- tenemos que hablar - le dije a zach una vez que entré a su carro.
Habíamos retomado los mismos hábitos que antes, pero no habíamos puesto un nombre a lo que teníamos.
- ¿qué pasa? - dijo encendiendo el auto.
- hemos estado saliendo como si hubiéramos regresado - pausé - pero no estoy segura de que lo hayamos hecho - nos miramos.
- lynn, para mí ya estamos juntos - bajo un poco la velocidad.
- pero para mí no zach - comencé a hablar - quiero decir, jamás me preguntaste si quería regresar o no.
- pues no lo hice porque jamás te negaste a que nos besáramos o fuera a tu casa en medio de la noche - dijo un poco serio.
Era verdad, tenía razón, pero eso no significaba que no tenía que preguntarme lo que quería.
- solo quiero que me des una oportunidad de demostrarte que puedo cambiar - sostuvo mi mano por unos segundos.
- zach ... - me interrumpió.
- vamos lynn - dijo - sabes que puedo hacerlo, solo necesito una oportunidad - dijo estacionando el auto - solo una.
- está bien - me rendí - pero solo una , dempsey- lo señalé.
- te amo - me dio un beso corto.
Después de eso bajamos del auto para dirigirnos a nuestros salones.
Algo dentro de mí me hacía dudar acerca de darle una oportunidad a zach, pero realmente sentía que tenía que hacerlo.
Quería ver si era capaz de decepcionarme una vez más, o si realmente podía cambiar.
