de ciudad, la directoria pareció creerles, hasta que les preguntó porque no habían ido personalmente los padres a hablar con ella. Ellos también habían inventado que sus padres, ya estaban en la otra ciudad, y ellos eran unos amigos de la familia, pero que traían los papeles y todo.

A la directora no le quedó de otra, que aceptar y sacar a Marie Johnson y a Kate Benson para siempre del instituto.

-¿Viste su cara de 'Oh dios me quedó sin dinero y sin alumnas'? -bromeó Harry, mientras caminaban hacia la salida.

-Sí, -rió -fue gracioso -mientras caminaba sintió una mirada fija sobre su espalda, se giró detenidamente.

-¿Qué sucede Zayn? -preguntó Harry al ver que miraba un punto fijo.

-Es Leah -susurró y volvió a girarse. Leah Collins lo miraba desde una esquina escondida, con los ojos llenos de furia -vamos.

-¡Somos libres! -exclamó Harry.

-Si tonto -Zayn encendió el auto y comenzó a conducir -debo decirte, que no sé que mierda hacer ahora.

-¿Rehabilitarte? -Zayn frunció el ceño, con la vista fija al frente -¿Divertirte?

Enamórate » ZaynDonde viven las historias. Descúbrelo ahora