Capítulo 2

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Aterrizamos a las 8:00 de la mañana, el viaje había sido largo y agotador, todos habían dormido durante el vuelo, menos yo, me había sido imposible cerrar los ojos por toda la emoción que sentía, pero ahora moría de sueño, solo quería llegar al hotel y descansar.

—Tendremos que tomar un ferry para llegar a Paradise Island. —Comentó Alex.

Nos acercamos hacia el pequeño stand que se encontraba en un rincón, casi desapercibido.

—El primer Ferry de la mañana sale hasta dentro de una hora — Dijo Ryan mientras notaba los horarios anotados en la madera del stand.

—Muero de sueño no hay una manera más rápida de llegar? —Pregunté.

—Podríamos tomar un taxi aunque el trayecto será mucho más aburrido.

Todos estuvimos de acuerdo.

Cuando llegamos, quedé impresionada, mi novio había hecho una reservación en uno de los hoteles mas lujosos de las Bahamas, Royal Towers.

Entramos y Alex se dirigió a la señorita de la recepción, la cual le entregó las tarjetas para abrir la habitación. Luego regresó a nosotros para poder irnos.

La habitación se encontraba en el piso diecisiete, así que subimos al elevador y en menos de 5 minutos ya nos encontrábamos adentro de la Bridge Suite.

—Oh por dios, hermano esto debió haber costado una fortuna —Dijo Ryan admirando el lugar.

—Puede que con la ayuda de mi papá, haya pagado el hospedaje —dijo Alex encogiéndose de hombros.

—No debiste hacerlo, amor —Dije dándome la vuelta, para quedar frente a el.

—Esto no fue nada para mi padre y lo sabes, bebé —Dijo tomandome de la cintura para pegarme más a su cuerpo y darme un dulce y corto beso en los labios.

—Consiganse un cuarto! —Exclamo Nicole, lanzando una almohada hacia nuestra dirección.

Yo reaccioné rápidamente, usando a Alex de escudo humano haciendo que la almohada aterrizara justo en su cara. Salí detrás de el y fulmine a Nicole con la mirada. —Oops, lo siento Alex —Comentó divertida.

Alex solo rodó los ojos, riendo y negó con la cabeza.

—Yo estoy agotada. Me iré a dormir, hasta mañana chicos —Me despedí. Busqué mi pijama y entré en la primera habitación que encontré, me cambié para después tumbarme en la cama y adiós Baylie.

* * *

—Bay, amor despierta —Alex me llamó, sacudiendo un poco mi hombro y dando pequeños besos en mi cuello para que despertara.

—Mmmm —No logré articular palabra alguna por lo adormilada que aún estaba.

—Anda levantate que hoy vamos al Aquaventure. Ayer descansaste todo el día.

—Donde?

—Yo se que escuchaste bien, anda, te esperamos para desayunar.

—Esta bien, enseguida voy —Me levanté rápidamente, me metí al baño de la habitación, tomé una ducha y me vestí.

Me coloqué un short corto de mezclilla y una playera blanca de cuello v, que casualmente encontré en la maleta de Alex, los puse por encima de mi bikini y calcé unas sandalias negras, solo recogí mi cabello en una cola de caballo alta, tomé mis gafas de sol y salí de la habitación hacia la sala de estar, donde se encontraban Becca y los chicos esperándonos a Nicki y a mi.

—Buenas noches, señorita Hayes -Dice Ryan en tono burlón —. Siempre se levanta tan de madrugada? Creo que aún tenemos tiempo para otra siesta.

Hice todo lo posible por ignorar su comentario pero no pude evitar reír.

—Buenas noches, señorito Davis —Le seguí el juego. —En otra ocasión, no me hubiera levantado, pero ya saben que Baylie no se queda en casa mientras todos salen a divertirse y especialmente si es en las Bahamas.

Todos ríen porque saben que es verdad.

—Baylie y su gran honestidad —Dice Nicki saliendo de su habitación.

Las chicas siempre me dicen que soy demasiado sincera, voy directo al punto, no me da vergüenza decir lo que pienso.

Recuerdo la última vez que las chicas y yo fuimos al centro comercial, había una chica en tacones súper altos y no sabía como caminar en ellos, me acerqué a ella y le pregunté porque usaba tacones si no sabía cómo usarlos, 'hasta bambi camina mejor que tú, cariño' fueron mis palabras. Después de eso no paraba de mirarme mientras se alejaba sin decir nada y las chicas no paraban de regañarme y reír al mismo tiempo.

—Nos vamos? —Pregunta Nicki, interrumpiendo mis pensamientos.

Todos asentimos y salimos de ahí.

Al llegar al vestíbulo, Alex se dirigió a la recepcionista y le dijo algo que no pude escuchar.

—Tendremos que esperar por nuestro auto —Dice Alex, acercándose a nosotros.

—Que auto? —Pregunté.

—El auto que acabamos de rentar —Dice Alex con un tono despreocupado.

—Alex, no gastes más dinero, amor, pudiste haberlo dicho y todos hubiéramos cooperado, verdad chicos?

—Si —Los escuché decir al unisono.

—No pasa nada amor, mi padre está de acuerdo conmigo en no dejarlos gastar ni un centavo, además yo fui el que los invitó, ustedes son mis invitados y no puedo dejar que paguen por mi.

—Tú sabes que todos teniamos años planeando estas vacaciones, Alex, no vamos a dejar que pagues todo por nosotros, tu padre no es el único que tiene dinero —Dice Santi, hablando por primera vez.

—Está bien, está bien, no me maten, cada quien aportará algo, tomaremos turnos y hoy me toca a mi, ya mañana decidiremos a quien le toca, okay? Menos ustedes chicas, eso si no lo permitiré, están de acuerdo?

—Totalmente de acuerdo —Dicen Ryan y Santiago.

Pongo los ojos en blanco y me cruzo de brazos, no me parece muy bien la idea, pero se que ya no podre hacerlos cambiar de opinión. —Está bien —Digo al fin.

—Su auto esta listo, joven —Dice la recepcionista desde su lugar.

Salimos y el coche se encontraba justo en frente de la entrada del hotel.

—Alex simplemente no dejas de impresionarme, estas gastando una fortuna y no nos dejas ayudar —Dice Becca.

—Becca, no seas terca, ustedes no pagaran nada, Santi, Ryan y yo les pagaremos absolutamente todo —Dice Alex, comenzando a frustrarse.

Becca sólo resopló, dándose por vencido.

—Okay, hay que tranquilizarnos, apenas es nuestro primer día aquí y ya estamos peleando, Becca, yo tampoco estoy de acuerdo con la idea de que paguen todo por nosotras, pero nunca los vamos a convencer y vamos a pasar todas las vacaciones peleando y no queremos eso o si? -Digo tratando de callarlos porque si no lo hacía íbamos a terminar como perros y gatos.

What You Got Me IntoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora