One-Shot |Multifandom|

#21- Cameron Dallas

Narra _____.

____: Porque al separarse las partículas de los núcleos se unen los átomos - autorecité y bajé la vista hacia mi cuaderno, donde tenía la solución- Mierda- me di un palmada en la frente al ver que no era así y apoyé los codos sobre la mesa de mi cuarto. Pasé las manos por mi cabello suelto, ya estaba empezando a sudar de las horas que llevaba aquí.

Una maldita semana intentando aprenderme toda la teoría del exámen, he reducido mis horas de sueño y comidas. Ya no sé qué más hacer para aprobar este maldito exámen. No me puedo permitir suspender ya que me quitarían la beca y no tendría con qué pagarme la universidad, bastante es ya con el mini apartamento como para añadir gastos extras.

Precisamente a mí el dinero no me llueve ni me crece de los árboles, ojalá.

Mis padres al ver que no hice la carrera universitaria que ellos querían, dejaron de pasarme el dinero de la universidad y prácticamente recortaron cualquier vínculo conmigo. En parte entiendo que estén decepcionados, toda su vida esperando a la heredera de la futura empresa y ahora... Una casi médico.

Resoplé al escuchar el sonido de mi teléfono. Vi que era una llamada de mi novio, Cameron.

Llevo saliendo con él desde hace unos cinco años y si fuera por él me pagaría todo pero en incontables ocasiones le he dicho que no quiero ser una mantenida. Prefiero ganar mi dinero y gastar mi dinero.

El trabajo como dependienta en una tienda de ropa no era un buen sueldo pero menos es nada.

-Llamada telefónica-

Cameron: Hola bebé, ¿qué tal el día?

____: puff- resoplé- no muy bien, ¿y a tí como te va?

Cameron: Bastante bien, acabo de salir del photoshoot, justo acabo de parar en el supermercado a comprar unas cosas.- le daba vueltas a mi bolígrafo mientras escuchaba a Cameron hablar, levanté la vista y me di cuenta de que se me hacía tarde y tenía que seguir estudiando si quería aprobar al menos.

_____: Oye Cameron, tengo que seguir, te llamo luego. Bye, te quiero.

Cameron: ¡Suerte!- sonreí un poco desganada aún sabiendo que no me veía y colgué la llamada.

-Fin de la llamada-

Lancé el teléfono hacía mi cama y automáticamente me arrepentí, giré para comprobar si no se había roto y por suerte estaba intacto.

Estire mis brazos e hice crujir mis dedos, necesitaba relajarme y quitar tensiones.

Así no se vive, malditos profesores amargados.

Muchos pueden pensar que mi profesor es el típico señor mayor, calvo, regordete y con gafas pero todo lo contrario. Es joven, de ojos azules cuerpo trabajado (y qué bien trabajado) y con una sonrisa que te deja ciega, lo peor. Está amargado.

Entre toda la clase intentamos buscarle una chica para que hagan sus cosas y se le suba el ánimo pero resulta que es gay, ahora estamos en la búsqueda de un chico. Ojalá encuentre uno y vuelva algún día a clase un poco más alegre y empiece a repartir sobresalientes. Como soñar es gratis, permitanme hacerlo.

_____: Allá vamos otra vez- me enderecé en mi asiento y eché mi cuerpo hacia delante.

Dos horas y seguía estudiando, al menos avancé unas quince o dieciocho páginas, eché la silla un poco para atrás y sin querer con mis manos golpee los lápices y libros, todos se cayeron haciendo un gran estruendo ya que el suelo era de madera y a la mínima sonaba como una bomba, por muy pequeño que sea lo que se ha caído.