Capitulo 5. Aitor.

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 Mi nombre es Aitor Fauré, ¿mi infancia? No sé que es eso, desde que nací no he sido feliz, antes de ser adoptado yo tenía una vida algo difícil, cuando nací los recursos de mi hogar eran muy pocos, mi madre se esforzaba mucho para conseguir dinero para un solo pan. En mi familia éramos dos hijos, mi hermana menor y yo, mi hermana era muy hermosa como mi madre parecían unas lindas muñecas de porcelana, yo las admiraba mucho sobre todo a mi madre. El único defecto de mi hermosa madre era estar aferrada a mi padre.

Mi padre era un hombre que metía a la familia en grandes aprietos, por su culpa nuestra familia cayo en bancarrota el no hacía nada solo ir a emborracharse, y malgastar lo poco que ganaba mi madre en su trabajo lavando ropa en prostitutas. Mi madre parecía ser fuerte e independiente, pero no era así, ella necesitaba a mi padre para poder ser feliz.

Ella misma se ponía la venda en los ojos al no ver la realidad de mi padre él siempre la engañaba día tras día con otra mujer diferente, una de sus locuras más grandes de mi padre que pudo abrirle los ojos a mi madre fue querer vender a mi hermana Alisa, a unos hombres que claro no tenían buenas intenciones.

Claro yo tampoco lo iba a dejar que lo hiciera, entonces comenzamos a empacar las pocas cosas que teníamos y nos íbamos a marchar, pero mi padre no quiso dejarnos ir, sacando así una pistola apuntando sobre la cabeza de mi querida madre, el solo nos amenazaba diciendo que no nos íbamos a ir, teníamos mucho miedo Alisa y yo.

Solo pude escuchar por un momento las palabras de mi madre que decía escapen, yo lo quería hacer no la quería dejar con un maldito maníaco, pero tampoco iba a dejar que lastimaran a Alisa, así que nos marchamos corriendo de nuestro padre yo solo miraba atrás como mi padre furioso golpeaba a mi madre, así deformando cada pedazo de su hermoso rostro, ya no quería observar mas, pero mi instinto no me dejaba, mi padre abuso de ella sexualmente, después asesinándola.

Yo no la pude salvar, pensando en mi hermana nos la tuvimos que arreglar para poder sobrevivir un rato, estábamos siendo emboscados por nuestro padre, y no teníamos donde ir ni que comer, para la pequeña niña que tenía que cuidar no tenía el físico suficiente para sobrevivir muy bien era eso que me preocupaba. Para conseguir comida había veces que tenía que ir a robar un poco al mercado lo cual era algo difícil, había mucha vigilancia y no voy a negar que había otras veces donde no comíamos nada.

La época invernal se acercaba y no teníamos suficientes cobijas y las pocas que teníamos se las di a Alisa, esa noche más que nunca hacia un frio tan mortal que parecía que ya nunca más iba a despertar. Escuchaba pisadas tenía miedo, pero esperaba con tanta fe de que fuera una persona que nos pudiera rescatar, abrí por un momento los ojos y viendo borrosamente vi a una mujer que nos llevó a una casa hogar.

Al día siguiente, a mi despertar pregunte rápidamente por Alisa y las personas que cuidaban de los demás niños me miraban con tristeza y pena. Yo no sabía que pasaba hasta que la mujer que nos salvó me dijo que ella murió por la fuerte helada que vino, sabía que su cuerpo no soportaría un ambiente como el de aquella noche.

Ya no quería saber más de mi vida que más me podía quedar ya había perdido todo, y al quedarme ahí sabía que vendrían personas que no pudieran tener hijos a adoptar, yo lo único que más quería era la dulce venganza hacia mi padre. Escape una noche de la casa hogar, fui en busco de aquel hombre que ocasiono que mi vida fuera más miserable y asesino a mi madre y ocasiono la muerte de mi hermana.

*Continuara...

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