INTENSITY | Harry Styles

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27.

Harry me mira atentamente mientras sigue acariciando mi cabello, no rompe el contacto visual pero tampoco habla por un largo rato.

"No sé, no quiero mentirte." Murmura y yo trato de quitarme de encima suyo. "Quiero estar contigo, Caroline, de verdad."

"Si, Harry, pero ¿bajo qué condiciones? Te molesta que yo este con otros chicos y no tengo idea de si ves a otras y me altera mucho, ¿sabes?" El asiente y ahora no me incomoda estar desnuda frente a el, y parece que a él tampoco ya que sus ojos no se separan de los míos. "No te estoy pidiendo una relación formal, Harry, porque estoy consciente de que aún eres mi profesor, pero..."

"¿Pero que? No te calles ahora, Caroline. Es la primera vez que me dices lo que sientes. Vamos, amor, dímelo y lo tendrás. ¿Que es lo que quieres de mí?"

Observo sus ojos que a pesar de estar en penumbras siguen brillando como siempre, tan radiantes y llenos de vida.

"Quiero tenerte solo para mí."

El sonríe, sus hoyuelos marcándose con el mínimo movimiento de su rostro. Se acerca y me besa con lentitud y suavidad, para después tomar mis manos y depositar suaves besos en el dorso de ambas.

"Lo prometo." Contesta para después tomarme en brazos y volver a recostarme sobre la cama.

Río cuando me llena la cara de besos y sus manos no se apartan de mi cintura; mi corazón revolotea destellando felicidad y mi estómago se siente como si hubiera estado dando vueltas una hora seguida.

"Soy solo para ti si prometes jamás irte de mi lado." Murmura en mi cuello.

Por un momento la idea de Harry y yo juntos en un futuro me hace sentir tan contenta; pensar en el y yo saliendo formalmente cuando ya no sea mi profesor sería totalmente fabuloso e increíble. Sonrío en respuesta y lo abrazo con fuerza sin dejarlo ir por un rato.

"Lo prometo." Le digo, repitiendo lo que el me contesto la primera vez.

Se baja de encima mío y se recuesta a mi lado, alza su brazo y me deja acomodarme con mi cabeza sobre su pecho mientras el pasa sus manos por mi espalda y mi cabello. Mantiene sus ojos cerrados pero la sonrisa jamás abandona su rostro y yo no puedo dejar de admirarlo. La forma en la que sus abundantes pestañas hacen parecer que sus ojos son más grandes, su nariz recta y sus preciosos labios bien formados, agregándole el lunar junto a su boca, mi favorito. Harry es una perfecta pieza de arte, arte puro, arte en su máxima expresión. Tan atractivo como adorable. Su ojo izquierdo se abre y me observa, luego lo vuelve a cerrar y sonríe.

"Duerme, Caroline." Dice divertido con su exquisita voz ronca.

"Pero me gustas." Acaricio su pecho constantes veces, trazando su nombre y el mío con mi dedo índice.

"Tú también me gustas pero quiero dormir, me déjate exhausto. Ten consideración por tu viejo." Lanzo una estruendosa carcajada y el también ríe conmigo.

"Que enfermo sonó eso." Aseguro.

"Calla y duerme." Vuelve a decir, mientras se da la vuelta y me aprisiona entre sus brazos y me planta un beso en la nuca.

Y está vez le hago caso.

[...]

Son las siete de la mañana cuando me despierto por el calor que me está sofocando y descubro a Harry con su brazo y su pierna derecha encima de mi. Me tiene totalmente encerrada entre su cuerpo y la cama y no puedo moverme. Trato de zafarme de su agarre pero el en vez de moverse intensifica su pesadez.

"Harry." Le llamó con suavidad, acariciando su mentón con la mano que me queda libre. "Señor Styles."

"Uhm..." gruñe y sacude sus hombros sin dejar de tenerme cautiva. Sigo picando su cara para molestarle y el se remueve incómodo. Me deja respirar por fin pero vuelve a abrazarme. "Duérmete, Caroline, puedo bajar tu calificación si no obedeces."