MIEDO.(Sasuke y Hinata)

Capitulo 14: Confesiones parte II

Su mirada estaba concentrada en la puerta frente a él, sus 2 compañeros estaban allí sentados, hipnotizados por la historia que acababan de escuchar, una historia fantásticamente rara, pero real... Sasuke no es de esas personas que cuenta mentiras y mucho menos de esa manera tan preocupada. Sus amigos lo sabían, sus amigos lo conocían... un silencio largo los embauco, ninguno fue capaz de pronunciar alguna frase, algún sonido... estaban sentados en el frío piso de un pasillo de hospital, pensando, analizando lo que escucharon, lo que vivieron, lo que no entendían.

Sasuke sabía que lo que había sentido era algo completamente fuera de sí mismo, sabía que era algo mas potente que él, que Itachi, algo tan potente que por un momento sintió miedo, algo tan calido que se sintió feliz de repente... Pero no sabía como hacer que Hinata despertara y por eso estaba maldiciendo a cualquier ser que hubiera ocasionado aquella catástrofe.

- Yo se que tu la despertaras dobe – culmino el silencio su rubio amigo. – eres el único que puede hacerlo. – no era una pregunta era un confirmación, era lo que Sasuke necesitaba. (CONFIANZA).

- Eso espero – respondió pero sin observar otra cosa que no fuera esa puerta frente a él, sin observar otra cosa que sus pensamientos y su único objetivo. Hinata.

oº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºoº°˚˚°ºo

Dentro de esa habitación estaba aún un hombre, alto, castaño, con piel tostada y ojos blancos, unos ojos que no expresaban absolutamente ninguna emoción pero si los detallabas minuciosamente te darías cuenta del dolor que sufría en ese momento.

El hombre miraba a la chica que reposaba en la cama, con los ojos cerrados, inconciente, se sentía un idiota contando aquella historia que no había mencionado jamás, ni siquiera la había platicado con su esposa, luego de que todo pasara... realmente el se había sentido aterrado por la idea de perderla, de perder lo más importante que tenía en esa época, lo mas importante que tuvo en todas las épocas. Así que aunque Hinata tal vez no lo escuchara necesitaba decírselo, confesar el miedo que sentía por perderla... decirle que si la amaba, que la adoraba, que había sido un idiota por pensar que al no demostrarle cariño, ella se haría fuerte... pero se había equivocado ella se hizo fuerte por el cariño de Hanabi, por la necesidad de defenderla, de protegerla, porque se había tomado el papel de madre con ella y él, él se había equivocado durante casi 17 años de su vida, haciéndola pensar que no la quería, pero como no iba a querer al espejo de su amada, como no iba a querer a la persona mas gentil del mundo, como no iba a querer a la persona mas inteligente que conocía a la persona mas pura. Sólo al mirar al Uchiha se dio cuenta que ella también lo había salvado. Que su poder era tan infinitamente fuerte que había sacado de la oscuridad a ese chico, hundiéndose ella en ese estado, sin importarle nada, él lo entendía, él entendía que Hinata amaba ese chico de la misma manera en que el Uchiha la amaba a ella, lo vio en su mirada en el instante en que salió a regañadientes de allí. Y no podía estar mas feliz de que su hija estuviera siendo feliz con alguien... no podía ser mas feliz de que su hija allá salvado a un gran ninja de Konoha de un peligro mas grande que la muerte, un peligro mas grande que la guerra, un peligro mas grande que el que vivió hace 17 años... el odio, la venganza, LA SOLEDAD.

- No recuerdo absolutamente nada de ese hombre, hija, solo sus ojos, esos ojos que helaron mi sangre, cuando observe como tu madre perdió el conocimiento pensé que ese ser le había hecho daño, mi corazón se detuvo por unos segundos al verla en el piso, tirada, con la respiración entrecortada, mi cuerpo tembló, pero de pronto sentí un calor entrando en mi interior, un calor tan espectacular, un calor que me llenaba de fuerza, un calor que me llevo de valor, pelee con ese hombre y lo vencí... se que no lo mate, pero logre alejarlo de ustedes y para mi eso fue suficiente. Creo que nunca había tenido miedo como esa noche, ¿sabes? Y más sentí cuando me entere del embarazo de tu madre. – su voz sonó tan cálida que Hinata no pudo evitar sonreír tímidamente, no entraba en su cabeza todo lo que escuchaba, pero le creía... su madre se lo había dicho, bueno no tanto pero algo y su padre por primera vez estaba siendo sincero y eso ella lo apreciaba... tal vez lo hacía porque estaba inconciente pero para ella era suficiente motivo para perdonarlo de todas las tonterías que había realizado en un pasado. Así era ella, perdonaba y olvidaba... porque la vida es muy corta para guardar rencores innecesarios, en el fondo le agradecía ese trato que le dio, ese trato que la hizo ser fuerte para demostrar que ella valía mas de lo que el pudiera notar... aunque jamás se lo diría, ella quería ese padre preocupado y cálido que tenía frente a ella, al cual estaba escuchando atentamente sin él notarlo.