Sintió tanta furia acumulada al ver a James semidesnudo con su chica ahí abajo tratando de forcejear, tocándola, haciéndola sentir miedo. Le dolía en el alma y nada nunca le había dolido más que eso. Apuntó a James directamente a la cara aunque hubiera preferido dispararle otra cosa.
- Baja el arma. – le ordenó James. Apretó las manos de Julie aún más fuerte, ella soltó un grito de dolor. Max apretó la mandíbula. – Recuerda que yo soy el que tiene el control ahora - se rió. Julie gritó aún más fuerte al sentir las monumentales manos de James apretarle las muñecas.- Suéltala ahora mismo. – le volvió a ordenar Max. Rozó los dos dedos índices de sus manos con el gatillo de la pistola. – este asunto es entre tú y yo. – le dijo. James se detuvo a escucharlo.
Julie cerró los ojos aterrorizada. – y eso lo sabes perfectamente, ella no tiene por qué pagar por esto.
- ¿Te parece? – James escabulló sus manos entre debajo de las sábanas de su cama llegando hasta las almohadas. Un arma apareció. - ¿Entonces por qué mierda no pensaste en eso cuando violaste a mi hermana? – le gritó. Hizo que Julie se sentara para poder abrazarle el cuello y apuntarle la sien. Ella empezó a llorar, no quería mirarlo, no quería mirar a Max después de lo que sabía de él. Max tragó saliva, Julie lo sabía todo, lo reconocía por su mirada. Quiso mirarla a los ojos mientras James hablaba pero ella nunca le devolvió la mirada.
- Julie no tiene nada que ver en esto- le volvió a decir esta vez más desesperado. - ¡Que la sueltes coño! – gritó. James se rió a gusto. – en todo caso a quién deberías matar es a mí. – le dijo.
James abrió los ojos sonriendo a medias, algo de todo esto le sorprendía en lo absoluto.
- ¿Tú? ¿Dando la vida por alguien? – quiso reírse con ganas. – debo haberme perdido de mucho todos estos años - Max bajó la mirada, a los pocos segundos la volvió a subir. En ese momento tuvo tantas ganas de dispararle a Julie porque ahora si estaba seguro que sería lo que más le dolería a Max y eso solo hacía que las cosas resultaran a su favor.
- James. . . - susurró Max. Si perdía la calma, Julie sería la primera afectada – suéltala por favor. . .
Éste soltó una carcajada.
- ¿Te has visto? – lo miró de pies a cabeza. - Este día iba a llegar en algún momento y no sabes cómo lo estoy disfrutando.
- ¡Mátame a mí! – le volvió a gritar.
- ¿De qué me serviría? – preguntó James. – te irás al maldito infierno de todos modos. – le dijo con toda la furia que había acumulado desde hace cinco años. – Pero no irás solo. – apretó el cuerpo de Julie, ella cerró los ojos y sostuvo la respiración.
- ¡Perdón! – Max gritó. James apretó aún más el cuerpo de Julie. – Perdóname por favor. . . sé. . . sé que lo que hice jamás lo vas a olvidar, que jamás debí haber hecho lo que hice de verdad no sabes. . . no tienes ni la más mínima idea de cuánto estoy arrepentido. . . - murmuró. – Pero Andrea jamás se hubiera sentido feliz por esto. . .
- ¿Tú qué coño sabes de eso?
- Ella nunca te pidió que hicieras esto James. – trató de mirarlo directamente. Sus brazos empezaron a perder fuerza soltando poco a poco el cuerpo de Julie. – No tienes ni un puta idea de lo arrepentido que estoy - le dijo con sinceridad, en verdad sentía en lo más dentro de su corazón que era así.
- ¡Andrea se quitó la vida por tu maldita culpa! – gritó James con lágrimas en los ojos. Julie tragó saliva, por un momento quiso mirar a los ojos a Max y así lo hizo, él le devolvió la mirada.
Y entonces las fuerzas en el cuerpo de James desaparecieron, se sentía débil, pequeño mientras hace un rato creía poder dominarlo todo mientras quisiera. Soltó el cuello de Julie para ponerse a llorar, ella caminó de rodillas con lágrimas en los ojos y unos cuantos golpes hasta el filo de la cama. James se apuntó así mismo en la sien, sintió que debía acabar consigo mismo ahora, que tenía que hacerlo, que su misión acababa ahí, que Andrea se lo pedía así, que ya había hecho sufrir a Max lo suficiente, que solo necesitaba de un "perdóname" y su tarea estaba cumplida. Sentía que Andrea se lo pedía. Miró a Max y tragó saliva.
Julie estaba a salvo, eso importaba nada más, él podía morir si era lo que tanto quería James. Pero al menos se sentía bien consigo mismo, se sentía como limpio, que por fin sus secretos se acaban, que le había pedido perdón aunque sabía que eso no sanaría sus heridas nunca.
- Nos vemos al otro lado, colega. – le sonrió por última vez. Max lo observó dispararse, el sonido entorpecedor del arma hizo que Julie cerrara los ojos. Lo que pudo ver fue sangre manchando las sábanas. Max soltó el arma también, ya no tenía razón para usarla ahora. . . James se había ido. Se había ido por fin, jamás volvería y ojalá en ese momento se estuviera encontrando con su hermana allá arriba. No volvería nunca ni tampoco los secretos de Max, aquellos que se habían borrado por fin y aunque sabía que esa historia había acabado, su castigo aún estaba por venir.
Se acercó a Julie aún sentada sobre el filo de la cama completamente estupefacta. No tenía fuerzas ni siquiera para moverse, todo esto había sido demasiado para ella. Max intentó tomarla de las manos.
- No te atrevas a tocarme. – susurró Julie.
ESTÁS LEYENDO
SECRETOS
Nouvelles~2do libro de la trilogía "El secuestro de Julie" ¿Estarías dispuesto a confiar en alguien que siempre ha ocultado un secreto?