Separados por el tiempo #Worlds2018

4

El silencio reinaba en el lugar principal de aquella casa, John tenia la mirada impasiva con el ceño fruncido y la pobre castaña se sentía incomoda ante aquel hombre.

¿Le habré caído mal? ¿Qué le hice? pensaba April, por alguna extraña razón, aquel hombre vestido con un cardigan pasado de moda, le causaba nervios, incluso miedo.

Ella se dedico un segundo a estudiar la mirada del hombre que parecía ensimismado, sus miradas se cruzaron y ella sintió un nudo en el estómago, pero no porque le gustase, sino porque aquella mirada era capaz de penetrar en los corazones más crueles e imponer temor.

- April, muestrale la habitación a John por favor y haz lo que él te pida - dijo Ben rompiendo el silencio.

- Si claro, venga conmigo señor, por favor - dijo April, aún con un nudo en el estómago, no quería estar sola con ese hombre.

John no respondió y se limitó a seguirla, aquella casa tenia un toque antiguo y eso lo reconfortaba.

Cuando subian las escaleras que eran angostas y su pintura blanca un poco desgastada, al ritmo de los pasos se escuchaban rechinar.

Llegaron al segundo piso y este estaba inudado de retratos ¿a color?, el castaño estaba perdido viendo los retratos, en su época las fotos eran blanco y negro. ¿Quién será ese muchacho? se preguntó, el protagonista de los retratos dejaba ver a un hombre de unos 18 años como máximo, cabello castaño y tez trigueña, sonriendo del lado vestido de militar.

-¿Quién es ese? preguntó John en un tono autoritario con la mirada fija en el cuadro.

- ¿Perdón? - dijo una April distraida.

- ¿Acaso estas sorda niña? y frunció aún más el ceño.

-Disculpe señor, usted será huesped y lo que quiera, pero no le vendría mal un poco de educación a la hora de dirigirse a las personas.

April también frunció el ceño y aquello lo había dicho con un tono de voz elevado, que ni ella sabía que tenía, mientras miraba al nuevo huésped con desprecio.

John apreto los puños, que muchacha tan insolente, nadie nunca le habia elevado la voz, ni siquiera su tía que era el doble de cascarrabias. Así que con una sonrisa un tanto burlona y una ceja arqueada contestó

- Y a ti no te vendría mal tomar un poco de sol , tus piernas son dignas de pertenecer a un cadáver JAJAJAJA.

April estaba roja por la furia, no podía seguirle replicando a ese patán o el anciano la despediría.

- Subamos al siguiente piso, su habitación es la última. Y dejarle claro que como yo tenga las piernas no es de su incumbencia, limítese a respetarme. -

- No es de mi incumbencia, pero si de mi diversión, y a mi no me digas que hacer, yo decido hasta donde llegar - dijo mirando a la chica, a esta le provocaba frío su mirada.

April empezó a subir hacia el tercer piso, mientras que John la seguía y sonreía por su victoría frente a la chica.

El tercer piso lucía tenía un toque más antiguo que el resto de la casa, el piso rechinaba.

Este piso no tenia ningún retrato ni adorno y estaba iluminado por una luz tenue, nada por el estilo, solo una pequeña mesa con un aparato grande, parecido a los que vió en la calle, esas cosas con las que las personas hablaban solas.

Quería preguntarle a la chica qué era ese aparato, pero no quería darle armas para que se burlara de él.

Caminaron hasta el final del pasillo, hasta una puerta que tenia una placa desgastada con el número 10.

- Llegamos - dijo April con un tono de pereza y con una llave abrió la puerta.

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Simplemente dedicar este espacio para agradecer a dos excelentes personas que me han apoyado desde el inicio de la historia.

AnnStein5 la verdad no tengo palabras para agradecerte tu apoyo y por la amistad tan linda que me brindas. Eres la única que conozco con la que puedo hablar de Remus 24/7, un abrazo ❤✌

KarlaAmaya gracias igualmente por tu apoyo, eres una persona muy genial ❤

Pd: Estas chicas escriben historias maravillosas

Violentamente amor >>> AnnStein5
Tus demonios, mis demonios >>> KarlaAmaya