opportunity | namjin [editando]

011

Coloco sus dos manos bajo el trasero de Jin y lo subió arriba de la encimera. Aprovecho ese momento para masajearlo lentamente y deleitarse con la pomposidad de aquellas dos manzanas sacando al mayor un audible gemido producto del toqueteo.

Se acercó rápidamente a su cuello y comenzó a repartir suaves besitos desde el punto sensible del pelirrosa hasta su prominente mandíbula. Mientras tanto SeokJin era un desastre de jadeos y gruñidos mientras agarraba con fuerza el cabello de NamJoon. Debido a eso el agarre del menor en la cintura del mayor se intensificó logrando que la piel de aquel sector quemara por el calor de la situación.

Sin embargo, sus dedos cosquilleaban ansiosos de ir más allá, pero debía controlarse y no actuar desesperado, se encargaría de que SeokJin disfrutará cada segundo de aquel momento.

Se separaron un momento y se miraron a los ojos, los dilatados orbes de NamJoon y los cálidos de SeokJin.

— Eres tan precioso SeokJin — el moreno subió una mano hacia su mejilla y lo acarició lentamente, disfrutando de la suavidad bajo sus dedos.

SeokJin cerro los ojos y se dejó llevar por las tiernas caricias del menor. Le encantaba, le encantaba muchísimo.

El mayor al no saber que decir solo se lanzó a los carnosos labios del contrario enrrollando sus piernas alrededor de NamJoon el cual lo levanto y comenzó a caminar hacia afuera de la cocina hacia la habitación del pelirrosa.

El único sonido flotando en la casa eran los jadeos y gemidos de los únicos dos presentes los cuales se demostraban el fuerte amor que sentían hacia el otro.

El moreno termino de subir las escaleras y se dirigió (con Jin aún arriba) hacia la habitación deseada.

Sus labios chocaban violentamente, creando un sonido maravilloso provocado por el chasquidos de sus belfos hambrientos, y luego separarse un poco solo respirando unos momentos para volver a unirlos. Por fin NamJoon llegó hacia la habitación de Jin y abrió la puerta con una mano para luego cerrarla con el pie. Se acercó a la cama del mayor y se sentó allí con el encima. Siguieron besándose hasta que los labios comenzaban a dolerles. Los labios del mayor eran tan suaves, gruesos y deliciosos. NamJoon creía que aquella parte de su cuerpo se iba a convertir en una gran adicción.

SeokJin comenzó a removerse sobre el menor provocando que la erección que ya tenía floreciera mucho más.

— Ngh, deja de hacer eso. Estoy perdiendo la cabeza por tu culpa — anunció NamJoon mientras agarraba el cabello rosa de SeokJin y lo jalaba llevando su cabeza hacia atrás para atacar nuevamente su cuello, mordiendo un poco su manzana de Adán y pasando la lengua por  y el pulso, dejando un camino de saliva y marcas que probablemente más tarde se verían. El moreno sonrió satisfecho.

De nuevo fue hacia los labios de Jin besandolo tiernamente, metiendo su lengua en su cavidad bucal para entrelazarla con la suya y al terminar mordiendo su labio inferior.
Tomo al mayor de las caderas y lo depósito con cariño sobre la cama temiendo que se rompiera por lo frágil que era.

Nuevamente se observaron fijamente, diciendose tantas cosas solo por medio de sus gatunos ojos.

— N-namjoon, hazme el amor — logro decir SeokJin entre jadeos.

A NamJoon se le corto la respiración y se ruborizo completamente. ¿Finalmente había llegado el momento? ¿Esto era lo que había estado esperando hace tanto tiempo?

De pronto se puso nervioso y sintió como un nuevo sentimiento lo recorría por completo, quemando mucho más en el lugar donde se encontraba su corazón el cual se agitaba ferozmente con sus latidos enloquecidos.

Eso solo podía provocarlo el. Su SeokJin.

Volvió a besarlo tratando de demostrarle todo lo que sentía por medio de esos besos delicados y pacientes. Luego sostuvo los suaves brazos de SeokJin para poder sacarle aquella camisa que le quedaba perfectamente, al momento de arrebatarsela de su cuerpo la arrojo en el aire sin importar en donde cayese.

Se acercó hacia el pecho del mayor y olfateo su piel deleitandose con ese aroma a vainilla que tanto le gustaba. Después posó sus labios sobre su piel y prosiguió a dar lentos besos por la línea de su torso dirigiendose hacia esos botoncitos rosas y atractivos que llamaban a su boca a morder y besar hasta el cansancio. Paso su lengua sobre uno de ellos e inmediatamente sintió la dureza de este chocar contra su lengua áspera. Decidió reemplazar sus labios por sus dientes tirando un poco y dando pequeños toques con su lengua mientras la espalda de SeokJin se retorcia de placer.

— ¡Ah NamJoon! — gimió hundiendose en el océano de deseo al cual lo estaba llevando el moreno.

El menor siguió mordiendo y besando uno de los pezones del mayor para luego subir su mano hacia el otro y apresar ese botoncito entre sus dedos.

Termino con eso y bajo hasta su estómago pasando la lengua al rededor del ombligo de Jin, dando besos húmedos y mordiendo otra vez. Le encantaba morder aquella nivea piel.

Espero un momento y posó las manos sobre el cinturón del pantalón de Jin deshaciendose de el al instante. Se los saco rápidamente y comenzó a repartir besos por el interior de sus muslos.

SeokJin comenzó a gemir más alto y NamJoon no creía aguantar mucho más, en verdad estaba enloqueciendo.

Dejó de darle mimos a las piernas del pelirrosa y por fin se centro en aquel falo brillante y grueso irguiendose sobre su rostro. Se relamio los labios y dejo un pequeño besito en la punta por lo cual el mayor soltó un gemido ronco.

— ¡Por favor Joonie! — pidió desesperado Jin.

El moreno sonrió tranquilo y lo observo con sus ojos oscuros llenos de excitación.

— Tranquilo Jin, tenemos todo el día. Te lo prometo, esto lo vas a disfrutar como nunca lo has hecho en tu vida bebé.

080717 | lula
namjin