-Cap. 3. "Desafortunado incidente"

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Me despedí de Jen, y me encaminé hacia mi casa. Aceleré el paso, ya que estaba anocheciendo.

Iba andando sin rumbo, mas bien paseando. No había absolutamente nadie en la calle, daba hasta miedo. Me sonó el móvil, tenía un WhatsApp. Saqué el teléfono, pero justo estaba leyendo cuando de la nada salió alguien, y nos chocamos. Caí al suelo a causa del golpe, y noté un leve dolor en mi brazo izquierdo,  y mi móvil se rompio en pedazos. Lo primero que hice fue mirar el móvil y recoger los trozos mientras maldecia por lo bajo... Entonces me percaté de la presencia de ese alguien, alcé la vista y vi lo que me pareció ser un ángel.

NARRA SAMUEL

-¡Vamos, Vegetta, bebe un poco más! –Me dijo Willy, y me puso una lata de cerveza en las narices.

Le miré, desconcertado, mientras la música electro que sonaba de fondo me taponaba los oidos. Me estaba agobiando demasiado...

-¡Dejale! , ¿O es que no sabes que Vegetta es todo un caballero y no se emborracha? –Dijo Rubius burlandose, y estalló en risas.

Estaba a punto de explotar, asi que decidí irme. Me dirigí a la puerta, y no me sorprendió que estuviera abierta. Salí, y cerré de un portazo. Me encontraba realmente enfadado.

...

Aceleré el paso. Ahora mismo solo deseaba llegar a casa, subir los videos que tenia preparados para hoy, acostarme y olvidarlo todo por solo unas horas.

¿De verdad Willy y los demas eran así? No me fastidiaba que estuviean borrachos, si no que no paraban de fastidiarme con que bebiera más, y cuando me negaba, otra vez con lo mismo de que "Vegetta no bebe porque es un caballero".

Ademas, yo nunca he sido de fiestas. Odio que me retumben los oidos, y la fuerte necesidad de abrirme paso entre la multitud.

De pronto, noté que algo impactó en mi pecho. Dirigí mi mirada hacia la pequeña personita con la que me había chocado, y pensé que estaba delirando, o que ya era demasiada casualidad.

La preciosidad que habia visto de camino a casa de Rubius, se encontraba agachada recogiendo los pedazos de lo que hasta hace poco era un móvil. Me quedé unos segundos mirandola. Era realmente hermosa... Levantó la vista, me miró, y parecia sorprendida. Por fín, reaccioné y me agaché para ponerme a su altura. La ayudé a recoger los pedazos del teléfono, y la ayudé a ella a levantarse.

-Lo siento mucho, iba con el móvil y no te ví. –Dijo con voz apenada. La verdad, su voz era muy bonita, un tanto aguda...

-No, lo siento yo. Estaba cabreado, y no miraba por donde iba. Siento mucho lo de tu móvil... – Saqué mi cartera, dispuesto a pagarle el móvil, y le dije:

-¿Cuanto mas o menos costaba el...?

-Nada. –Me interrumpió. -De todos modos iba a comprarme otro, asi que da igual. –Me sonrió.

-No, de verdad, no quiero deberte nada.

-Bueno... Tecnicamente te debo una monster, asi que estamos en paz. –Dijo, y soltó una risita.

Sabía perfectamente a lo que se refería, asi que no tardé en notar la sangre acumulandose en mis mejillas.

De repente, empezó a tocarse el brazo izquierdo, mientras hacía gestos de dolor.

-¿Estas bien? ¿Te has hecho daño en el brazo? –Pregunté.

-Es que eres enorme... –Insinuó.

-Samuel, me llamo Samuel.

-Yo me llamo Samantha. Pues encantada, Samuel.

Los dos reimos, algo incómodos.

-Me has caido bien. ¿Que tal si me das tu número, y un dia quedamos? –Dijo.

¿Que aquella chica guapisima y simpática me estaba pidiendo el número?

-Eh... Sí, ¿tienes papel y boli?

-Si, dimelo.

Se lo dije, y ella lo guardó en su bolso. Acto seguido, me dirigió su felina mirada, me sonrió, y dijo:

-Adios, Samuel. –Continuo con su camino.

Me quedé unos segundos plantado en mitad de la calle, procesandolo todo. Entonces, segui con el camino a mi casa con una ancha sonrisa en el rostro.

Cuando más te necesitaba. (Fanfic Vegetta777)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora