La librería del amor - NaruSasu -

Capítulo 1

Los pájaros cantaban dulcemente mientras el Sol ya empezaba a pintar de tenues colores el cielo; en una linda y tranquila mansión comienza el día de uno de nuestros protagonistas. Su nombre es Naruto Uzumaki y es un apuesto alfa, además de tener los ojos azules como el cielo, tiene el cabello rubio y cuenta con tres simpáticas marquitas en cada mejilla. 

-Hora de levantarse bello durmiente.- esa era la voz de la mujer que lo trajo al mundo, su cariñosa madre. – ¡Que te despiertes de una buena vez maldición, sino quieres que te de con la chancla!- o bueno lo era cuando quería.– Tu padre y yo tenemos que hablar contigo,–explicó mientras Naruto bajaba las escaleras en dirección a la sala.– es importante. 

Su madre es Kushina Uzumaki una mujer alfa, dueña de una gran belleza y un color de cabello muy peculiar al ser una pelirroja natural, que sobresale en el mundo de los negocios y aunque la mayor parte del tiempo es cariñosa y alegre, también puede llegar a dar mucho miedo. No por nada la conocen como el Habanero Sangriento.

Y su padre es Minato Namikaze un alfa alto, él al igual que su hijo posee una cabellera rubia y unos bellos ojos azules, es un famoso médico cirujano muy respetado en toda la ciudad, suele ser firme y decidido pero con su familia muestra un lado paternal y amoroso, siempre procura no hacer nada para enojar a su linda esposa.   

-¿Papá?¿Mamá? Son las 7 de la mañana y es sábado, ¿Qué es tan importante cómo para que me levanten a esta hora?

-Sí, buenos días a ti también Naruto, ¿Cómo amaneció la criatura más bella de este mundo?

-Bien gracias amor, ¿y tú?- Ese fue su padre quien estaba sentado en el comedor leyendo el periódico.- Ah, y Naruto hoy es miércoles, no sábado.

El menor revisó rápidamente su celular, en verdad era miércoles, pero, ¿cómo es posible? ¿Aliens? ¿Sus padres estaban desayunando tranquilamente mientras él debía ir a la escuela? Tal vez estaba soñando, así que se pellizcó, pero nada, su padre seguía leyendo el periódico con una taza de café y su madre comía un platón fruta.- ¿Qué está pasando? Debo ir a la escuela.

-De hecho Naruto- su padre apartó la vista del periódico y se volvió a su hijo.- ya no irás a la escuela.

-¿Eh?

-Tu padre y yo hemos decidido que te irás a vivir con tu tía Karin por un tiempo indefinido.- dijo su mamá para después comerse un pedazo de sandía.

-Bueno al menos no tengo que entregar el proyecto de ciencias, más importante, ¡¿por qué me voy a ir a otro país con una señora que está más loca que una cabra y que además ni siquiera conozco a nadie?!- Naruto estaba más confundido que antes y necesitaba respuestas.

Minato suspiró y le entregó a su hijo una carpeta.- Esas son tus calificaciones de este semestre, como podrás ver Naruto, son malas, muy malas, que digo malas, son pésimas, que digo pésimas, das pena, que digo das pena, das ...

-¡Ya entendí!

-Al parecer en la única que te va bien es en educación física.- dijo su madre mientras veía el contenido de la carpeta.- Naruto decidimos esto porque el director nos dijo que tienes que repetir el año, pero no en su escuela, ya que es una élite y el que tú repitieras el año los dejaría con una mala reputación, además gastamos un dineral en esa escuela.

-Pero somos millonarios, ¿no pueden sobornarlo para que me apruebe las materias y ya?

-¡El dinero no cae del cielo, imbécil!- Kushina lanzó el tenedor en dirección a la cabeza de Naruto, pero este lo esquivó.- Está bien que seamos millonarios pero eso no quiere decir que no nos cuesta ganar el dinero, de cualquier forma ya está decidido, repetirás el año el la preparatoria de Konoha en donde mi hermana Karin imparte clases y te quedarás a vivir con ella hasta que termines la preparatoria.- sentenció la pelirroja con tono firme.

-No, no, no, no toda la preparatoria, por favor, ten piedad.

-No seas exagerado Naruto, solo debes vivir con ella durante un año, ya que se supone que deberías graduarte este año, pero como reprobaste deberás esforzarte más.- dijo su padre tratando de consolarlo.

El rubio miró a su padre como diciendo gracias y después se dirigió a su madre.-Bien, ¿Cuándo se supone que me voy a vivir con la loca?

- En un mes.

-Mierda.- fue lo único que dijo antes de recibir un coscorrón por parte de su madre.

-Cuida tu lenguaje muchachito.