¿Era necesario?
Por lo que veo si.
No lo se.
En realidad, nunca lo sabré.
Nadie más que vos lo supo, sabe o sabrá jamás.
Pero admito que no me lo esperaba.
Es decir, de solo imaginarlo se me hacía imposible la idea de verte realizar tal acción.
Con tal frialdad.
De verdad que no.
Además, de todas las maneras posibles, decidiste esa.
Esa tan...
Me dejaste atónito.
Mis pensamientos ya no tienen sentido, solo fluyen en cualquier dirección sin detenerse ni un segundo.
Ya pasaron dos días y aún no sé cómo reaccionar.
¿Por qué nadie me enseñó cómo actuar en estás situaciones?
No puedo hacer nada.
No puedo hablar.
Mi mente no coordina de manera correcta.
Nada tiene sentido.
Solo puedo observar las caras de los chicos. Parecen fantasmas.
Sus almas fueron arrebatadas de sus cuerpos sin previo aviso.
Se suponía que no tenía que ser de esa manera. Y menos, en este momento.
¿Por qué deicidiste alterar todo?
Por lo menos no le dijeron la verdad de cómo te fuiste.
Pobres chicos.
No se lo merecían.
Yo tampoco.
Nadie, en realidad.
Vos menos.
Lo siento.
A veces me siento mal por no haber dicho muchas cosas.
Por no haber ido todos los días.
Pero igual, vos tampoco venías.
No me estoy justificando, solo trato de quitarme un poco la culpa de encima.
Espero que sepas entender.
Además, no sabía que eras una ladrona.
Una ladrona de esperanzas, de sueños, de sonrisas, de lágrimas, de buenos momentos y malos, de miradas, de rencores, de felicidad...
Te lo llevaste, así nada más.
Me quitaste un peso de encima.
Ahora si, ya no me queda nada.
Nada bueno.
¿Era eso lo que necesitaba?
Siempre creí que ibas a ayudarme.
Y últimamente me hundías
Creo yo que no te dabas cuenta.
O eso quiero creer.
A pesar de todo, tuve que insistir demasiado para que me dejaran ir a verte una última vez.
Mierda.
Me miraron a los ojos y percibí una mirada nueva.
Ya no me veían como a una niño.
Soy diferente.
Algún día tenían que darse cuenta, otra cosa que aceleraste. Supongo que te debo las gracias por eso también.
No quiero sonar egoísta pero jamás hubiese creído que la persona que me ayudó a construirme fuera a ser la misma que me destruyera.
Y no puedo dejar de pensar.
Te dije que me llamaras.
Pero era yo quien tendría que haberte llamado ¿no?.
Perdón por no llamarte.
Estaba bastante ocupado escondiendo las medicinas.
De verdad que no es mi culpa.
Bueno si es mi culpa.
Perdón por haberte arruinado.
Realmente necesito que vuelvas aunque sea un segundo.
¿O debería ser yo quien te vaya a visitar?
Total, ya no me queda nada.
Finalmente entendí eso que no querías decirme.
Y ya no se qué creer.
¿Alguna vez fuiste real?
¿Taska?arreglado el 2/06/2018
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save me from myself
RandomMomentos en los que te entra la inspiración y te sale todo el dote artístico, camuflado en mierda. Pensamientos sin sentidos de una mente incoherente sobre una adolescente de 15 años.