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— ¡Dime dime Hyung! ¿Entonces se besaron? — JiMin aplaudió feliz con sus manitos regordetas y se acomodó esperando una respuesta.

Los tres maknaes y SeokJin se encontraban en la habitación del mayor, haciendo una especie de pijamada. Lo habían decidido, pues era divertido y más si estaban con su Hyung favorito, el cual trataban como a una madre.
En la tele se encontraba dando un capítulo de pokemón el cual había seleccionado TaehYung con anterioridad, aunque ninguno le estaba prestando atención en lo más mínimo. Solo se dedicaban a cotillear cosas y a tirarse almohadas a lo loco. En verdad se estaban divirtiendo.

Todos se encontraban en el suelo, sentados sobre un covertor de Mario Bros que había puesto Jin para que pudieran estar más cómodos, mientras alrededor de ellos se encontraban un bowl con palomitas y diversas chucherías comestibles.

El castaño tomo una palomita y la metió a su boca con rapidez. En verdad las preguntas que los menores le hacían lo incomodan de cierta manera. Le daba vergüenza tener que comentar sus temas amorosos con unos niños, sin embargo el sabía que ya no eran inocentes del todo, sus parejas los habían corrompido, especialmente a JiMin.

Aún así, lo que haya sucedido con NamJoon se repetía una y otra y otra vez en su cabeza, como ese tipo de canciones que no te cansas de escuchar nunca. Los recuerdos del día anterior volvían como ráfagas sin control, volviendolo un pequeño tomatito. El no quería decírselo a nadie, sentía que si soltaba algo de los hechos pasados saldría corriendo con el corazón desbocado y no quería pasar ese tipo de situación, así que estaba evitando soltarlo todo, al menos para ahorrarse unas innecesarias burlas o una vergüenza extrema.

— No sea asi, SeokJin Hyung, queremos saber — rogo JungKook quien comía de una bolsa de papitas.

El mayor rodo los ojos y soltó una risa leve. En verdad amaba a estos mocosos hiperactivos. Juraba que su vida era mucho más colorida y llena de felicidad gracias a esos tres chicos que lo dejaron vivir en su hogar. No podía estar más agradecido.

El castaño suspiro. — Ustedes saben que si, no se para que me preguntan.

Era verdad, recordaba los rostros horrorizados y traumados de JungKook, JiMin y TaehYung y sentía una pizca de arrepentimiento y culpa. Lo menos que quería era haber traumado a esos pequeños. Pero ellos aún así habían visto todo lamentablemente.

“¡Y que vergüenza!”

Sintio como sus mejillas comenzaban a quemar y supo que se había sonrojado. Odiaba cuando le pasaba aquello en el momento menos oportuno. Pero recordaba lo que estuvo a punto de suceder con NamJoon y no podia evitar ponerse nervioso.

Si, se habían besado pero estuvieron a punto de llegar a segunda base en solo unos minutos.

Aunque si era con NamJoon no me arrepentia en lo más mínimo. El me gustaba y yo le gustaba.

— Al menos díganos si besa bien — está vez fue el turno de Tae de humillarme. En este momento solo quería que la tierra me tragara o que un meteorito cayera sobre mi.

Cualquiera de las dos maneras era mejor que estar pasando vergüenza frente a estos chicos.

Malditos mocosos, no saben respetar a su hyung.”

Coloque mi mano en mi mentón e hice como que pensaba. En realidad, NamJoon besaba muy bien, era todo un maestro en todo su esplendor, con esos labios gruesos y suaves como algodón de azúcar. Además de su lengua realmente experta que supo explorar mi boca a su gusto y antojo mientras su saliva se mezclaba con la mía y soltaba leves gemidos, que...

— SeokJin hyung... oiga, ¡¡tierra llamando a hyung!! — observe como Tae pasaba sus manos frente a mis ojos y di un parpadeo confuso.

Y al instante supe que estaba realmente jodido.

¡Maldita sea! ¿Que me has hecho Kim NamJoon?”

030717 | lula
namjin

opportunity | namjin [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora