Prólogo.
Observaba las hojas de los árboles a mi alrededor, las ramas raspaban mis piernas, brazos y rostro; constantemente tropezaba con las rocas del camino y me hice un gran raspón en la rodilla que me quemaba con cada paso que daba, sin embargo no podía parar, el cansancio comenzaba a apoderarse de mí, el aire que respiraba me asfixiaba y mis piernas temblaban.
En mi mente persistía aquella escena, se había quedado grabada. Lo que había visto podría semejarse a lo contado en las leyendas, pero jamás en la vida real. ¿Cómo era posible? Aquellas personas que tanto amaba. Llegué a sentir que eran de mi familia, pero en realidad solo me habían arrebatado a mi verdadera familia, haciéndola desaparecer para siempre.
Tan solo habían bastado unos segundos para que destruyaran todo lo que amaba y poseía; todo lo que era importante para mí. Tenía 19 años, sin embargo, sentía como si mi vida hubiera terminado. No encontraba un nuevo sentido por el cuál vivir, ni quería encontrarlo. Lo único que deseaba era que todo fuera un sueño, una terrible pesadilla.
Las lágrimas inundaban mis ojos y mejillas, la vista se hacía borrosa, por un momento sentí como si mi corazón dejara de latir. Si lograba salir viva de aquí, juraba vengar a mi familia. Destrozaría a aquellos que los destrozaron. Haría que se arrepintieran por un solo segundo de haber entrado a mi vida. Juré que me vegaría de los Mikaelson, de aquella familia que me había arruinado.
Mientras corría logré ver a Niklaus, la única persona que sabía que jamás habría hecho nada para herirme. Estaba parado bajo los pies de aquel árbol tan importante para ambos. A pesar de mi odio por los Mikaelson mi amor por Klaus era mayor. Corrí hacía él. Sabía que era un Mikaelson pero en este momento sólo deseaba estar junto a él.
Estaba tan cerca de llegar cuando un dolor agudo me atravesó. Igual que si un par de agujas de metal atravesaran mi cuello. El dolor fue tan intenso que grité, grité tan fuerte como pude. Sentí como enterraba sus manos en mis brazos mientras drenaba lentamente mi vida. Cuando creí que me mataría me soltó, dejándome caer al piso.
Llegó toda mi manada y después todos los Mikaelson, mi manada al ver lo que me habían hecho se iban a lanzar a ellos iniciando una guerra que sería interminable, pero llegó la madre de los chicos e hizo un hechizo protegiéndolos, el padre de Klaus me tomó de un brazo y me paró de un tirón, estaba parada pero mi único soporte para seguir de pie era el apoyo del brazo del hombre que me sostenía.
-Anda Klaus, mátala, sólo faltas tú, tus hermanos ya se alimentaron, anda mátala.-Terminó de decir esto y me aventó hacia Klaus, este me atrapó antes de que cayera y se recostó en el piso conmigo en sus piernas, sentía sus lágrimas recorrer mi rostro, al igual que yo el lloraba.
-No padre.-Dijo Klaus con lágrimas en su rostro y viendo a su padre.-Entiéndelo padre ella es el amor de mi vida.
-Finn, Kol.-Gritó su padre y ambos hermanos se acercaron, una sonrisa se marcó en el rostro de los tres hombres.-Ya saben que hacer.
-Finn y su padre sostuvieron a Klaus alejándolo de mi, mientras Kol se acercó a mí me paró del piso y después de eso sentí una vez más dos agujas atravesar mi cuello, pero esta vez sentí como me succionaba la vida a cada segundo, después llegaron Elijah y Rebekah, le rompieron el cuello a Finn, Kol y a su padre, Klaus corrió hacia mí, trato de salvarme pero ya era demasiado tarde, snetí sus labios tocar los míos por última vez y se alejó, llegó Elijah y al igual que Klaus me besó y se fue, finalmente llegó Rebekah y ella se quedó conmigo hasta que mis ojos me pesaron tanto que los cerré para no volverlos a abrir o al menos eso creí, al final del día lo supe, odiaba a Kol, Finn, su padre y su madre, odiaba un poco a Rebekah y Elijah, y ya no sentía nada por Niklaus.
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Always By Your Side (Niklaus y tu) (Temporada 1) >EDITANDO<
FanfictionEs la historia de _______ una chica extraoordinaria que logro captar la atención de los 4 hermanos originales, pero ella tiene más historia que ellos 4 juntos.