36

1.5K 58 8
                                    

36.

Zayn abre la puerta de su apartamento dejándome pasar primero y agradezco que me deje pasar la noche con el. Ahora lo último que quiero es estar sola en aquella casa tan grande y vacía sabiendo que mi padre no volverá. El insiste en que soy su hermana menor y legalmente debo estar con el pero de todos modos no dejo de lado la sensación de darle las gracias reiteradas veces.

"La verdad no tengo nada para comer, iré a ver qué encuentro de la tienda de auto servicio, ¿o prefieres McDonald's?" Pregunta y yo me lanzo boca abajo sobre el sofá desgastado.

"No tengo hambre." Murmuro con la cara pegada contra la tela del asiento.

Siento como Zayn se arrodilla a mi lado y comienza a acariciar mi cabello, aún así no abro los ojos. Me mantengo en mi posición inicial escuchando como suspira y deja de mover su mano.

"Tienes que comer, Caroline. No estás en posición de negarte. Ahora tengo tu custodia, ¿sabes?" Me levanto y el aprovecha para sentarse a mi lado.

"¿Crees que eso es una ventaja?" Pregunto y el frunce el ceño. "¿No me verás ahora como una carga para ti?"

"¿Qué estás diciendo? Por supuesto que no eres una carga..." empieza pero le interrumpo.

"¿Que harás, Zayn? ¿Me llevarás contigo? ¿Pagarás mi colegio? ¿Realmente estás dispuesto a dejar tu ritmo de vida por mi?"

El pestañea varias veces confundido y trata de acercarse pero yo me alejo más bien.

"Contéstame." Pido.

Segundos después, mi corazón se estruja ante la escena que me toca presenciar. Zayn se sienta en el sofá y esconde su cabeza entre sus manos, sus hombros se mueven agitadamente y me arrepiento de haberle hablado así. El no tiene la culpa de nada y lo estoy tratando como si fuera su responsabilidad.

"Zayn, yo... lo siento, no era mi intención..."

"Tienes razón." Habla y levanta la mirada. Jamás lo había visto llorar. Hasta hoy. "Estoy igual de perdido que tú, Care." Rasca su barbilla y me mira. "Pero lo único de lo que estoy seguro es que tú nunca serás un problema para mi."

Siento las lágrimas acumulándose y lo abrazo con fuerza. Al principio no responde ya que se limpia el rostro y me abraza de vuelta segundos después.

"Tenemos que estar unidos más que nunca, no te pongas en mi contra, Caroline." Susurra sobre mi cabello y asiento frenéticamente.

"Perdóname, perdóname, Zayn." El ríe ligeramente y se separa de mi, sosteniendo mis brazos y agachándose para estar frente a frente.

"¿Podemos cenar ya?" Suelto una risita y asiento. "Ponte cómoda, ya sabes dónde está mi ropa. Iré a ver qué encuentro."

Besa mi frente y toma sus llaves para salir del apartamento no sin antes lanzarme un guiño y lograr sacarme una sonrisa. Lanzo un agotado suspiro y me encamino hacia su habitación.

Hay un par de pantalones tirados en el suelo así que me agacho para recogerlos y doblarlos antes de ponerlos en donde supongo es su lugar. Me quito el molesto vestido negro que a estas alturas ya no hacía más que sofocarme y abro el armario siendo recibida al instante con el olor de la colonia de Zayn. Escojo la sudadera más grande que encuentro y me la pongo para después buscar un par de calcetines. Luego acomodo mi ropa para no desordenar el perfecto apartamento de Zayn y cuando estoy doblando mi chaqueta noto que mi celular está ahí. Lo saco, la pantalla se ilumina automáticamente y visualizo seis llamadas perdidas de Harry.

Lanzo un suspiro cansado y me dejo caer en la cama mirando al techo. No me siento con la capacidad de negar que tenerlo aquí conmigo me haría sentir demasiado bien, protegida. Pero si tenerlo debía ser con sus ataques de ira y celos me siento mejor estando alejada de él. Tengo su nombre escrito en medio de mi pecho y aún así no logra comprender cuanto le quiero, cuanto le prefiero por encima de todos, por encima de Jack. Harry ahora es el único hombre capaz de poder tomar mi corazón y romperlo en mil pedazos con un solo toque y eso es algo que no me tiene para nada tranquila. En cierto grado puede decirse que dependo emocionalmente demasiado de él, mi cabeza gira entorno a lo que hace y dice sin importar que y aunque sé a la perfección que eso está terriblemente mal no puedo hacer nada al respecto. Mi vida le pertenece en cuerpo y alma, solo puedo agradecer que aún me queda un poco de cordura para ponerle un alto cada vez que se comporta así.

INTENSITY | Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora