Directo del corazón

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-¡En verdad lo siento!- se disculpó Nathan mientras seguíamos caminado juntos.
-No te preocupes por eso.- agregué.-Además fue un accidente.- sonreí.
Sí fue un completo accidente pero debo reconocer que ese accidente me hizo verdaderamente feliz.
-Pero ¿Qué hubiera pasado si tu novio nos veía?- sacudió la cabeza.-¡No me lo quiero imaginar!- agregó.

Era verdad. Había olvidado ese asunto. ¿Porqué tuve que mentirle así a Nathan? Lo único que estoy consiguiendo es lastimarme a mi misma. Pero esto lo hago para evitar problemas con Deborah. No quiero que por culpa mía terminen su relación sólo por un malentendido.
-Supongo que a William le hubiera molestado. Claro pero si le explico que fue un accidente se solucionaría todo.- sonreí.
Nathan me miro serio y soltó una carcajada.
-Hasta yo me hubiera puesto fiera.- sonrió.-No permitiría algo cómo esto, digo si Deborah me fuera infiel creo que terminaría con ella inmediatamente.-me miró seguro.
Lo miré atenta.
-¿Sabes Anne? Siempre he pensado que sí tu pareja te falla es porque el amor entre ambos se terminó. No hay necesidad de intentarlo de nuevo. Sí ya lo hizo una vez ¿qué te asegura que no lo haga nuevamente?- me miro atento.

Esas palabras sonaban cómo sí estuviera esperando una respuesta de mi parte. Era cómo si él estuviera pasando por algo similar. Entre letras pequeñas me dio a entender que su relación estaba pasando por una cuerda floja.
-Porqué confías en ella.- lo mire atenta.- Amas tan ciegamente a esa persona que crees que realmente no lo hizo con esa intención. Muy en tu interior esperas que solamente sea una mal entendido y que podrán ser felices juntos nuevamente.- entrelace mis manos.

Pude ver como agachaba la mirada. Hasta para mi sonaba extraño decirlo. Nunca me había llegado a plantear algo así.
-Mi hermana Margaret me dijo una vez que en una relación siempre a uno de los dos le duele más la ruptura ya que uno estaba más enamorado que el otro. Además porqué dio todo de sí y término perdiendo.- lo mire.

Nathan sonrió levemente.
-Eso es cierto. Pero no siempre funciona así. Hay veces que los dos se esfuerzan al máximo pero la relación no funciona.- miró el cielo detenidamente.
Alce la mirada al cielo. Las estrellas lucían hermosas. Todo sombrío en la lejanía. La cálida brisa de la noche. El cantar de los grillos. Era cómo sí sólo existiéramos Nathan y yo.
-Cuando las cosas no funcionan es porque no están destinados a estar juntos.- me giré a mirarlo.-Ambos tratan de hacer lo imposible posible.-
No me consideraba buena dando consejos pero eso sí lo tenía bastante claro.
-Nos solemos aferrar a una persona. Creemos ciegamente que será para nosotros a cómo de lugar. Pero hay ocasiones en las que esa persona ya tiene a alguien especial en su vida y no podemos hacer nada más.- agregué.
-Tienes razón Anne.- me miró Nathan seguro.-¿Puedo confesarte algo?-
Asenti levemente.
-Creo que soy el único que está luchando por mi relación.- sonrió nostálgico.-Deborah sólo ha estado jugando conmigo.- me miró.

No creo que sea así. Deborah parece amarlo tanto. Poco conozco de ella pero puedo notarlo. Aunque puede que me esté equivocando.
-¿Estás seguro de eso?- pregunté sin pensarlo.
-No.- carcajeo.-Pero solamente espero que no sea así.- suspiró aliviado.

No dije palabra alguna. Esta bastante claro Nathan sentía que su relación con Deborah estaba acabada. Podía notarse en su mirada.

-Regresemos que ya comenzará nuevamente el concierto.- dijo caminando tranquilamente.

Lo seguí por detrás. Sentía un leve palpitar en mi pecho. Cómo un pequeño brinco de esperanza. Y sí Deborah y Nathan llegaran a terminar yo podría...
Me detuve en seco.
No podía pensar eso. ¡No así! ¡Está mal!
Me tome de las mejillas y suspire profundamente. Alcanzando a Nathan. Llegamos nuevamente al concierto. Todo terminó y me reuní nuevamente con William.
-¿Cómo te pareció el concierto Anne?- me miró William sonriente.
-Excelente.- le sonreí.
El camino a casa se me hizo eterno. Esperaba no tener problemas con mis padres. Era bastante tarde. Me dolían las piernas y tenía bastante sueño.
Miraba detenidamente por la ventana. Las luces de las tiendas, la gente, todo era nuevo. Me sentía tan desilusionada de mi.
¿Cuánto tiempo más tendría que vivir así? Aferrada a una realidad lejana.
Tome mi mano volteándola lentamente; aún estaban ahí. Esas marcas. Lucían tan recientes. Las acaricie despacio. Recordé aquel dolor de esas triste memorias que viven en mi piel.
Me decía a diario que las cosas mejorarían. Qué todo estaría bien. Qué sólo era algo temporal. Qué alguien me lograría salvar. Pero caí en una oscuridad tan profunda que ni mi yo interior pudo ayudarme.
Sentí que verdaderamente era una inútil. Por no ser capaz de defenderme ni de mi misma. Por dejarme hundir por personas tóxicas. Por dejarme humillar. Por no ser fuerte. Por permitir que todo mi mundo me diera la espalda.
Simplemente yo. Nadie más. Sólo yo. Fui quién me deje caer a esa oscuridad abismal.
Me giré a ver a William quién estaba serio mirando fijo la carretera.
Le agradezco de todo corazón a mi hermano por haberme encontrado en la tina. Por vendar mis heridas. Por salvar mi vida.
-Gracias William.- dije.
Se giró de golpe a verme.
-De nada Anne.- me miró sonriente.-¡Sabía que te encantaría el concierto! Oye dentro de unos meses mi banda tocará ahí mismo.- sonrió emocionado.-Hoy estaban ahí. Me alegra saber que siguen las cosas bien entre nosotros.- me miró de reojo.
-Me alegro escuchar eso.- le sonreí.-Estaré en primera fila mirándote.- agregué satisfecha.
La banda de William se desintegró por culpa mía. Iba al hospital a verme diario. Por lo que su banda perdió la oportunidad de hacer una gira. En todo el tiempo que estuve en coma. Mis hermanos cambiaron su estilo de vida. Mi familia estaba preparándose para lo peor. Mi estado estaba crítico. Sin mencionar que la leucemia acabaría conmigo. Tenía pocas esperanzas de vivir. Hoy en día ha logrado estabilizarse y me encuentro mejor de salud pero eso no quita el hecho de que siga enferma. Mi trastorno depresivo sigue acompañándome. En realidad no se sí podré librarme de eso. Dije mientras mis ojos lentamente se cerraban por el sueño.

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¡Hola! ♡ ¡Capítulo nuevo!♡♡
Muchas gracias a todo los que están siguiendo la novela hasta acá. Me motiva mucho para seguir escribiendo ♡♡
¡¡Nos vemos!! ¡Chaou! ♡♡

Nunca es tarde para amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora