Antes mi familia y yo éramos muy unidos, solíamos estar conviviendo la mayoría de ocasiones era muy divertido, nosotros vivíamos en Rusia, para ser exactos en la ciudad de Moscú.
Mi familia no era muy extensa solo era mi madre y mi padre más aparte yo, su único hijo Andrey Kozlov, este es mi nombre. Mi educación siempre ha sido en casa, a mis padres no les da seguridad que yo fuera a una escuela pública. Actualmente tengo 10 años voy en la primaria, me gusta jugar mucho con mis vecinos.
Aunque últimamente me he sentido mal no sé porque, a veces cuando hago ejercicio demás me empieza a doler demasiado mi corazón, para mis padres es algo preocupante que un niño le pudiera pasar tal cosa, así que me llevaron a un doctor.
Más tarde habían ya llegado los resultados de mis estudios, mis padres observándolos comenzaron a llorar, no entendía yo la razón tan solo era un niño. Mi madre con lágrimas en la cara me abrazo y trato de explicarme los resultados, me preocupaba mucho ver esas expresiones en sus caras.
-Andrey, tú no te preocupes por los resultados, disfruta tu vida te prometo que siempre estaremos contigo pase lo que tenga que pasar- lo decía con una voz ronca por la tristeza que derramaba en cada uno de esos bellos cristales.
Al día siguiente me desperté muy temprano tenía la curiosidad de saber que me ocultaban mis padres, me acerqué lentamente a mis resultados, lo comencé a leer y parecía una pesadilla en la cual no podía escapar, como un niño de diez años estaba enfermo del corazón. No lo comprendía comencé a llorar, Salí corriendo de ahí, aunque al poco tiempo ya no aguante más, mi cuerpo cayo y sentía un fuerte palpitar en mi... tenía miedo.
Mis padres al escuchar tanto ruido corrieron hasta llegar a mí, ahí llamaron a una ambulancia, la cual no tardó mucho en ir por mí, fuimos al hospital. Mi primera vez en un hospital donde me conectaron varias cosas por medio de tubos, no entendía para que servían o porque dolía tanto.
Cuando creces comprendes más las cosas y así me paso a mí, aunque todavía no estaba listo para saber que iba a venir después. Dos semanas después de aquel accidente pude irme a casa, aunque tenía muchas actividades que para mí estaban prohibidas, y ya me habían dado la razón, aunque me dolió mucho.
Para poder obtener una vida "normal" necesitaba un trasplante de corazón, tenía que ser compatible conmigo, hubo muchas personas que trataron de ayudar, pero me temo que nadie tenía la misma compatibilidad conmigo.
Los médicos dijeron que no nos preocupáramos que lo mejor era cuando creciera y podía ser más fácil encontrar la persona que necesitaba, aunque a veces sentía que solo eran mentiras y falsas ilusiones, también no niego que perdía la esperanza de vivir por más tiempo.
Mi padre trabajaba mucho, él era un gran vendedor de electrónicos, aunque la paga no era lo suficiente y mi madre no tenía muy bien una carrera porque dejo de estudiar para poder cuidarme a mí, aunque trabajaba de vez en cuando como sirvienta de una familia muy rica, pero anteriormente lo dicho no le pagaban mucho y ya no podía trabajar por tener que cuidar una carga como yo.
Todos los días era la misma rutina una y otra vez, siempre me veía en el espejo o la mayoría de veces para poder observar quien se iba a morir pronto y ese era yo, mis ojos eran hermosos diamantes y mi cabello me encantaba porque se acomodaba de una forma que me mirara y me viera bien. Tenía buena autoestima, gracias a las enseñanzas de mis padres.
Un día marcaron a casa, desde el hospital, mi madre no estaba porque había salido a comprar así que conteste yo. Me dijeron lo que había pasado a mi padre lo habían asaltado, el trato de defenderse con todas sus fuerzas para que no le pudieran robar nada, porque la mitad de ese dinero era para los gastos de la casa y la otra mitad eran ahorros para mi operación.
Tan solo al enterarme sentía que me asfixiaban mis propias lágrimas, mis propios sentimientos, y todavía no acababa ahí, sino que también mi padre fue asesinado, le habían disparado, pero llegaron tarde las autoridades lo que significa que estaba desangrándose lo que fue su causa de muerte.
¿Por qué Dios me castigas de esta manera!? Gritaba esto una y otra vez hasta que llego mi madre le conté lo sucedido y ella no lo quería aceptar tiro el mandado y se fue corriendo al hospital dejándome atrás. Tenía mucho miedo no quería aceptarlo tan solo en pensarlo me asfixiaba.
Tiempo después llego mi madre la cual me abrazo y como siempre dando falsas ilusiones o palabras que me animaran, lo cual no servían mucho.
-tranquilo mi amor tu padre está en un lugar mejor tan solo piensa que ahora está con nuestro creador- lo decía sonriendo, pero a la vez queriendo llorar, parecía una loca.
Creo que a veces los adultos son complejos, porque piensan que nosotros los niños somos tontos porque nos lo dicen de una manera como si no supiéramos algo.
Semanas después mis abuelos que vivían en Francia nos fueron a visitar para saber lo que pasaba, claro mi madre les contó todo desde que yo estaba enfermo hasta la muerte de mi querido padre. Ellos se veían tristes y pensativos así que le propusieron a mi madre que nos mudáramos a París la capital de Francia.
Ella sin pensarlo les dijo que no podíamos por mi enfermedad, claro que no eso a mí me afectaría, pero de nuevo ellos entraron como una bala diciendo que eso era lo de menos ellos se harían responsables de nosotros lo que significaría que nos iríamos allá en un avión privado. Mi madre nunca menciono que sus padres eran millonarios, lo que se me hacía muy codicioso, yo rechace la oferta porque quería estar cerca de la tumba de mi padre.
ESTÁS LEYENDO
MISMO CORAZÓN.
Teen FictionEs acerca de Andrey un chico con una enfermedad del corazón que pronto conocerá a Aitor para compartir momentos de su vida junto a el. ¿Que tan fuerte puede llegar a ser la amistad?