Capitulo 3

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Poco a poco se abren los ojos del paladín negro. Luego de abrir los ojos, le dolió un poco la cabeza. Toco su frente. Luego ve el techo de una casa. ¿¡Casa!? ¿En dónde está? Lo único que recuerda es que estuvo con Keith y luego... ¡KEITH!

Se levanta rápido de la cama o mejor dicho en el piso con muchas sabanas. Luego ve que ya no tiene su uniforme del paladín. Sino una ropa muy cómoda. Esta vestido de una camisa blanca sin mangas, pantalón negro, botas negras y alrededor en su cintura tiene una tela negra. ¿Pero qué Quiznack?. No tiene tiempo para eso. Salió rápido la casa y lo que vio le dejo sorprendido. Allí estaban, los Arunianos. Estaban bien, con Lance y Hunk. Se dio cuenta que, al igual que él no tienen sus uniformes, también están vestidos como el, al excepción de las camisas, estas si tienen mangas hasta el codo y las telas de sus cinturas de sus respectivos colores. Y al parecer, los pequeños aliens están adornando en el pueblo. Esto es extraño. ¿Qué está pasando aquí?

Lance y Hunk vieron a Shiro que esta fuera una de las casas de los Arunianos, se acercaron a Shiro para saludarlo.

-Buenas tardes, bella durmiente.- dijo Lance despreocupado y feliz. Le dio una palmada en la espalda en su líder.

-Alguien me puede explicar, ¿Qué está pasando aquí?.- dijo Shiro serio viendo a sus amigos.

-Bueno Shiro, veras es que también estamos confundidos y desorientados, tanto como tú. Intentamos sacar una platicar con los Arunianos. Pero no nos quiere decir nada.- dijo Hunk preocupado.

-Si. Dijeron que es una sorpresa. Amo las sorpresas, ¿que nos darán? ¿Una estatua mía? ¿o tal vez nos daran la comida de la tierra?¿o tal vez conocer una princesa hermosa? De seguro que si.- dijo Lance feliz.

Shiro y Hunk miraron a Lance como si estuviera loco. Pero no le dieron importancia alguna de las fantasías de Lance. ¿Comida de la tierra? Eso sí es mucho que pedir. Bueno, no tienen que culpar a Lance de eso. Extraña a la tierra. Al igual a los otros paladines de Voltron. Extrañan a su familia, sus amigos, la comida, ver el cielo azul, sentir la calidez que da el sol, nadar en el mar, el aire puro que les llena sus pulmones, los árboles, las ciudades, su hogar. Eso hizo que los dos paladines se sintieran nostálgicos. Querían volver. Pero lo primero es terminar Zarkon y liberar a los planetas que fueron invadidas por él.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por un grito de una chica muy molesta.

-¡YA DEJENME EN PAZ! ¡PUEDO VESTIRME YO SOLA!

Esa voz. Reconocerían esa voz de una adolescente que está en su periodo. Se dieron la vuelta y ahí está. Es Pidge. Con un vestido verde. ¿¡VESTIDO!?. Eso les tomo mucha sorpresa. Comúnmente Pidge se vestiría su ropa de niño. Pero, parece que las Arunianas no piensan lo mismo como Pidge. Los tres estaban con la boca abierta, ni en sus más locos sueños creyeron que iban a ver Pidge con un vestido. Pero se ve bien. Se ve adorable. Lance está en shock que sus amigos, nunca se imaginó a ver Pidge de esta manera, se ve muy linda. Se sonrojo mucho cuando pensó eso de su amiga.

-¡Chicos!.- Pidge a ver sus amigos que están bien, con alegría se fue directamente hacia ellos.- ¿Están bien?.- pregunto preocupada.

-Si, Pidge estamos bien. Confundidos pero bien.- dijo Hunk con una tierna sonrisa.- Por cierto, te ves bien con ese vestido.

-Deja de bromear Hunk.- dijo la chica avergonzada.

-Pero si es verdad. Tu qué opinas Shiro.- dijo viendo a Shiro con una sonrisa. Ya entendió el mensaje.

-Claro que si. Te ves linda con ese vestido.- dijo con una sonrisa tierna.

-¿En serio?.- dijo con duda la paladin verde.

El insomnio de ShiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora