NEW MAN (Aguslina)

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Carolina Kopelioff

Agustín se fue, mi madre estaba insoportable. Por alguna razón desconocida para mí detestaba a mi novio. Ella decía que me merecía algo mejor, pero a mi con Agustín me bastada. Nos amabamos intesamente y disfrutabamos cada momento como si fuera el último. Él me enseño lo que era arriesgarse, por él salí de la burbuja en la que vivía. Aprendí a ver más alla de mis ojos y a vivir todo con más intensidad. Él tuvo que madurar de golpe, a sus diecisiete años empezo a trabajar en una casa de comida rapida para solventar sus estudios. Yo tenía una gran fortuna mientras qué el era lo que se decía de clase baja. El tenía que ganarse las cosas con enfuerzo y trabajando mientras yo con solo pedirlo tenía todo al alcancé de mi mano. Vivíamos dos realidades diferentes pero siempre lo supimos sobrellevar y sobre todo nos complementamos. El me hacía ver la realidad y yo lo hacía soñar, intentaba mostrarle que todo es posible. Quería que Agustín pudiera hacer todo lo que se proponía.
El pasillo que llevaba a las habitaciones estaba desierto, caminaba buscando algo interesante que hacer. Llegué hasta el despacho de mi papá siempre cerrado, tan misterioso. Toco la puerta y se abre, entro y veo varios papeles arriba del escritorio. Empiezo a leer, eran contratos y papeles con números y cantidades de algún producto. En letras más oscuras se encontraba la palabra Cocaína.
¿Mi padre era narcotraficante?

N O T A
Ahora empieza lo bueno
Las leo
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