II

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Daehwi volvió al mismo lugar al otro día, de todas formas no tenía más opción, ya que la calle seguía en reparación.

Con la diferencia de que su día le sonreía totalmente. Ya no era como el día anterior, en donde ni su mejor amigo había ido a clases.

Hoy nada malo le había sucedido, y tenía la suerte de que ya no llovía.

Parado en el mismo lugar bajo el árbol, había dejado pasar el transporte que lo llevaba a su casa. Quería ver a Dongho, para devolverle su paraguas, y siendo sincero, no tenía demasiadas ganas de devolverle el gorro que llevaba calzado hasta las orejas. Era demasiado calientito, y le gustaba ese particular olor que tenía.

Veinte minutos después, Daehwi comenzaba a perder la esperanza. Miraba hacia todos lados en busca de su "pequeño" milagro, como le apodo mentalmente, aunque de pequeño no tenía nada.

Con el puchero que solía acompañarlo casi siempre, estiró un poco más su cuello en busca de Dongho, no queriendo abandonar la esperanza.

- ¿Buscas a alguien?

Daehwi dio un respingo del susto y se llevó la mano al corazón mientras se daba la vuelta a toda velocidad por la adrenalina.

- Oh Dios, no hagas eso - con fingida molestia, le dio un ligero golpe en el brazo al dueño de su pequeño infarto.

- Lo siento, quería ayudarte a encontrar a quien buscabas - Con una sonrisa, Dongho se encogió de hombros.

- Te buscaba a ti... - hablo en voz baja Daehwi, jugando con sus manos cuando la adrenalina se fue de su cuerpo.

- ¿A mí? ¿Para qué?

- Quería devolverte tus cosas y darte las gracias por lo de ayer... fuiste demasiado amable conmigo - Daehwi estiró sus manos con el paraguas y espero hasta que Dongho lo tomó. Realmente esperaba que no le pidiera el gorro.

- No tienes porqué, yo quise ayudarte.

Ambos se miraron por un segundo. Dongho tenía una sonrisa casi invisible en sus labios, aquel muchacho le daba mucha ternura y había notado que llevaba su gorro puesto y no parecía tener ganas de quitárselo.

- Si quieres puedes quedarte con el gorro - le ofreció Dongho.

Daehwi quiso morir de la ternura. Aquel desconocido no paraba de hacer cosas lindas por él y ni siquiera lo conocía. ¿Sería muy atrevido si se quedaba el gorro? De pronto se sintió mal por querer quedarse con cosas que no eran suyas.

- No, no, es tuyo, no podría...

- Oye - lo interrumpió Dongho - Quiero dartelo, quedatelo. Me gusta más como te queda a ti.

Daehwi estaba oficialmente muerto. Era el hombre más dulce de la tierra, tierno, amable, tan distinto a su apariencia.

- Gracias.

- No es nada... oh, ahí está mi bus, me tengo que ir... - Dongho tenía una mueca en su rostro. Y a diferencia del dia anterior, no se fue enseguida, sino que se quedó ahí en espera de que el otro le dijera algo, pero otra vez Daehwi se había atorado con sus propias palabras - ¿Puedo saber como te llamas?

- Daehwi - respondió - yo... me preguntaba si... ¿Podemos hablar mañana? Aquí...

Dongho sonrio complacido.

- Claro, te daría mi número pero de verdad que me tengo que ir, adiós, ve pronto a tu casa Daehwi.

Daehwi se quedó bajo el árbol, sonriendo como idiota.

Casi se sentía como estar imaginando al hombre perfecto, como si su imaginación hubiera creado a Dongho para sacarlo de su mal día.

Pero no podía estar tan loco.

Claro que no.

~¤~

Un nuevo día y ésta vez el sol brillaba en lo alto.

Daehwi estaba bajo el árbol, jugando con su teléfono un juego cualquiera mientras hacía la hora para ver a Dongho.

Estaba afirmado de lado en su árbol favorito.

Levantó la mirada cuando alguien se apoyó en el lado del cuerpo que tenía libre.

Dongho le sonreía radiantemente.

- ¿Buscas a alguien? - Lo molestó el pelinegro.

- Me está aplastando en estos momentos - Respondió Daehwi contagiandose de la sonrisa.

- Lo que pesa es puro músculo - alegó Dongho mientras se enderezaba, alejándose del cuerpo ajeno - Daehwi ¿Que te parece si vamos por algo de comer? Tengo hambre, acompañame.

Dongho había pensado todo el día anterior alguna excusa para no irse enseguida, para quedarse un rato y conocer más a Daehwi.

- Claro.

Juntos, caminaron por donde Daehwi había llegado.

Dongho llevaba las manos metidas en sus bolsillos en gesto relajado y Daehwi no podía parar de jugar con sus manos.

No lo ponía nervioso hablar con el contrario, porque se le hacía muy fácil. Le gustaba aquella forma tan relajada en la que hablaban, como si se conocieran ya.

Pero lo ponía nervioso que una vez que se conocieran, no tuvieran cosas en común, y se volviera alguien aburrido para aquel perfecto chico.

- ¿Qué piensas? - le preguntó Dongho mientras caminaban.

- Nada, nada. Dongho, nunca te había visto antes ¿No es raro?

- Por tu uniforme, veo que aún estudias, eso lo explica.

Daehwi confundido ladeo su cabeza - ¿Qué tiene que ver eso?

- Que tienes como 16 o 17, y mientras tu estudias yo estoy trabajando y salgo más tarde, por eso jamás coincidimos.

Dongho claramente era mayor que él, y eso le gustaba bastante a Daehwi.

- ¿Vas a ser algo así como mi hermano mayor? - pensó en voz alta Daehwi. Por alguna razón no le gustó para nada ni pensarlo ni decirlo.

- No es lo que tengo en mente... - susurró Dongho. Tan bajo que Daehwi creyó haberlo imaginado.

💕💕💕💕

No sé cuantos cap tenga éste fic, pero preparen los pañuelos porque estoy considerando el hacerlo bien sad.
Hasta la próxima, mis panquecitos💕

《Raining day》DongHwi♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora