CUANDO EL OTOÑO ACABE (CARGAN)

PARTE 1

-Loggie.

-¿Qué paso Carlos?

Me quite mis audífonos y gire para ponerle atención al moreno.

-¿Te has enamorado alguna vez?

-Si- dije soltando un largo suspiro.

-¿Cómo sabes que estás enamorado?

-Simplemente lo sabes Carlos- conteste algo seco.

-Pero ¿Cómo lo sabes?

-No es como que haya una serie de pasos o reglas para que sepas que estás enamorado, el amor es algo que no tiene explicación, y que tiene significado diferente para cada quien.

-Y tú ¿Cómo supiste que estabas enamorado?

Una ligera sonrisa apareció en rostro tan solo de recordar como me di cuenta de que me había enamorado.

La primera vez que lo pensé, fue cuando Carlos me pidió que lo acompañara con Liz Vennet, una chica de 5° grado, teníamos 11 años y aun así Los se las arregló para comprar un gran ramo de rosas, Carlos se la había pasado hablando de ella desde que entro en 2°, todos los días esperaba a que entrara a su salón, para correr con nosotros a contarnos lo hermosa que se veía.

Paso dos semanas escribiendo una carta, nunca la leí completa pero no hizo falta para saber que decía, solo con ver cómo le brillaban lo ojos a Carlos, la sonrisa que inconscientemente soltaba cada que agregaba algo a la carta, y lo nervioso que se ponía cuando practicaba como dársela, cualquiera adivinaría.

Camine junto con Carlos hasta Liz y su amiga, mi amigo estaba muy nervioso pero supo controlarse, ese día experimente tres nuevos sentimientos hacia Carlos, el primero fue admiración, a pesar de que los nervios y la timidez luchaba para controlarlo el jamás los dejo, le dijo a Liz todo lo que había ensayado. El siguiente fue una necesidad de protegerlo más allá de lo que sentía por Kendall o James, en cuanto Liz le contesto de esa forma tan grosera, el impulso de protegerlo llego a mí con tanta intensidad, que inmediatamente me puse frente a él, le dije bueno le grite a Liz que era una persona horrible y que no se merecía a alguien como Carlos a lado de ella. Tome al moreno de un brazo y lo aleja de esa chica. El solo me abrazo y el tercer sentimiento llego, teniéndolo entre mis brazos supe que jamás encontraría un lugar en el que me sintiera tan a gusto, en el que podría pasar mil años y aun así no los soltaría jamás.

Al principio solo pensé que estos sentimientos eran solo porque Carlos era mi mejor mejor amigo, pero solo fue una mentira que intente creer dos años. Lo siguiente que sentí fue celos, cada vez que Carlos mencionaba lo bonita que era una niña, cada vez que le salía una sonrisa al recordar una cita, y lo peor era cuando contaba que había besado a alguien.

Desde que llegue a Minnesota mi vida la he compartido con esos tres chicos, pasábamos casi todo el día juntos, y aun así anhelaba todas las mañanas poder ver al moreno, así como pasaban los días crecía mi interés por él, crecía mi entusiasmo por verlo, por estar cerca de él, por hablar con él, por saber que a él le interesaba.

De un momento a otro dejo de importarme las palabras de los demás, las felicitaciones de los demás, los abrazos de los demás, los besos de los demás. Mi ser solo quería y pedía los de Carlos, aunque los besos solo fueran en la mejilla, eso era suficiente.

Al menos lo fue hasta que acepte que estaba enamorado de uno de mis mejores amigos. Fue el día en que lo vi besar a Sam ¿Cómo describes el sonido que produce un corazón cuando se rompe?

Algunas personas dicen que si un árbol se cae y no hay nadie que lo escuche no hace ruido, yo creo que el árbol siente el dolor de caerse, e independientemente de si hace ruido o no, le duele más saber que nade se acerca a verlo, que los demás siguen con su vida como si nada pasara. Así fue como me sentí, mi corazón se desmoronaba al verlos, y nadie lo escucho, nadie se preocupó, nadie lo noto. Todo siguió como antes Carlos teniendo uno de los mejores momentos de la vida, a lado de mi James y Kendall mirándolos incrédulos.

-Sabes que estás enamorado, porque... esa persona es el centro de tus pensamientos, anhelas verla, abrazarla, hablarle, haces todo porque sea feliz, porque siempre tenga una sonrisa en su rostro, deseas protegerla de todo y todos, compartes todos sus sentimientos, cuando ella esta enoja lo estás tú, cuando esta triste lo estas peor solo deseas hacer pagar a quien la haya puesto así, y cuando está feliz experimentas la mayor felicidad en tu vida, haces y sientes una infinidad de cosas. Es algo que no analizas, no piensas, solo lo sabes.

Vi que Carlos sonreía tímidamente, sabía que nuestra plática debía terminar en ese momento, sabía que debía cambiar de tema antes de saber, sabía que lo que Carlos me respondería dolería más que quemarse en el infierno y aun así lo hice.

-¿Por qué la pregunta?

-Porque lo estoy.

Sin poder controlar mi boca, pregunte.

-¿De quién?

-Jennifer.

Con tan solo esa palabra Carlos mostro todos los sentimientos que yo tengo cuando lo veo.