-Venga Angie, salta
-No. Me da miedo. Voy a llamar a la señorita.
-Si la llamas te vas a buscar un problema porque le diré que tú cogiste los lápices.
-No! ¡No se lo digas!
-Pues salta, venga.
-Me voy a hacer daño.
-No te vas a hacer nada, porque te voy a agarrar.
-¡Mentirosa!
-Angie salta o te pego.
Alex me empujó. Sonó un golpe seco.
Todo se volvió negro