Capítulo 3

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Llegué a mi oficina muy aturdido por tanta información, tome asiento y sólo me quedé mirando al vacío, aún con todo en mente, 《¿realmente habrá hecho eso?,¿lo aran de nuevo?, ¿tendría que ser parte de esto?, ¿que hago ahora?,》.
¿¡Porque no te opusiste!?- grite al levantarme y sostenerme del escritorio.- ¿¡Porque te quedaste callado!?- me deje caer en mi asiento llevadome las manos a la cabeza y tomando mi cabello para después tirar de el- Eres un cobarde- me sentencie.
Ah disculpe- Una enfermera carraspeo al hablar- Un paciente esta en crisis-- rápidamente me puse de pie y le pedí que me llevará hasta el. Caminábamos por el pasillo para llegar a la habitación, cuando estuvimos en el lugar pude observar la situación, el chico autista que me rechazaba continuas veces tenía en la mano derecha una jeringa con la cual amenazaba a el personal que intentaba calmarlo, según lo que me informaròn de camino es que al joven le iban a dar la medicación correspondiente, pero se negó y Soo quizo ayudar ya que era la única que se le podía acercar, el caso fue que el no la reconoció y le prohibió el acercarse así que varias personas más intentaron calmarlo pero el resultado fue la escena que justo ahora podía ver.
Tranquilo- me acerque a paso lento y cauteloso- no te haré daño.
Miente- dijo paranoico- ustedes sólo me quieren dañar.
No es así- aún me acercaba- baja eso, ya que te puedes lastimar.
Alejense todos- grito mirando a todos lados, le hice una seña a un enfermero para que le distrajera, el la captó rápidamente y comenzó a hablarle hasta lograr que el se girará. dándome la espalda y dándome la oportunidad de sostenerlo desde atrás y poderlo inmovilizar para que después Soo le diera un tranquilizante.
¿Aún no te deja acercarte?-  desconozco el momento en que el director se hizo presente.
No- espera- ¿Cómo sabe que no me deja acercarme?- Oh no mi mente empezó a maquinar sobre a donde llevaría todo esto.
Te observo- esbozo una sonrisa- seria un mal director si no estubiera al tanto de mis empleados, ¿no lo crees?- Su rostro denotaba ironía.- puedo ayudarte con este caso- sabía que llegaría a eso.
Lo tendré en cuenta- me aleje del lugar antes de que algo más ocurriera. Esta vez no me dirigí a mi oficina sino salí de lugar con la excusa de salir a comprar café, que no era del todo una mentira, salí del lugar y me encamine a una cafetería cercana, entre y me senté en la barra del frente.
¿Que le doy?-una chica joven que vestía con un mandil blanco, debajo de este llevaba una blusa color vino de tela parecida al zatin, unos jeans negros ajustados y con tenis cómodos.
Un americano por favor...
Que sean 2 por favor- una voz interrumpió, yo volví el rostro para verlo.
Ese es mi pedido- reclame neutro.
Lose- le sonrio a la chica que rápidamente se fue en busca de nuestras bebidas- No me presenté hace un rato- ya recordaba el era con quien me choque hace un rato- Soy Jung Hoseok, el nuevo enfermero- me tendió la mano cortésmente.
Kim Namjoon- le estreche la mano- Soy el médico encargado de el ala este.
¿Día agotador?- pregunto, a lo que yo sólo le mire curiosos por su pregunta- Tu rostro se ve acabado- aclaró.
Si, hoy fue un día dificil- como negarlo, habían pasado demasiadas cosas abrumadoras, nuestra plática se extendio más, nuestros cafés llegaron y nos quedamos ahí platicando y bebiendo. Ese día marcó el inicio una amistad ya que después nuestras charlas se iban haciendo más a menudo la confianza iba creciendo. Nuestra relación se consolidó después de llevar 5 meses conviviendo con el sonriente Hoseok.
Doctor- Soo entró a mi oficina- Citaron a una reunión hoy, dentro de 10 minutos en el anfiteatro-  rápidamente dirigí mi atención a la enfermera, ya sabía de que trataba.
¿Pidieron mi presencia?- me atreví a preguntar aún temiendo por la respuesta.
Si-Después del tercer mes sin haber recibido noticias del tema había deducido que todo eso había sido disuelto.
Ahí estaré- la enfermera salio, me levanté de mi escritorio y me dispuse a salir para dar camino al lugar, de nuevo el mismo camino, con los mismos sentimientos de confusión ahora revueltos con miedo.
Doctor Kim-  me recibió el director- esperábamos por su presencia- asenti incómodo- traigan al paciente- ordenó para que después llegará un enfermero empujando una camilla en la que se encontraba atado mi paciente quien sólo me miro rogando ayuda- Kang Ha Rae, de 23 años, diagnosticado con autismo desde los 7 años,  nadie a podido encontrar el tratamiento adecuando- cerró el expediente que descansaba en sus manos- hasta ahora- dio una señal a el enfermero que le puso una especie de mordaza en la boca, después mojaron su cuerpo y con un par de tenazas comenzaron a pasar corriente eléctrica por el cuerpo, el hombre sólo daba vuelcos en la camilla efecto de la corriente, lo repitieron varias veces hasta que Kang quedó inconsciente y apenas con vida- Bien por ahora esperemos que despierte y veremos si dio algún efecto, yo agendare otra sesión del tratamiento- todos parecían de lo más normales, en cambio yo quede paralizado por aquel espectáculo, mi impotencia se vio reflejada en el cuadernillo de notas que quedó hecho pedazos por toda la fuerza que aplique en ella, porqué era lo unico que podía hacer quedarme inherente observando como torturaban a aquel desdichado ser, en cuanto la señal de salida fue dada me retire lo mas rápido posible ya que no creí poder soportar un momento más ahí dentro, salí a paso rápido hacia mi oficina ya que era el único lugar donde me sentía tranquilo, en el camino coincidí con Hoseok.
Hey- trato de llamar mi atención- vallamos por un café- siempre que tenía un mal día el me lo alegraba con su positivismo, pero esta vez no sirvió ya que rápidamente notó que algo andaba mal- ¿Nam?, ¿Todo en orden?
Sigueme- hable entre dientes mientras retomaba mi camino, el parecio comprender y me siguio el paso.
Estábamos sentados de frente en el pequeño sofá ubicado en mi oficina, ambos sumergidos en el silencio.
¿Puedo confiar en ti?- pregunte aún mirando el suelo
Sabes que si- ya no había rastro del enfermero sonriente, ahora estaba sin expresión sólo expectante a la situación.
El día que ambos nos conocimos, cuando chocamos, ya iba saliendo de hablar con el director- suspire al recordar- Nuestra conversacion estaba ligada con un suceso anterior ya que hubo una Junta en el anfiteatro, en ese  momento fue raro ya que estando ahí recitaron un juramento que no entendí, al salir de lugar e ir al despacho del director el me explicó todo sobre el proyecto que llevarían acabo y en el que el deseaba que participará, el proyecto básicamente es impartir torturas a pacientes que no an mostrado mejoras, después de escuchar eso quede aturdido y fue cuando me choque contigo- Hoseok apenas creía lo que salía de la boca del otro- Han pasado 5 meses y ellos no me habian llamado para nada acerca del proyecto, hasta hoy- el chico le miro con más intriga- Hoy vi como a mi paciente le electrocutaban hasta quedar inconsiente- el chico que le observa se llevó una mano a la boca- Y no pude hacer nada, sólo me quedé parado viendo como sufría y se convulsionaba.
No se que decir- confesó- es horrible.
Lose- la tristeza le invadía- No podré salir de esta.
Saldrás-aseguro- Te ayudare.
Gracias- suspiro.
La plática se dio por terminada y cada quien fue a atender sus asuntos. Esa noche Hoseok y Namjoon se quedaron de Guardia como ya era costumbre todos los miércoles, ambos estaban en la estación del enfermero tomando café con donas y charlando sobre temas triviales, la alarma sonó tomadolos desprevenidos y por torpeza derramaran un poco de la bebida. Corrieron siguiendo a otro enfermero que también iba a aquel lugar, a Nam le pareció conocido el camino, en cuanto llegaron descubrió el porque de su presentimiento, estaba en la sección prohibida.
¿Cuál es el problema?- pregunto Nam.
La chica atacó a su enfermero- un guardia informó. La vista del médico divago por el lugar hasta llegar a una esquina donde yacía un cuerpo delgado cubierto por un camisón blanco, descalzo, con una cabellera larga y negra que estaba desordenada, estaba sentada abrazando sus rodillas como si estas le proporcionarán seguridad y protección.
Hay que acercarnos y sedarla- propuso Hoseok.
No, espera- Nam se acercó a ella y al estar a poca distancia le hablo- Hola- ella lo miro con inocencia- ¿Cuál es tu nombre?- la chica iba a contestar pero una autoritaria voz le detuvo asustandola más.
Llevenla al cuarto de aislamiento- ordenó Hwa. La chica fue tomada por dos personas de seguridad y llevada a aquel lugar que era conocido por castigar a los pacientes.
Ustedes vengan conmigo- señaló a Hoseok y a Namjoon, los llevo a un pasillo no muy concurrido- Lo que acaban de presenciar- hablo nervioso-Les pido que no lo divulguen, ya que ella es un caso especial- ambos asintieron sin poder ocultar la intriga y confusión de sus rostros.

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