El secreto de Elena

El amor prohibido de un mafioso

Sonó el timbre, Ella sintió un golpe leve en la cabeza. De alguien tratando de levantarla, sonrió al ver que era Max su mejor amigo.

Elena, ¿Qué tal con tu exposición por el punto extra? - El pregunto iniciando un tema de conversación mientras salían del salón hacia el recreo.

No puedo, las palabras no me entran, tal vez tengo el cerebro de Einstein buena para la vida, mala para la escuela - Respondió Elena

Mientras se sentaron a comer algo y hablando de intereses comunes, el recreo termino y volvieron a la clase de Algebra.

Elena podría ser descuidada en el asunto de la escuela pero la única materia que la ayudaba a relajarse eran las que contenían números, sentía placer y emoción encontrando un respuesta exacta a cada problema.

Terminaron las clases y un carro con chofer la esperaba afuera del colegio, llevando a Elena a su dulce hogar.

Su hogar siempre ha sido hoteles ya que su padre es el dueño de la mayoría, viviendo en una suite lujosa en los grandes Hoteles de california. Con 15 años puede ser una comodidad viviendo así, pero la falta paterna la ha vuelto a ella más madura de lo que aparenta ser.

Narra Elena

Me bajo de mi carro directo al ascensor solo quiero acostarme y después darme un baño, Pero el otra vez está ahí, ya es como la millonésima vez que me topo con él en el ascensor. Puede ser guapo e irresistible pero se ve un poco mayor lo digo porque siempre se viste formal claro yo siempre con mi maleta atrás y libros en mano.

Él me sonríe con unas buenas tardes, su sonrisa perfecta y su corbata igual, me rio y finjo que no lo escuche. Veo su café que lleva con marcador su nombre, un lindo nombre, Chuck Lollinton, Él se queda en el piso 7 y espero sola hasta llegar al último piso, donde es donde vivo.

Narra Chuck

La junta de negocios es insoportable, todo esto de tener doble vida puede aburrir pero ya que, este treintañero no puede ser más feliz.

Salgo por fin, acabando de hablar de mis cuentas en suiza así la famosa interpol no se meterá en asuntos que no les incumbe. Solo quiero llegar a mi piso y recostarme, Camino al ascensor y ella está ahí. No la conozco bien ni tampoco me interesa saberlo ya que lleva una maleta y un lindo uniforme. Me gustan más los días lunes y martes cuando lleva esa sexy falda.

Pero ya que ella es una estudiante fácil, aunque yo siempre me quedo primero en el ascensor nunca he logrado hablar con ella pero se su nombre, en unos de sus cuadernos lo pude observar me gusta su nombre, Elena Walvergush. Su cabello largo y castaño pero sus ojos cada vez que los veo, es que como si viera el cielo son tan... Pero que digo, llego al piso 7 y entro me despido con una sonrisa y ella finge que no me ve pero su risa la delata.

Logro recordar la semana pasada cuando se sonrojo al ver que su blusa esta desabrochada y logre ver su hermoso sostén morado, pequeños senos pero pasable. Aparto todos los pensamientos sucios y me logro dar un baño.

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