Inmutable (sin editar)

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—porque tienes que ser tan arisca?— me refunfuñó mi primo Lucas. Al pobre le gusta darme visitas desprevenidas las cual el debe saber por pasadas experiencias que odio con todo mi ser.
Yo sé lo e dejado saber muy claramente que prefiero que por lo menos me llamen antes de llegar. Necesito prepararme mentalmente.
  Mi tía me invito a comer hoy a su casa y como aun no había llegado el decidió llegar a mi casa y buscarme. Yo que quería escaparme de la invitación y quedarme escondida. A el le gusta hacerme la vida imposible.

—No quiero ir— le dije agarrando mi celular y bajando las escaleras. El ignoro mi comentario y siguió su rumbo hacia la puerta con una sonrisa como siempre acostumbra hacerlo. Se que disfruta molestarme.

De mi hogar a casa de mi tía se podía llegar caminando. Lo mas que me tardo en llegar eran unos 10 minutos. Me gustaba caminar por esa ruta. El paisaje que se veía es pintoresco lleno de flores silvestres y de una que otra ardillas que se asomaba buscando comida.
—te advierto que te voy a presentar a mi novia y un amigo— interrumpió Lucas rompiendo el silencio. —okay—conteste y el me observo por unos segundos un poco ansioso. Creo que esperaba otra reacción de mi. Tal vez que me fuera corriendo otra vez a mi casa. Siempre a sido mi protector y una de las personas que mejor me conoce. Yo confío en el. Lucas me sonrió levemente y seguimos caminando hasta su casa en silencio.

   En casa de mi tía aunque todo es familiar no pude dejar de estar un poco ansiosa. Conocer personas me ponen así. Lucas no perdió tiempo u me presenta a sus invitados tan pronto entramos por la puerta. Lara su novia una mujer alta muy bonita y su mejor amigo Roco que tiene una sonrisa muy encantadora de esas que le llegan a los ojos. Aunque no los conozco e escuchado de ellos en los mensajes que mi primo me escribe y de vez en cuando también me envía fotos de sus acontecimientos. Ellos me examinan. Se que deben ya notar que soy diferente. Gracias a lo mas divino solo hay dos nuevas personas y si son amigos de Lucas se que tienen que ser buenos pero no puedo evitar sentirme nerviosa. Me disculpe con la excusa de ir a saludar a mi tía.

Me fui hacia la cocina donde se encontraba localizada una de las culpable de este evento, mi tía Laura Para pasar el rato mientras ella terminaba de cocinar, le conte sobre mi decisión de contratar a alguien para que empezara lo mas antes posible a trabajar. Mi tía fue la primera que me dio la idea de contratara a alguien para que trabajara en la tiendita, pero me dejo de hablar del tema cuando le dije que tal vez hablaría con  Lilliam. No se por que pero tengo el presentimiento que Lilli no le cae muy bien. Lilliam es la hija del Señor Wilson y Siempre me a caído bien es honesta y genuina. Tal vez un tanto rebelde con sus pelos azules y sus tatuajes pero todo eso lo opaca su tono de voz que es dulce y e aniñada. También le encantan los postres  y todo lo vivo. Aunque tengo que admitir que me encanta el factor de que no fue la persona que mi tía tenia en mente que escogiera para el puesto. Me encanta llevarle la contraria a mi tía. Ella tenia otra candidata para el puesto pero ni loca contrataría a Norma que parece sacada de una revista retro de amas de casa. Es tan perfecta que no puedo confiar en su sonrisa de comercial de pasta de dientes.

  Luego de terminar de comer  y terminar con una porción exagerada de el postre la "jartera"  no me dejaba ni respirar de tan llena que me sentia. El esposo de mi tía el tío Agustino me halo para su covacha en el patio trasero en donde estaba su destilería casera de ron. El estaba experimentando con nuevos sabores y quería que yo fuera a probar sus creaciones.

—¿que crees?— Me pregunto.
—Cual te gusto más?—
Le compartí mi opinión y el hizo un par de anotaciones en su "libretita" que siempre llevaba  en su bolsillo trasero del pantalón. El es una persona bien metódica e interesante.
Siempre tiene algo nuevo que contar y en la forma en el que relata sus datos de información te mantiene con interés. Yo e apreciado el amor genuino que me tiene, Es la única figura paterna que e tenido en mi vida. El siempre se a encargado de protegerme y quererme como una hija. Mis tíos solo tuvieron a Lucas que es 5 años mayor que yo, pero el me protege como si fuera de cristal. Nunca me falto amor ni cariño de parte de mi familia en especial de mi abuela. Mi tia siempre dice que ella me consintió mas que a sus hijos.

La velada termino, Me despedí y me fui antes de que oscureciera demasiado. Ya de camino hacía mi hogar el panorama cambio estaba el sol escondiéndose y se escuchaban los animales nocturnos despertándose. Es increíble como todo puede cambiar de noche. Apresure el paso y llegue rápido a mi casita. La puerta se cerró tras de mi con fuerza por el viento que soplaba. El tiempo ya está cambiando y se están tornando mas frías las noches. Se acerca el otoño tendré que empezar a terminar los pedidos y secar algunas cosas antes del invierno.

El timbre de la puerta sonó y justo un segundo más tarde escuche una notificación en mi celular. "Ábreme " leí en mi pantalla. Baje las escaleras sin ánimo y el fastidioso de Lucas tocaba la puerta otra vez.
—¿Que?! Cual es la emergencia? ¡Estuve en tu casa hace menos de una hora!— le dije inmediatamente al abrir la puerta.
— Me caso, me voy a casar— dijo con la cara radiante de emoción.
— Qué bueno— le dije y trate de cerrarle la puerta en la cara pero el fue mas rápido y pudo pasar.
Subió las escaleras y se situó en es sofa.
—No esperes que te ofrezca nada—le advertí.
Pero a el mi mal trato le resbala como mantequilla y su sonrisa infantil no dejaba de iluminar su cara.
—¿Como sabes que es ella la mujer de tu vida? La conoces hace solo 3 meses — le pregunte.

—eso es fácil, lo se desde el primer momento en que la vi. Me atrajo su aroma, lo supe inmediatamente.—

—Oh..... y me imagino que
Son compatibles. ¿tienen los mismos valores?— dije monótonamente

—Ja! Siempre eres tan compleja— dijo el poniendo su mano en mi cabeza moviéndola despeinado todo mi pelo. — hay cosas que no sé piensan y solo se sienten —. El siempre le encuentra el humor a mi forma de pensar, no me entiende y tampoco pretendo que lo haga. Son una de tantas diferencias que poseemos.

Suspiro y le sonrió levemente.
—Me alegro por ti— y lo digo de forma genuina. Se ve feliz y eso es lo importante.