15: Confesando​ sentimientos

1.7K 61 41
                                    

14 años después...

Las hadas y Especialistas estaban en Alfea para despedir a sus hijos. Los chicos, se iban a unas vacaciones a las costas de Linphea.

Tras el duro año de trabajo que habían tenido en sus respectivas escuelas, habían decidido que ir de vacaciones era lo que ellos necesitaban. Y aunque Abilene, Liam, Evan y Zarail aún no habían empezado sus cursos, decidieron ir con los chicos.

Para elegir el lugar, hicieron votaciones y las playas del planeta de Flora salieron vencedoras.

En la nave, Vilen, Deniel, Cori y Mark, un amigo de Kail, se encargaban de manejar el aparato que los transportaba.

—¡¡¿¿Cuánto queda??!! —gritó Evan quejándose igual que siempre.

—Evan, para ya, pareces tu madre, siempre quejándote. —dijo Jara y provocó que todos a excepción de la princesa de Solaria rieran a carcajadas.

—Qué quieres, no hay más remedio, ella salió a mi madre y yo a mi padre. —dijo Bastian presumiendo y consiguió que Iliana riera ante su comentario, cosa que no ocurría desde hacía mucho tiempo.

—Chicos, bienvenidos a nuestro destino, las playas del sur de Linphea. —anunció Vilen.

                                ❤

Una vez instalados, —Hope, Illiana y Abilene dormían juntas; Cori, Jara, Zarail y Evan juntas en una; Bastian, Steban y Liam en otra; y Vilen, Deniel, Kail y Mark en la última— bajaron a la playa a disfrutar de las vacaciones y del sol.

—Venga chicos daros un poco más de prisa que me aburro mucho. —pidió Cori sentada en su tabla de surf, cansada de esperar a que llegaran Deniel y Vilen.

—¿Sabes Cori? No todos podemos ser tan rápidos como tú. —dijo Vilen acercándose a ella a paso de tortuga.

—Además tienes ventaja, tu madre y tu sois las hadas de las olas. —protestó Deniel. —Estamos en desventaja.

La morena resopló y nadó hacia sus primos. Al llegar, los tres una empezaron guerra de agua, que acabó mojando a Evan, que se encontraba con Zarail tomando el sol.

—¡Vosotros! —se levantó de su toalla cabreada y se lanzó al agua a por ellos.

La pelirroja observaba divertida la escena y se percató de que su hermana no estaba por allí.

—¿Alguien ha visto a Hope o a Steban? —solo quería saber de su hermana, pero sabía que allá donde fuera Steban iba Hope.

Illiana y Jara que estaban juntas haciéndose trenzas y otros​ peinados, negaron. 

—Si, han ido a explorar —comentó Bastian entre risas.

—Y yo que creía que ya nadie exploraba. —Kail se metió a la charla e invitó a Zarail a unirse a ellos. —Y menos chicos de 19 y 18 años.

—Seguro que ha sido una buena excusa para pasar un rato a solas. —Mark entró también en la conversación.

—¿Y de que hablabais?

Así los cuatro estuvieron comentando sobre sus cursos y de cómo querían que fueran los siguientes años.

Mientras, no muy lejos, la joven rubia, miniatura de su padre y el joven de cabellos grises, paseaban por el bosque cogidos de la mano. Ambos estaban muy felices de haber llegado a la conclusión de romper aquella promesa que se hicieron hace años: no volver a besarse jamás. Aprobarla fue una acuerdo mutuo, y romperla también.

Winx Club: lo que pasó después de la última batalla. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora