Mi Principe De La Luna (Yuri On Ice)

capitulo 2

El día llego y cierto kazajo estaba subiendo al avión para partir a Japón, ya que la competencia seria al día siguiente y estaba sumamente preparado para poder ganar aunque sea un competencia menor. Luego de verificar que todo estaba listo y que no se olvidaba nada se dirigió al aeropuerto para así ir a Japón con una pequeña idea de que tipo de personas vería, o mejor dicho... A que personitas vería.

Una vez en el avión decidió leer aquella historia nuevamente debido a que a pesar de ser un cuento para niños y que mostraba mas ilustraciones que palabras, dejaba un lindo mensaje el cual significaba mucho para el kazajo el cual era bastante simple...

"Lucha por lo que amas sin que el resto te diga que hacer"

Un mensaje simple pero con un gran significado y eso era algo que apreciaba.
Luego de haber leído aquel cuento una se quedo dormido esperando a que las horas de vuelo pasen.

Mientras tanto en Japón...

Un pelinegro abrió sus ojos lentamente hasta que con su mala visión pudo divisar que cierto pequeño seguía ahí dormido cosa que le había sorprendido pues había pensado que aquel gatito arisco se había ido a los pocos minutos pero resulto estar equivocado. Dio una sonrisa y se sentó en la cama para agarrar sus lentes y ver la hora -será mejor que les haga el desayuno- dijo en un susurro  para luego levantarse e ir al baño para lavar su cara, sus dientes y luego ir a la cocina para preparar el desayuno para ambos rusos mientras tarareaba.

Luego de unos minutos de haber preparado el desayuno se dirigió a la habitación de un peliplata el cual se encontraba ya despierto.

-oh Yuuri buenos dias- menciono con una sonrisa mientras el pelinegro asentía devolviendo el saludo.

-ya esta el Desayuno-

-wow... En ese caso mejor me apuro-

-esta bien... Iré a despertar a Yurio- volvió a asentir para luego ir a su habitación y ver que cierto rubio seguía dormido, así que entró con cuidado para acercarse al menor y sacudirlo con suavidad- Yurio... Hey...- dijo con tranquilidad viendo como el menor refregaba su ojo y bostezaba para luego sentarse en en la cama y mirarlo de un modo somnoliento.

-buenos... Días... Cerdito- bostezo nuevamente y lo miro mientras este sonreía al verlo, pues estos habían empezado a llevarse mejor y el rubio consideraba al japones como una madre puesto a que siempre que lo llamaba para ver como iba todo en Rusia le decía cosas como: "abrigate antes de salir", "si necesitas algo sabes que puedes llamarme", "si te enfermas no salgas y reposa en cama", "cuidate bien si sales de noche" "recuerda comer y dormir bien para tener fuerzas para patinar" o ese tipo de cosas que de pensar en ello le hacia reír el tono preocupado del mayor.

-buenos días Yurio... El desayuno esta listo.  Así que arriba dormilon- dijo mientras revolvía el cabello del rubio el cual soltó un bufido cosa que hizo que el japonés riera.

-no te rías... Tonto... Ahora voy-

-esta bien... Te espero en la cocina- dicho esto salio para dirigirse a la sala viendo como algunas personas miraban el football y luego de eso fue a la cocina para tomar su café y ver como a los pocos minutos ambos rusos entraban aunque cierto peliblanco con cierta sorpresa en su rostro.