Antes de salir por las puerta, un señor de mayor edad nos dijo:
-No sois los únicos que se sienten así en este pueblo, no vienen muchas personas de visita por aquí, piensan que pasan cosas extrañas.- De la nada aquel hombre comenzó a reírse.
Alex y yo salimos del bar, me quedé hecha piedra al escuchar aquellas palabras de ese hombre, Alex parecía estar igual que yo, pero necesitábamos salir de ese lugar así que saqué de mis vaqueros, mí móvil y me fije la hora:
19:32 p.m.Era tarde para las abuela desde las 18:30, mientras intentábamos visualizar una salida rápida y pensar lo que podría pasar si no llegabamos ahora mismo, lo que nos podría pasar era: que la abuela nos regañe, nos deje sin su deliciosa comida o nos tire la súper chancla voladora que le había dejado nuestra madre por si acaso.
Alex y yo nos miramos con los ojos muy abiertos, el me tomo la mano y mientras corríamos, me guiaba entre las pocas personas que se encontraban a esas horas en la acera, seguimos el camino por el que vinimos y luego de unos 10 minutos, llegamos al gran portón de esa casa.
El abuelo nos abrió la puerta y nos dejó pasar, en la cocina estaba la abuela, que cuando nos vio, vino rápidamente hacia nosotros y nos abrazo, sabíamos que a la abuela le preocupábamos, pero por llegar una hora tarde, creo que fue demasiado.
Luego de algunos regaños (por suerte no fue la chancla), le dije al abuelo que queria ducharme y dormir. El no muy contento con la idea de que no cene, me dijo:-Vale, ve a dormir pequeña, pero en la mañana desayuna mucho.
-Gracias abuelo.-Dije con una pequeña sonrisa, luego de decir eso, abracé a mis abuelos y le di un beso en la mejilla a Alex, en ese momento le susurre:
-Capitan, estamos a salvo- Le guiñe el ojo y el río, chocamos puños y me despedí de los 3 para subir a mi cuarto.
Cuando llegue a mi puerta, entré y lo primero que vi fue mi ventana abierta, fui a cerrarla, ya que hacia bastante frió, me pregunte que fue lo que la abrió, pero pudo ser el viento.Entré a mi baño y abrí la ducha, busqué una bata y cuando la encontré me metí en el baño, cerrando la puerta detrás de mi, me quite la ropa y entre en la ducha. Mientras me bañaba pensaba en aquel chico del bar, me quede con la duda de quien era, cual era su nombre, de donde era y por que había reaccionado así por mi apellido.
Termine de ducharme y salí con la bata puesta, fui hacia mi armario y me vestí con algo cómodo para meterme en la cama.
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El pueblo paranormal
Random2 hermanos, Nora y Alejandro Yañez Bravo, hijos de padres de clase media, trabajadores y con unos hijos tan unidos como cadenas, ellos tienen 18 y 22 años, sus padres deciden llevarlos donde sus abuelos los cuales no ven hace muchos años. Tienen que...