Cabeza de coco ✔YoonKook/SuKook✔

¿Fantasmas?

— ¿Lo escucharon?

Ambos chicos pegaron un brinco en su lugar mientras llevaban sus manos a sus pechos, sintiendo lo acelerados que estaban sus corazones, y no solo por el sustos que Taehyung les había dado.

—De que hablas Tae.

Comento el pelinaranja mientras desviaba la vista del castaño y acomodaba su uniforme.

—Sobre— miro a todos lados antes de acercarse a ambos chicos y rodear sus hombros con sus brazos para acercarlos más a él— el fantasma del salón de música.

— ¿Fantasma? — Hoseok miro a Jimin, quien había hablado al mismo tiempo que él, con una sonrisa para luego regresar su atención en el lindo castaño— Explícate mejor Tae.

—Ayer alguien se quedó hasta tarde...y justo cuando iba saliendo y pasó por el salón de música escuchó que estaban tocando el piano...pero cuando entro no había nadie.

Hoseok juraba que sintió un escalofrió correr por su espina dorsal cuando Taehyung termino de hablar— Es-Estas— trago grueso y jugueteo con su dedos nerviosamente— seguro de eso.

El más alto asintió efusivamente pasando su vista del pelinaranja al pelinegro, ambos con el miedo plasmado en sus hermosos rostros.

—Realmente me siento mal por Yoongi y Jungkook.

El más bajo de los tres frunció el ceño y miro confundido al castaño—De que demonios hablas.

—Debido a las actividades de los clubes y la junta de maestros tendrán que quedarse hasta la noche para cumplir con su detención.

[...]

A Yoongi aún le seguía sorprendiendo la velocidad en la que los rumores se corrían por toda la escuela, como aquella vez que alguien había dicho que la profesora de biología le enseñaba anatomía al de física o el de ahora mismo. Hasta la jornada escolar de ayer no había ningún rumor de fantasmas y hoy apenas puso un pie en la escuela el rumor lo golpeó violentamente.

¿Quién carajos se creía semejante estupidez?

—Si el fantasma te mata a ti y a Jungkookie, me puedo quedar con tu habitación.

Bingo, ahí estaba su respuesta. Jung Hoseok se creía semejante estupidez.

—En primer lugar, no hay fantasmas. En segundo lugar, para qué quieres mi habitación si tienes la tuya en TU casa.

Frunció el ceño y miro al pelinegro a su lado.

—Claro que hay fantasmas, que no escuchaste lo del piano.

Rodó los ojos exasperado. Había escuchado toda esa mierda del piano.

—Pues sabes que —tomó una de sus papas y la llevo a su boca antes de mirar al menor— lo buscare y le pediré clases para poder tocar el piano de nuevo.

Y se echó a reír cuando Hoseok le miro espantado.

Fantasmas, si como no.

[...]

—Vamos Yoongi, hablemos con el director, quizás así no tengamos que quedarnos a limpiar hasta tarde.

Freno en seco y se giró para poder mirar al menor con una sonrisa de lado en su rostro— ¿Todo esto es por lo del fantasma, Kookie?

Abrió la boca dispuesto a quejarse pero no pudo decir nada. Su cerebro proceso las palabras del mayor y sus mejillas se encendieron de rojo.

—N-No— desvió la vista hacia el suelo y bufo— Qui-Quien cree en fantasmas...son tonterías.

Y sin más continuó con su camino hacia las aulas del segundo piso.

Eran alrededor de las ocho y aun les faltaban aulas que limpiar. El menor suspiro y se irguió limpiando su frente con su antebrazo, Yoongi le imito arrastrando el balde con agua.

—Solo nos queda la que está al final del pasillo.

— ¿Junto al aula de música?

El pálido asintió y el menor trago grueso— Y-Yo...digo que dejemos esa para mañana en la mañana.

El mayor sonrió de lado y negó, tomando con una mano el balde con agua y con la otra la muñeca del más alto para arrastrarlo hacia el aula.

Jungkook sentía sus piernas débiles, sus manos sudorosas y el corazón a punto de salirse de su pecho.

"Los fantasmas no existen."

En su mente continuaba repitiéndose la misma frase pero aún no se la lograba creer.

—Jungkook necesito que me ayudes con...

Y como si la vida se burlara de ellos, un tétrico sonido inundo sus oídos interrumpiendo al mayor.

Su sangre se heló, los vellos de su nuca se erizaron y su respiración se cortó.

—No, no, no...—cerro sus ojos y tapo su oídos— hyung, dime que no escuchaste eso.

Yoongi parpadeo confundido, sintiendo un escalofrió correr su cuerpo. Por la mierda que había oído eso. Carraspeo y rasco su nuca.

—Y-Yo...no...oí nada— sonrió pero en menos de un segundo lo dejo de hacer. La música resonó con más fuerza— quizás...solo...alguien está ahí— sonrió relajándose ante ese pensamiento— sí, eso debe ser, alguien debe estar ahí.

—Ve a ver.

— ¿Qué?

—Que vaya a ver, hyung.

Yoongi jadeo y negó provocando que Jungkook se olvidara de la música. Min Yoongi también tenía miedo.

—No que no existían los fantasmas, hyung.

Frunció el ceño y negó— Quédate aquí mocoso, iré a ver.

Y sin esperar respuesta salio del aula con dirección a la de música.

Nunca en su vida había creído en fantasmas y no lo haría ahora. Debía haber alguna explicación lógica para lo que estaba pasando.

—Hay alguien aquí.

Abrió la puerta lentamente y asomo su cabeza. El aula estaba completamente vacía, pero la melodía se oía mucho más clara y fuerte, trago grueso y giro sobre sus talones para alejarse lo antes posible.

—Mierda, Jungkook vámonos.

Jalo al menor del brazo, dejando los utensilios de limpieza en el aula y salieron corriendo sin mirar atrás.

Mañana se encargarían de limpiar.

[...]

Cubrió su boca con su mano, riendo escandalosamente una vez se aseguró que no había alguien cerca, y agradeció mentalmente que su mamá no hubiera llamado minutos antes porque si no lo hubieran descubierto.

—Kim Taehyung, ¿dónde demonios estas?

—Aún estoy en la escuela...si...ya voy.

Colgó y se colocó la mochila sobre su hombro. Le dolía la espalda por estar encorvado detrás de la mesa pero definitivamente había valido la pena, la cara de susto de Yoongi lo había valido y ni hablar de la manera en la que tomó la mano de Jungkook para salir huyendo.