Enamorado del enemigo

15-Una historia

-Luchen-dijo el líder del Consejo Espacial de ese entonces sentado en su trono
Dos chicas, ninguna reconocible por sus vestiduras de guerreras de alto rango y máscaras para ocultar su identidad como parte de esta actividad de entretenimiento para el arrogante líder. Y su hijo, un estrella nómada como su padre, pelirrojo y de ojos color rosados y pupila negra miraba con atención a la guerrera a la cual solo se le notaba su corta cabellera castaña.
Esta logró empujar de una patada a su contrincante al suelo y la dejo allí apuntando con su espada.
-He ganado-murmuro bajo la máscara
La otra se quito lo que le cubría el rostro revelando a una mujer de tez celeste, cabello largo y blanco y un peculiar lunar en forma de corazón aún en el suelo. Miraba a su enemiga con rencor.
-¡Buena pelea chicas! Pueden retirarse-aplaudió el mayor
La peli-blanca se apuró a ponerse de pie y empujar con el hombro a la castaña.
La otra se quitó su máscara mostrando a otra estrella nómada de pelaje anaranjado y cabello café. Se acercó al hijo del líder y los dos se abrazaron, mientras que la otra mujer miraba con odio y enojo.
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-¿Wander? ¿Podemos hablar?-preguntó Hater cuando regresaban
-Como sea, no me interesa-desvió la mirada
-Escucha....quisiera saber por qué me tratas como si me odiaras así de repente. Y ahora no voy a dejar que evites mis preguntas-
-No quiero hablar de eso-
-¡No empieces Wander! Quiero saber si hice algo mal y remediarlo-
-¡Fuiste tú mismo!-
-¡¿Qué?!-
-Lo siento pero debo confesarlo. Aunque estoy seguro de que somos solo amigos... Te amo Hater. Como no tienes idea. Te amo-

-¿Wander? ¡Wander!-
-¿Eh?-volvió a la realidad
Así que esa confesión fue solo mi imaginación pensó
-¿Estás bien?-
-Sí, lo estoy-contestó cortante
-...-
Después de un rato más de viaje en la nave llegaron a la casa en la que Dommie y James jugaban en el porche y Bottie los cuidaba.
-¡Mamá debo preguntarte algo!-irrumpió Wander en la casa
-¡No me grites! Puede que no nos llevemos muy bien pero eso no quita el hecho de que soy tu madre-
-Sí, como sea. ¿Por qué odias tanto a Entozoa? Digo, todos la odiamos aquí-todos los allí presentes, menos James, Dommie y Bottie, asintieron-Pero creo que tú odio es mucho más grande-
-¡¿Si te lo digo no volverás a hablar sobre esto?!-
-No te prometo nada pero....-
-Bien. Sientense, que no tengo ganas de repetirlo. Todo comenzó cuando conocí a tu padre...-
-Espera... ¿Mi padre? Pero ¿qué tiene que ver con tu odio hacia Entozoa?-
-Ya verás hijo... Ya verás... En fin, él, como ya sabías, era el heredero al trono del Consejo Espacial. Él tenía a muchas pretendientes, una de ellas, Entozoa cuando era muy joven, ella era una guerrera del ejército A y yo era su compañera. Yo no estaba interesada en él, pero él en mí sí, al final logró convencerme y quedamos juntos en secreto, una relación así era por una parte prohibida así que debía quedar en secreto hasta que fuera el líder. Entozoa era sumamente competitiva conmigo y yo con ella, éramos las guerreras estrella del rey, en especial yo. Cuando él ascendió al trono pudimos sacar a la luz nuestra relación, y Entozoa, ella terminó por odiarme mucho más. Ella quería venganza, y cuando supo que tuvimos un hijo ese rencor supero los límites a gran escala. Mi deber era proteger a tu padre, pero cuando él descubrió que Entozoa planeaba asesinarme él optó por evitarlo a toda costa.... Y acabó por sacrificarse. Murió frente a mis ojos sin que yo pudiera hacer algo.... Y ella, no se quedó satisfecha, me buscó pero jamás me encontró. Ahora quiere tener bajo su poder a toda la galaxia pensando que yo no estoy allí para hacerle frente. Ella me quitó algo que amaba... Y yo planeo quitarle su gran sueño-finalizó apretando los puños-Es todo. Debo preparar algo de cenar-

-Escucha... Debes buscar a esos chicos de nuevo...pero no demasiado pronto, si quiero recobrar mi forma joven necesito tiempo..... Pero debes hacerlos sufrir... En especial al torpe de Wander... Y a Harper...-explicó Entozoa
-Sí su majestad-contestó Lindy inclinada ante ella, con un color púrpura que llenaba por completo sus ojos, ocultando sus pupilas