Capítulo 7: Promise.

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Harry sollozaba contra la almohada, ahora sus momentos de soledad le provocaban pánico, las pastillas para poder dormir se encontraban en su mesilla, se habían vuelto indispensables para poder dormir, aunque no alejaban las pesadillas. Se sentía sucio y usado, le habían dicho que era normal ese sentimiento tras una violación, pero eso no hacía que se sintiese mejor, por supuesto que no.

Escuchó un ruido junto a su ventana, y el color desapareció de su rostro, levantandose de la cama y retrocediendo de un salto hasta la pared, buscando algo con qué defenderse. Cogió un spray de pimienta de su abrigo, abriéndolo y listo para fumigar con él a cualquiera que tratase de entrar.

Louis golpeó la ventana con una ladina sonrisa, esperando que el rizado le abriera, y aunque se sorprendió por su actitud, lo disimuló.

— ¿Louis? —El menor no salía de su asombro tampoco, cerrando y dejando el spray sobre la mesa antes de abrir la ventana.— ¿Qué haces aquí?

El mayor entró de un salto, sonriéndole afablemente al menor.

— Estaba preocupado, ricitos, llevo dos semanas sin saber de ti, desde que viniste a darme clases...—Comentó el ojizarco, abrazando al menor.

El rizado se mordió el interior de la mejilla, sintiendo todo su cuerpo tensarse por el abrazo mientras sus ojos se cristalizaban.

— Estuve enfermo.—Aunque intentó sonar lo más normal posible, Louis se percató de que estaba a punto de romper en llanto y lo soltó, poniéndose en cuclillas frente a él y acariciando sus mejillas con suavidad.

— Harry, puedes decirme la verdad.—Susurró con dulzura, realmente preocupado por el menor.— ¿Fue por lo que te dije de tu hermana? Si es así, lo siento muchísimo, yo no quise...

El rizado le indicó que se callara con un ademán y cogió un periódico de su escritorio, lanzándoselo al mayor.

— Página tres, lee la noticia que tiene el titular subrayado en negro.—Estaba a punto de llorar, lo sabía, pero no quería llorar de nuevo frente al ojiazul.


"EL SEXO SIN CONSENTIMIENTO VUELVE A HOLMES CHAPEL"

Ayer, cerca de las 8pm, el joven Harry Styles, con 16 años de edad, volvía a su casa tras pasar el día en la biblioteca municipal, cuando algo que se creía erradicado en nuestro pueblo sucedió.

El joven fue obligado a entrar en un callejón, y allí un hombre al que no pudo reconocer físicamente abusó sexualmente de él. Tras obligarlo a realizar el acto sexual, lo golpeó hasta la inconsciencia y lo abandonó a su suerte. Dos horas más tarde, Stephen Venetti, un vecino de la zona, lo encontró cuando fue a tirar la basura y de inmediato llamó a la ambulancia.

Actualmente el estado del joven es incierto, aunque el doctor ha asegurado lo siguiente: «Tiene graves heridas físicas y probablemente psicológicas, aunque hasta que recupere la conciencia no podríamos saber su estado con certeza.»

Nos encontramos a expensas de saber qué medidas adoptará la familia de Harry Styles ante este ataque hacia el menor, además de ser muchos los que conjeturan que no fuese un abuso accidental, sino tal vez un ajuste de cuentas.

Louis alzó la mirada del periódico al menor, dejándolo caer antes de abrazarlo con todas sus fuerzas, apretando los labios con fuerza. Harry sólo era su conquista, sí, pero eso no impedía que no le importarse algo como aquello.

"No voy a permitir que nada malo te suceda, Harry. Te lo juro." Pensó durante el abrazo, no estaba preparado para decirlo en voz alta.

"Mine" | Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora