☹ we will n̶e̶v̶e̶r̶ meet again ☹ || נαℓεx

第五个月

Mi espalda chocó contra el colchón de mi cama y tiré la cabeza hacía atrás, suspirando al sentir los labios de Jack en mi cuello. Mordió ligeramente la piel, yendo a por mis labios, mientras su mano se colaba debajo de mi sudadera. Abrí mi boca, dándole acceso a esta.

Nos separamos y, con rapidez, nos deshicimos de las sudaderas y camisetas de ambos que se interponían en nuestro camino, arrojándolas al suelo allí donde cayesen. Sus labios volvieron a mi cuello, descendiendo rápidamente por mi pecho hasta llegar al cierre de mis pantalones. Podía notar mis pantalones estrecharse cada vez más.

Mi novio debió notarlo también porque no tardó en desabrochármelos y quitármelos junto a mis bóxers, mandándolo todo al suelo también.

"Eres precioso." Susurró a milímetros de mis labios, justo antes de volver a besarme.

Y era curioso que dijese eso cuando era él el que era precioso, el que sonreía e iluminaba la ciudad entera.

Su mano no tardó en rodear mi erección y empezar a masturbarme sin dejar de besarme, haciéndome jadear entre besos torpes.

Paró de besarme, pasando a repartir besos por mi pecho, haciéndome jadear con más fuerza.

"J-Jack... Hazme tuyo..." Le supliqué, agarrando las sábanas a mi lado con fuerza mientras sentía una nueva ola de placer recorrerme.

Sin embargo, Jack ignoró mis suplicas, como si no las hubiese escuchado siquiera, y siguió torturándome. Sus labios bajaron por mi abdomen, dejando un rastro de besos, hasta acabar engullendo mi pene.

Arqueé la espalda de placer, acabando por follarle la boca a causa del ritmo dolorosamente lento que estaba siguiendo.

Al cabo de un rato, se separó con una sonrisa burlona dibujada en sus labios. "Que putita más impaciente eres."

Me sonrojé y tiré de él para volver a besarle. Le desabroché los pantalones sin interrumpir el beso, sintiendo su lengua colarse dentro de mi boca y jugar con la mía. Jack se separó para poder quitarse el resto de su ropa y luego volvió a atacar mi cuello.

Jadeé, sintiendo las manos de mi novio recorrer todo mi cuerpo con suavidad, como si fuese una pieza de arte frágil que temía romper.

Sus manos acabaron llegando a mi entrada, añadiendo un dedo.

Me volvió a besar, quizás notando la incomodidad en mi cara y tratando de distraerme con eso. Fue añadiendo más dedos mientras lo besaba con fuerza y desesperación.

Jack me besó una última vez, mordiendo mi labio inferior y tirando levemente de él, y me miró fijamente a los ojos. Su mirada era intensa y profunda, parecía que me fuese a derretir frente a él. Me mordí el labio inferior y vi como sus ojos se desviaban a ellos, lamiéndose los suyos.

"Joder, ¿cómo puedes ser tan sexy?"

Simplemente sonreí como respuesta, notando mis mejillas arder. Jack mordió mi cuello juguetonamente, haciéndome reír, antes de introducir lentamente su miembro dentro de mí.

Solté un gemido profundo. Jack empezó a moverse, aumentando el ritmo gradualmente, jadeando.

Tiré la cabeza hacia atrás y él volvió a posar sus labios en mi cuello, como si aquello hubiese sido una invitación a que lo hiciese. Una de sus manos rodeó mi erección de nuevo y empezó a masturbarme al mismo ritmo de sus estocadas.

A ese punto, mis gemidos ya eran imposibles de callar.

"Eres tan guapo, me pones demasiado." Me dijo al oído, con una voz tan profunda, rasposa y susurrante que sentí un escalofrío subir por mi espina dorsal.