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Narra Carolina:

Me escape. No podía seguir con todo este disfraz, no puedo seguir siendo la persona que aparento ser. Yo no soy todo esto. No soy todo este glamour, solo soy una chica normal que quería enamorarse, vivir diferente, pero no puedo, me equivoque. 

-¡Espera Karen! 

No quiero que siga diciéndome así

-No quiero hablar, quiero irme, no puedo seguir con es...

Me interrumpió. Tomo mi brazo rápidamente y me beso como nunca en la vida lo hicieron, este si fue mucho mejor que el primero en los pasillos del hotel. Me besaba, lo hacia tan bien, tan perfecto. Todo se detuvo a mi alrededor, no existía mas nada que ese beso. Era perfecto. 

-Basta

-No me voy a detener

Siguió besándome, ¿Que iba hacer? ¿Que iba a decirle? No se como, pero terminamos en su auto y luego en el hotel. Su habitacion me esperaba y su cama también. Los dos, unidos, frente a frente, nos besamos como si fuéramos dos adolescentes recién enamorados. Sabia perfectamente  que lo amaba con toda mi vida, mi cuerpo, mi ser, mi alma completa.

 Comenzó a quitarme el vestido y yo la ropa a el. Me encantaba verlo de esta manera, sabia que esta noche iba a ser mágica, y ya nada me importaba. Todo era perfecto a su lado. Me amo. Me amo sobre aquella cama, sobre esas hermosas y limpias sabanas, las cuales luego se deslizaron hasta llegar al suelo. Me amo. Como nunca nadie en la vida me habia amado. 

A la mañana siguiente, me desperté a las 7.30 de la mañana. El sol pegaba fuerte sobre mi rostro. Me levante y me vestido con el mismo vestido que antes pero esta vez me recojo el cabello un poco. Tenia que ir a trabajar y no podía salir así, tenia que hacer algo, llegar rápido sin que nadie me viera a la sala de las sirvientas donde estaba mi ropa. Le deje una nota, y sali. El dormia profundo, y no quería despertarlo aparte no me tenia que ver salir para irme a la sala de las sirvientas. Abri la puerta y lentamente me fui. 

-Si, si Silvana, te digo que el estaba con una mujer -Dijo hablando por celular-

Salio de la habitacion la señorita Farm hablando por telefono y me quedo mirando fijamente sin poder entender que estaba haciendo. La salude como si nada y rapidamente me desaparecí. Llegue a la sala de las sirvientas, me cambie y me puse a trabajar

Narra Karen:

¡¿Que fue lo que acabo de ver?! Ahora entiendo de donde la conozco, es la sirvienta y tenia.. tenia.. mi collar. Por eso lo conocia tanto, ella robo mi collar. Tengo que reportar esto. Me robo mi collar y a mi hombro. Me las va a pagar todas. 

Habitación 407 TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora