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Valentina y su pelinegra amiga Malena se encontraban en él centro de la ciudad buscando él regalo para Agustín pues se acercaba su cumpleaños y como todos los años desde que lo conoció siempre le había regalado algo, nunca faltaba su regalo para él. Llevaban ya dos horas caminando y no habían podido encontrar lo que quería, él chico había deseado con todas sus ansias una guitarra y la rubia no podía encontrar la adecuada, ya habían visitado cinco tiendas de música, pero las que le enseñaban a ella no la convencían.

-Ay valu, ya estoy cansada, ¿y si volvemos mañana?- le dijo su amiga.

-Vamos a la ultima tienda y si allí no la encontramos venimos otro día- esta asintió y siguieron caminando, cuando iban a pasar la calle en la esquina la rubia diviso una tienda de música, cogió a su amiga del brazo y fueron hasta allí.

-Buenas bienvenidas, ¿Qué se les ofrece?- pregunto él vendedor.

-Estamos buscando una guitarra- respondió la rubia.
Este asintió y las dirigió hacia él sector de las guitarras había una gran variedad de colores, tamaños y estilos. Pero entre tanta variedad la rubia vio una que le pareció hermosa.

-Quiero esta- dijo decidida y él hombre asintió la descolgó de allí y luego fue a ponerla en él estuche.

-Son doscientos mil pesos- esta asintió y saco de su bolso la plata había estado ahorrando desde hace mucho para esto, se lo entregó y luego salieron de allí con la guitarra en mano, estaba feliz pues por fin él castaño tendría su tan anhelada guitarra.

-Valu, debes estar muy enamorada para gastar tanta planta en un regalo para él- dijo su amiga y tenia razón nadie seria capaz de regalarle algo así a su “amor” no correspondido.

Mientras la rubia sonreía y estaba feliz no sabia lo que se le venia.

(…)

Se encontraba sentada en él portón de su casa esperando a que Agustín pasara por ella, vio como un auto paraba enfrente de ella, se paro cogió su mochila y luego camino hasta él auto, cuando llego abrió la puerta del lado del copiloto y se adentro.

-Hola bebe- saludo él castaño y luego le dio un beso en la mejilla.

Ella se abalanzo hacia él y lo abrazo.

-Feliz Cumple años- el castaño cerro los ojos por un momento. En los brazos de ella se sentía cómodo.

-Gracias- se, separaron y luego comenzó a conducir hasta él colegio.

Una vez llegaron se despido del castaño y luego se bajo para comenzar a caminar hasta él colegio.

Escucho él timbre sonar y se dirigió hacia su primera clase que era Filosofía, odiaba con su vida esa clase. Entro al salón y se sentó en su puesto, frunció él ceño al no ver a male allí, pero luego pensó que de seguro se quedo dormida.

-Hey Zenere- la llamaron esta volteo hacia atras para ver al grupo de los populares. Ella no era popular, pero tampoco era de las invisibles, por llamarlo así simplemente se encontraba en él medio.

-Me entere de que serás la nueva capitana del equipo, pero no te lo dejare tan fácil- hablo Cece esta frunció él ceño, pues no estaba enterada de aquello.

Iba a responder pero en ese momento entro él profesor y detrás de él venia Malena, sonrió al ver a su amiga.

(…)

Se encontraba ya en la casa de Agustín, pues aquel había decidido celebrar su cumpleaños con una fiesta. Solo se encontraban amigos cercanos sus padres y uno que otro Familiar, había llegado con su amiga pero esta apenas pisaron la casa desapareció.  Se encontraba en la sección de bebidas, cogió una gaseosa, pues al ser menor de edad no se le permitía consumir alcohol. Se acerco donde Agustín estaba, lo tomo de la mano y lo dirigió hacia un rincón de la casa.

-¿Qué pasa?- pregunto este con su ceño levemente fruncido.

-Te quería dar tu regalo de cumple años- volvió a tomar la mano de aquel y lo dirigió a su habitación.

Este la miro con él ceño fruncido pues no entendía que pasaba. La rubia se agacho y busco debajo de la cama sacando un gran estuche.

-Feliz cumple años- estiro la guitarra y él la miro sorprendido la tomo y miro incrédulo el objeto, lo dejo en su cama y se abalanzo hacia valentina y la abrazo.

-Sos lo mas Te quiero- esto hizo que la rubia sonriera- ven vamos a bailar.

Salieron de allí y comenzaron a bailar y a pasarla bien.

Sin darse cuenta de que alguien los miraba desde un rincón, la pelinegra sonrió y decidió que era hora de dar su “pequeño” regalo al castaño.

Hola!!

Lo de la plata esta en pesos Colombianos.

Ahh y gracias por 1k de leídas los Amo.

Espero que les guste

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Mi Chofer|| Agusnere Donde viven las historias. Descúbrelo ahora