The Only Chance.

Capítulo 3

Caminamos hasta la entrada de la escuela. Había una multitud reunida frente a la fuente de la entrada principal. Nos acercamos de a poco, pero no podíamos ver más allá de las cabezas de nuestros compañeros . Nos metimos en la multitud cuando hallamos un hueco entre la misma. Divisé a Cameron, el chico del último año, y en el otro extremo Carter, enfrentándolo.

Después de unos insultos y gritos, Cameron soltó el primer golpe. Carter lo esquivó, auqnue seguía provocándolo cada vez más con su risa a Cam. Después de golpear solamente al aire, Cameron le asestó un golpe en la nariz a Carter. Sangró.

Aaron quería ayudarle, pero otro chico que se encontraba a su lado lo detuvo, porque sino lo involucrarían a él también.

Levanté la vista y divisé a Pinzger, la directora, acercándose por los escalones hasta este patio escoltada por maestros y el portero. Se escurrió entre la gente, interponiéndose entre ambos chicos.

A medida que la pelea avanzaba nos adelantamos hasta la primera fila. La directora los separó bruscamente, con una fuerza que seguramente se debiese a su ira, por la forma en que Carter cayó sobre Aaron.

-Aquí no hay nada que ver, regresen a sus salones todo mundo.- gritó al numeroso grupo de espectadores.

Nos dividimos de ellos hasta las mesas del almuerzo en el patio externo. Carter se limpiaba la sangre con mi pañoleta de flores que le presté. Entonces, Aaron habló.

-¿Por qué empezaron a pelear?-

Carter recuperó el aliento y suspiró fuerte, hasta el punto de manchar su camiseta con gotas de sangre exhalando el aire. Luego, comenzó a reír. Aaron  yo nos miramos, sorprendidos.

-Es un idiota. - dijo al fin-  Malee lo rechazó para una cita y él la amenazó. 

-No te tendrías que haber metido, sabes lo que te puede pasar con Pinzger y eso, aparte tu beca...no la podés perder... -dijo Aaron. 

-Aaron... ¡es Malee! Sabes lo que significa eso...-dijo Carter, remarcando lo obvio para ellos. 

Llegamos a clase a tiempo, antes de que cerrasen las puertas. Me senté justamente con Malee. 

El día pasó rápido, pero Cameron no había olvidado el conflicto de la mañana. 

Volvíamos caminando a nuestro barrio, hablando de infinidad de cosas, cuando vimos a Cameron y sus amigos en la esquina de mi casa. 

- ¡REYNOLDS!- grito Cameron y empezó a acelerar su paso hacia nosotros. Empezamos a correr calle abajo con ellos pisandonos los talones. Entramos, desafortunadamente en una calle sin salida. 

Cameron levantó del piso a Carter, tomándolo por la camiseta y lo apoyó bruscamente contra un enrejado, golpeándolo contra éste cada tanto, remarcando sus palabras. 

Aaron me tomó de la mano instintivamente y me empujó despacio, detrás suyo, protegiéndome. 

Cada vez le daba más fuerte contra el enrejado. 

-¡CAMERON!- no pude contener el grito. Soltó a Carter y buscó de donde provenía la voz. 

Antes de que me pudiera decir algo, el auto de la policía que solía pasar a cada hora por la calle pasó frente a nosotros y los matones huyeron. 

Levantamos al Carter desplomado en el piso que tenemos gracias a Cameron. La verdad no entiendo que le pasa a ese chico...

Me despedí de mis amigos y entré a la casa. Me acerqué a la cocina y oí a alguien hablando como en mi cuarto, de allí provenía el sonido. Abrí la puerta y ahí lo ví, parado de espaldas a mí hablando por teléfono. No notó mi presencia, aunque me quedé estática ahí. Estaba decidiendo entre salir corriendo y tirarme a sus brazos. 

Me decidí por lo primero. Y hubiese funcionado de no ser porque pronunció mi nombre y me agarró un brazo antes de cruzar el umbral de la puerta. 

-Hola...Matt.-