"Tenemos que hablar" era lo que decía el mensaje que me había mandado zach.
Decidí que haría lo mismo que con el resto de los mensajes; ignorarlo.
Tomé el camión para ir a la escuela, no quería hablar con zach o alguien de ellos.
Había tomado una decisión, y nadie me haría cambiar de opinión.
Al entrar a la escuela, me recibieron muchas miradas, unas confusas, otras envidiosas y otras sin importancia.
Me dirigí hacia mi casillero y tomé mi uniforme y mis pompones, y caminé hacia el gimnasio.
Hoy teníamos entrenamiento a primera hora, así que aprovecharía y hablaría con la profesora Michelle.
- profesora, ¿tiene un minuto? - dije una vez que terminamos de ensayar los pasos de ésta temporada.
- ¿qué pasa scott? - me miró.
- dejaré el equipo - dije seria.
- debes estar bromeando - dejó su silbato y su libreta en una banca del gimnasio.
Realmente desearía estar bromeando, ser porrista había sido una de las mejores cosas que me han pasado en toda mi vida, pero me estaba consumiendo.
- ¿es por tu calificación en historia? - me miró - porque si es así puedo hablar con el profesor para que te dé una oportunidad .
- no, no es mi calificación - comencé a sentir nervios - es mi decisión .
- ¿tus padres te dijeron algo?
- no, maestra, le he dicho que es mi decisión, yo la he tomado - dije algo cansada de sus preguntas.
- bueno, si es así, pues... - alguien la interrumpió.
- ¡no puedes dejar el equipo! - gritó Jessica molesta - te necesitamos para la temporada - dijo .
- no te preocupes, me iré en cuento termine - dije y salí de ahí.
Para mí mala suerte, zach venía detrás de mi.
