Yurio se encontraba nervioso y acomodando su atuendo lo mejor que podía, mirándose en el espejo y arreglándose una y otra vez verificando que ni un solo pelo estuviese fuera de lugar, que sus dientes esten brillantes, su ropa bien acomodada y que oliera bien... ¿el motivo? Pues Yurio y Minami habían arreglado para ir a una cita luego de ya tecnicamente saber casi todo del contrario por tantos mensajes que se enviaban a cada instante, lo que era el motivo por el cual vivía pegado a su celular pues con aquel chico tan energético podría hablar hasta sobre una servilleta todo el dia y de por que algunas tenian dibujitos de flores.
Se contaban de todo, desde que vieron una mosca hasta la vez que Victor cometió la mejor estupidez de su vida al igual que hizo el con el resto... Y eso solo fue a solo dos días.
Flashback
A los cinco se le había dado por salir a comer algo y todo paso entre risas por las anecdotas de Pichit hasta que se les ocurrió una magnífica idea... Apostarle a Victor que no podría meter su cabeza en un balde que estaba justo en ese lugar. Yuuri decía que Victor no podría ser tan estúpido como para hacer eso, pero se quedo callado cuando volteo y lo vio con el balde atascado en su cabeza.
Y ahí estaban... Un ruso rubio, un tailandés el cual filmaba todo, un kazajo y un japones corriendo tras el ruso de cabellos plateados que comenzó a correr como loco al no poder quitarse aquel objeto de la cabeza, todos en el parque los veian como los locos del pueblo gritando cosas como "YA CALMATE Y FRENA DE UNA PUTA VEZ", "MINIMO TOCA BOCINA", "CUIDADO CON EL VIEJO LOCO", "SI SE HACE PELOTA YO NO LO LLEVO AL MEDICO", "ABRAN PASO A LA LEYENDA VIVIENTE DE LA ESTUPIDEZ"... Y Victor se detuvo... Si... Cuando choco de lleno contra el árbol.
Luego pudieron sacarle el balde y luego de eso solo fueron por un café y Victor gano 100 dólares junto su café gratis y una foto de Yuuri cuando era bebe.Al rato la siguiente apuesta se hizo presente... Yurio debía colocarse el cono de helado en la frente y salir corriendo gritando "son un puto unicornio que caga helado WIIIIIH"... Lo medito un instante y fue por un helado para luego salir corriendo por la calle gritando que era el unicornio mas bello del mundo mientras el resto lo seguia muriendo a carcajadas exepto Otabek que resistía la tentación del momento pero al final sedio a las risas ganándose una mirada entrenecida por parte del japones.
Las personas los miraban raro pero con la curiosidad de quien haría el siguiente reto pues desde lo que paso con Victor habían comenzado a seguirlos con disimulo. Yurio gano 50 dólares, un peluche de gato y una hamburguesa.El siguiente fue Yuuri quien según Yurio debía besar al mas guapo que viera y gritar "AL FIN PUEDO HABLAR EL IDIOMA TERRICOLA, TODOS ARDERAN" mientras decía palabras como si hiciera un rito satánico y tirarse al mar con ropa incluída.
Aunque no se esperaban que Otabek se negara rápidamente a ello por lo cual todos lo vieron sorprendido... Pero Victor tambien se nego diciendo que SU Yuuri (cosa que molesto por algún motivo al kazajo y molesto a Chulanont ya que según el,Yuuri le pertenecia). Pero cuando se dieron cuenta Yuuri estaba mirando a su alrededor hasta que encontró aquel chico el cual se encontraba con un grupo de amigos, era de cabello castaño claro y ojos verdes algo caídos pero era alto y cuando se dieron cuenta Yuuri salio corriendo para besarlo y salir corriendo mientras gritaba que por fin hablaba el idioma humano y que el gran belcebú estaría orgullo y cuando se dio cuenta ya estaba dentro del mar.
Todos sorprendidos se acercaron riendo ante aquellos chicos disculpándose mientras Yuuri volvía tan mojado como un gato luego de un baño y tambien se disculpo para luego presentarse, Haruka, Makoto, Nagisa, Rin y Rei les cayeron tan bien que cambiaron sus números para seguir en contacto.
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Mi Principe De La Luna (Yuri On Ice)
FanfictionOtabek siempre pensó que todas las historias de amor eran únicamente para los cuentos de hadas y que nunca pasaría algo así en su vida, que era una bobería. Pero todo cambiaría en su viaje a Japón. Mientras que Katsuki Yuuri soñaba con aquella histo...