ShadAmy - After days

¿Problemas con el sueño?

Ya han paso cinco días desde esa noche decisiva, cinco días tras la finalización de los extraños hechos que nos llevaron a este punto insospechado.

Les daré un pequeño introductorio, antes de pasar a explicar qué ha sucedido tras esto.

Como recordarán, Shadow decidió permanecer aquí en la villa, a pesar de no tener sitio en el cual quedarse. A manera de agradecimiento, ofrecí darle hospedaje a lo que encontrara un lugar en el cual poder vivir.

En un principio me sentí avergonzada por mi propia propuesta, pero le resté importancia pues no había nada de malo en convivir al lado de quien supone ser tu pareja.

La idea es que tomara como su habitación mi sala, pues mi casa no era muy grande y cuarto de huéspedes no tenía, mucho menos podía permitirle dormir en mi cuarto conmigo, eso ya era demasiado e indecente. Ya no estábamos en el bosque, no existía justificación para quedarnos juntos compartiendo un espacio reducido.

Muy bien, con todo aclarado saltemos al asunto.

La primera noche todo transcurrió de manera muy normal y corriente, Shadow no puso ningún problema con quedarse en el sofá. A la mañana siguiente tomamos juntos el desayuno, y luego de eso nos dispusimos a pasar un muy buen día paseando por el Green Hill. Debo admitir que no pasamos nada desapercibidos, pero de momento esa es historia para otra ocasión.

La segunda noche... Bueno, esa sí tuvo un inconveniente. Nos fuimos a dormir tras despedirnos y darnos las buenas noches. Transcurridas algunas horas, algo pesado me sacó de mi sueño, sentía una extraña presión contra mi pecho. Al abrir mis ojos, me encontré con el cuerpo de Shadow apoyado contra el mío, se encontraba profundamente dormido tomándome como almohada.

-Pero... ¡¿Qué demonios crees que estás haciendo?! -Grité al sacudirme con violencia. Obviamente él se despertó en el acto, y de bastante malhumor, por cierto.

Con un gesto cargado de fastidio, me retó muy enfurruñado. -Estoy durmiendo, ¿Acaso qué más iba a hacer? -Cuestionó tratando de no perder la paciencia aparentemente. -Y tú... ¿Por qué estás gritando? Mejor duérmete.

Sin siquiera dejarme protestar, se giró dándome la espalda, al poco tiempo pude escuchar su suave respiración cargada de paz. ¿Qué se le iba a hacer? Nada puede contra su fuerte carácter, así que lo dejé pasar.

La siguiente noche mientras me encontraba profundamente dormida, nuevamente ese incómodo peso me despertó. Shadow permanecía apoyado contra mí durmiendo cómodamente, vaya atrevimiento.

-De nuevo... ¡Shadow, quítate de encima! -Grité avergonzada. Él se despertó al instante, se le veía aún más irritado que la noche anterior.

-Sinceramente... No puedo entenderte del todo, Amy. -Sin decir más, se giró dándome la espalda.

Quien no le entendía era yo. Quisiera saber, ¿Por qué diantres se metía a hurtadillas en mi cuarto, para invadir mi cama? No puedo decir que me disguste dormir con él, pero aún es muy pronto, comenzamos a salir hace muy poco y aún quiero terminar de familiarizarme con él. El punto es que, está muy mal que rompa un acuerdo.

Me sentía muy cansada como para seguir dándole vueltas al asunto, así que emulándole me di la vuelta y finalmente me dormí.

Como notarán el bucle, el tema se repitió en la noche posterior a esa. Shadow me despertó con su peso, y en esta ocasión me tenía abrazada contra él. La vergüenza invadió mi cuerpo, pero también un muy bonito sentimiento, así que nuevamente se lo dejé pasar.

A la cuarta noche esto ya se había convertido en rutina, y con fuerte convicción me decidí por parar con esa locura a la siguiente noche.

Para no hacer más problema, decidí quedarme despierta a espera que Shadow entrara por la puerta, para así dejarle en claro que no iba a acolitar más su persistencia. Pasó una hora, pasaron par horas, pasaron más horas, Shadow no aparecía y ya me sentía demasiado agotada. Curiosa por saber qué había sucedido con él, me levanté con dirección a la sala. En el sofá, Shadow se encontraba acostado leyendo un libro, parecía encontrarse en el mismo estado que yo.

-¿Conseguiste dormir bien? -Me cuestionó al sentarse dejando el libro a un lado.

-La verdad es que no... -Le respondí un poco confundida, no entendía el porqué de su pregunta.

-Me respondiste esta vez más lúcida... Entonces, no has pegado el ojo ¿Verdad...? -¿Esta vez? Ahora sí que mi cabeza había hecho un boom.

-¿Qué quieres decir con eso? No te entiendo nada... -Pregunté totalmente perdida, no tenía idea del hilo de la conversación.

Tras un suspiro pesado, continuó. -Créeme que yo tampoco... He de suponer que entonces caminas dormida. -¿Yo soy sonámbula? Completamente imposible. -Cada noche has venido hasta aquí lloriqueando, diciendo que no querías estar sola en tu habitación. -Ahora todo estaba claro, en ningún momento Shadow había sido el problema ¡Sino yo misma! -Me he ablandado demasiado... Siento molestia al verte... Preocupada.

Sentí un calor en el pecho, sus palabras me conmovieron. Sin dudarlo o siquiera pensarlo, me eché a sus brazos. No cabe duda de que Shadow es un personaje muy especial, y el poder descubrirlo al completo me llenaba.

-Quedémonos lo que queda de noche aquí... Por favor. -Le pedí a lo que él sin protestar, se volvía a recostar conmigo entre brazos.

Comprendí en ese instante, que mi subconsciente trataba de decirme con afano, que no puedo estar lejos de él y me siento muy feliz al notar que ese huraño siente igual que yo.

FIN.