Septiembre 24 de 1940
La mañana era fría, ya las pinceladas de invierno se comenzaban a sentir en mis viejos huesos. Era cerca de las seis de la tarde y el sol ya estaba apunto de esconderse.
Mi esposa se estaba arreglando en el baño mientras yo me rasuraba. El rostro que contemplaba en el espejo me mostraba un viejo de cabellos blancos y de ojos cansados, y no al joven que en un tiempo era un héroe de guerra.
Suspire y me limpie con la toalla mientras salia a la recámara. Ya mi esposa me había sacado mi ropa y estaba hermosamente puesta sobre la cama.
"Amor, ¿donde esta mi loción?"Pregunte mientras abría mi gaveta y rebuscaba entre medio de medias y calzoncillos bien doblados.
"Esta en el baño"
Escuche la voz de Rubí mientras se lavaba la boca.
Entre al baño y mire a mi esposa, su piel era blanca y sus mejillas rosadas. Era tan hermosa como el día que nos habíamos conocido, sus ojos eran enormes y marrones, tan expresivos como un cuadro.
Camine hasta tomar mi loción que estaba en las manos de Rubí, y esta la aparto de mi mientras me cuestionaba con una ceja levantada."Y ¿para que el señor Colón necesita loción?"
Me preguntaba a la vez que sonreía pícaramente.Sonreí mientras la abrazaba y le besaba una mejilla.
"Últimamente has estado mejor, ya duermes y no tienes tan mal humor"
Mientras me besaba la mejilla y salia en su toalla me sonrió.
"Tal vez esta noche podamos hacer algo mas que dormir..."Sentí como en mi vieja cara arrugada se tornaba sonrojada como la de un jovencillo.
Le di una nalgada mientras sonreía y comenzaba a vestirme.Al cabo de media hora baje las escaleras y busque la comida seca del gato, normalmente no le daría comida a aquel animal. Pero era de Rubí, así que agité la bolsa como ella cada vez que le serviría comida.
Normalmente aparecería al cabo de unos segundos, pero nada sucedió."Gato inútil"
Musite mientras tomaba su platito y lo llenaba de comida."Tony, ya estoy lista. ¿Le diste comida al Señor Benito?"
Ella adoraba mas a ese gato que a mi, sabia que el día que yo muriera no le haría tanta falta como el señor Benito."Si... Si ya le di"
Le dije mientras luchaba por enderezarme, esta vieja espalda ya no tenía veinte.Caminamos hasta la casa de los Rivera para el velorio de la señora Josefa. La noche estaba fría y a medida que íbamos caminando sentí la delicada mano de mi adorada Rubí sosteniendo mi brazo.
"Estas caliente"Siempre decía lo mismo, siempre me buscaba cuando tenía frío, como si se tratase de una chimenea.
Caminamos bajo las estrellas hasta llegar al pórtico de la casa de William. Al frente estaban ya llegando los Rosa junto con Esteban.
Luis Rosa estaba hablando con Esteban de un tema ameno, mientras que sus dos hijos, Rosita y Luisito corrian hasta Ruben.
Rubí al ver a Wanda Rosa le hizo señas mientras la ayudaba con un pastel de manzana que su dulce olor ya me hacia la boca agua.
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Enciende La Luz "El Diario"
Terror"te mira cuando sueñas te mira cuando duermes el señor Bombaña viene a verme arropate bien no descubras nada esperate quieto y no digas nada aguanta la respiración agarra tu frazada esta es la canción aguanta que ya llega la mañana"