La Hija de Negan

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-Entonces lo haremos, ellos han matado a muchos de los míos- dijo Blake aceptando luchar contra Los Susurradores-
-¿Y jamás se te ocurrió decirme?- le pregunté algo sorprendida-
-Cada vez que mandaba un mensajero aparecía su cadáver al día siguiente- me contestó enojado-
-Blake, quería hablar contigo a solas- dijeron remarcando la palabra a solas, todos salieron y solo quedamos nosotros dos- necesito que me ayudes.
-¿En que?
-No quiero que le hagan daño a Paul- el se empezó a reír-
-Audry, es Jesús de quién hablamos- me contestó riendo- él sabe luchar, estará bien.
-No es ese Paul, es sobre mi bebé- la risa de Blake seso y su mirada cayó sobre mi vientre- no es mío realmente pero yo lo estoy criando.
-¿Entonces de quién es?
-De Lydia y Scott, es un bebé debe tener un mes o dos ya; no quiero que el esté en la guerra por eso quiero que lo cuides- levanté mi vista de mis manos y me fijé directo en sus ojos- ningún lugar es seguro ahora pero se que acá harán lo posible por mantenerlo con vida por si algo me llega a pasar.
-Esta bien se quedará acá, no hace falta ni pensar en eso- lo abrace- de nada.
-Gracias Blake.
En esos momentos entro Carl, con mi pequeño Paul entre sus brazos el cual me miraba contentó y luego miro a Blake:
-Si algo le llegará a pasar te juro que mataré al culpable.
-No pasará nada- dijo alzando a Paul- es hermoso.
-Es mi vida, no quiero que nada de lo que me ocurrió le ocurra- sonreí triste- debo irme pero volveré lo antes posible.
-Nada malo le ocurrirá.
-Es lo que menos quiero- mire para la puerta- Blake, tengo miedo de que algo me pase a mi.
-Nada te ocurrirá, no tienes por que preocuparte; ganaremos esta guerra.
-Eso espero- mire a Paul- hasta cuando vuelva mi pequeño- Paul balbuceo algo y luego mire a Blake- nos veremos pronto.

Dos días después...

-¿Cuando dijiste que será?- pregunté por tercera vez-
-Cuando tenga que ser- me volvió a responder Rick- ¿Que ocurre Audry? Necesitamos que prestes atención.
-Y yo necesitó algo para mi dolor de cabeza ¿No te parece? Estuvimos gastando toda una maldita mañana, hablando sobre cómo colocarnos y que hacer pero no tenemos un puto día definido ¿Que clase de puta lucha es esta?
-Amor- dijo Carl, recordándome por quién lo hacía- entiende que esto no es fácil.
-Lo se y lo entiendo pero Carl me canse de estar sentada esperando que esta mierda empiece en algún momento del día- empezaron a golpear la puerta con  desesperación- alguien que vaya a abrir esa mierda de puerta.
-El Reino está lleno de ellos por todos lados- escuché la voz de Rose-
-Mi bebé!- la sujeté de ambos brazos- ¿Donde está?!
-Audry- me dijo Daryl-
-Lo siento mucho- la sujeté más fuerte- no pudimos salvarlo.
La solté y fui corriendo a su caballo, me abrieron la puerta y galope lo más rápido posible; ellos sabían que yo había dejado a Paul en ese lugar, ellos querían nuestras cabezas pero sobre todo la mía. Pare al caballo y volví a Alexandria:
-Audry- me dijo Jesús una vez que me baje del caballo, me trago de abrazar y yo lo empujé-
Di un par de pasos antes de caer de rodillas al piso, llorando y gritando con cada parte de mi alma; cubrí mi cara con mis manos y luego golpeé el duro piso:
-Paul!!!- grite con todas mis fuerzas-
Carl se acercó y me abrazó, el igual lloraba:
-Matare a todos, no dejare ninguno con vida- escuché-
-Mataremos a todos.
Una bala impacto contra el gran muro que nos daba seguridad, señale a toda la gente que estaba afuera que fuera directo a la armería y sacara todas las armas y municiones que había. Me levanté y limpie mis lágrimas, agarre un arma y apunte a la entrada; Rick dió la señal.
Abrimos la puerta y ellos entraron antes de que todos pudiéramos atacar, el monstruo tenía a mi hijo entre sus manos; guarde una pequeña pistola antes de que se dieran cuenta que la tenía:
-¿Acaso te gusta la vista mujer?
-Me gusta más ver tu cráneo siendo traspasado por una bala.
El hombre no dijo nada más, una bala lo traspaso y yo sonreí; Michonne agarró a Paul y yo empecé a matar a esas mierdas de cosas. Una por acá y otra por aya todo caía; algunos de nosotros estaban heridos pero seguían luchando.
Yo quería el premio mayor y sobre todo cuando el líder de esas porquería dijo que ninguna mujer lo podría vencer así que yo quiero ser esa mujer que lo mandé al estúpido lugar de donde vino y cosa que obviamente haré. Estuvimos peleando hasta que lo conseguí, me coloque atrás de el y le susurré:
-Yo soy una maldita mujer y vos un hijo de puta muerto.
Traspase la katana por su cabeza, y fui por los demás seguimos luchando y ganando; no tenía miedo aún que si debo admitir que eran muchos más que nosostros y cuando digo mucho me refiero a cientos. Casi disparan a Carl pero yo maté a la mujer, algunos de los nuestros habían muerto y otros seguíamos luchando contras las mierdas estás.
Todo iba de maravilla, el Reino, La Cumbre y El Santuario luchamos contra la peste que eran Los Susurradores pero vamos ganando y yo iba rebanado a un monton de esas porquerías, cabezas por acá, cabezas por aya y era tan divertido que no podía creer que gente como Rick o Jesús y demás no le encuentren nada de divertido a esto.
La guerra seguía y cuando parecía que todo había terminado, sentí una bala impactar contra mi estómago y luego otra contra mi vientre, ví como salía la sangre de mi cuerpo y era espesa sentí otra bala impactar contra mi pierna y yo le dispare al que lo hizo, estaba arriba de la iglesia.
Todos me miraban y yo sentía que no aguantaría más, mire a Carl correr hasta mi y sujetarme mientras lloraba:
-Te amo, cuida a nuestro hijo por mi- le dije mientras mis ojos se cerraban-
Sé que decían un montón de cosas mientras me colocaban en la camilla pero no entendía nada solo sentía el dolor de las heridas desvanecerse mientras yo cada vez dormía más profundamente...