10. Te echaba de menos..

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NARRA AQUILES:

Tras la reunión  nos acomodaron en varias habitaciones. La mía era enorme con una cama blanca con dosier con un gran ventanal cubierto por sábanas blancas que daban a un balcón desde el q se veía toda la playa y estaba muy cerca de la habitación de mi princesa.

Oí como se abría mi puerta y se cerraba deprisa, me giré y su alteza apareció por la puerta cubierta con una capa marrón, con el pelo cogido con enganches de oro, estaba hermosa.

Vino corriendo hacia mi y empezó a besarme como si de ello dependiera su vida, solo con un par de besos yo ya estaba listo para introducirme.

- Dios mío estaba tan preocupada no sabía si mi padre se lo creería o no yo esta...

Athe me tiro sobre la cama poniéndose encima de mi, comenzó a bajar por mi cuello besado, lamiendo y mordiéndo, calentando me de tal manera que podria que explotaría en cualquier segundo. Su boca siguió descendiendo por mi pecho donde lamió y mordió mis pezones haciéndome gemir. Athenea con una sonrisa engreída en sus labios siguió bajando llegando a mi polla. Empezó a besarla y poco a poco la fue introduciendo en su boca, mientras su lengua recorría mi longitud de arriba a abajo. Cada vez mi polla se hundia más en su boca, ella lamia más fuerte y no puede aguantar más, lo único que pude hacer fue gritar su nombre.

NARRA ATHENEA:

Trague todo su semen y eso pareció gustarle pues ya tenía otra gran erección. He de reconocer que jamas habia visto a un hombre con un tamaño tan grande.

Aquiles me dio la vuelta quedando él encima y empezó a besarme el cuello mientras me susurraba lo hermosa que era y lo afortunado que era el de tenerme, yo solamente podía gemir.

Al notar mi excitación levanto mi vestido y me penetró con fuerza haciendo que un grito saliera de mi boca.

- Llevo toda la mañana pensando en esto no podia concentrarme en nada salvo en hundirme tan hondo en ti que nada pudiera sacarme.

Empezó a salir y entrar con fuerza y rapidez- esto iba a ser rapido pero muy bueno-. Una temprana oleada de placer partio en dos mi cuerpo y Aquiles al notar mi orgasmo gruño y me follo más fuerte haciendo que el placer me agora llegando a correr de nuevo  junto a el, jamás había sentido algo tan placentero.

Quedé sin fuerzas y sin darme cuenta me dormí en sus brazos.

NARRA AQUILES:

Jamás había disfrutado tanto con una mujer ninguna me había hecho gritar de placer ni me habían hecho acabar tan rápido.

Al salir de ella me di cuenta de que estaba dormida y me tomé mi tiempos para admirar su belleza, jamás entre tantos lugares y mujeres había visto algo tan hermoso como ella. Así, con ese pensamiento me quedé profundamente dormido, sin darme cuenta de que alguien nos había visto...

Os amo gracias por el apoyo sois los mejores por cierto he empezado otra novela se llama Egipto y siento no subir tanto tenía tantas ideas que no sabía cuál elegir. Os amoooo😍😍😍.

Aquiles, el guerreroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora