Mi vida cerca de mi vecino suicida [MEJIBRAY]

¿Venganza?

*Koichi
Habia pasado toda la noche llorando abrazado a mi amigo.
No me gustaba tener que hacerle pasar este mal rato, pero realmente necesitaba su apoyo.
Cuando desperté, él acariciaba mi cabeza suavemente en silencio.
-quieres que te haga el desayuno? -me preguntó al notar que habia despertado. Yo tomé algo de distancia y limpie mis ojos llenos de lagañas. Me habia dormido llorando.
-no tengo hambre...
-debes comer alguna cosa poca por lo que sea...
-...está bien...
Él me dio una sonrisa calida y se levantó de la cama.
Me observé al espejo.
El leve maquillaje que habia usado ayer estaba todo corrido y bien notaba ojeras bajo mis ojos.
Suspiré.
podria hacerle algo a mi cabello... ¿deberia?
Ahh...
Sin pensar en más, me metí a la ducha y tomé un largo baño.
Cuando salí usando mi bata, habia una bandeja con comida sobre mi cama.
Habia un tazón con leche y cereal, un frasco con fresas y un vaso con jugo.
-MiA? -llamé a su nombre. Noté una nota junto a la bandeja.
"Salí un momento, vuelvo pronto cariño"
-cariño...iug, MiA cariñoso... -me dije para mi mismo.
Me quité la bata y me observé desnudo frente a el espejo.
quizas...no le habia gustado mi cuerpo...
Quizas...Mi piel no es lo suficientemente bonita...
Quizas...Tsuzuku es un idiota.
No, no quizas. Es un idiota.
Me puse una de mis piyamas favoritas y bebí un poco del jugo.
No queria comer. Sentia asco, así que volvi a acostarme y revicé mi celular.
Entré a Instagram y me mantuve un rato allí, luego entré a una pagina y compré algunas cosas.
-¡hey princesa! ¿donde estas? -oi a MiA. Él se asomó por la puerta.
-aqui... -respondí.
-hey, mira, traje a alguien.
A TSUZUKU NO, A TSUZUKU NO!
Cabello azul...pequeño...
-hola ¿quien eres?-dije
-¡Es Meto!¡tonto! -me gritó MiA.
Forcé una sonrisa.
-solo estaba bromeando-mentí.
El peliazul me saludó con la mano y permanecio atras de MiA.
-¿como estas? -le pregunté.
-bien... -habló en voz baja.
-hey, tu voz es linda.
Él bajó la vista y sonrió.
que tierno...
-gracias...
-como va lo de ustedes? -pregunté. MiA ayer no me habia dado tanta información.
Mi rubio amigo miró al otro y Meto se ruborisó.
-bien... -dijo MiA.
-¿hasta qué han llegado? -pregunté para incomodar.
El rostro de Meto se volvio aun más rojo.
-no preguntes eso... -dijo MiA sonriendo.
Enarqué una ceja en señal de que si habian tenido sexo.
-no! ¡no! ¡¿como crees?!
-bueno...tu pasado te condena. -dije con sonrisa burlona.
MiA se ruboriso.
-no lo escuches! ¡está pendejo! -exclamó para Meto.
-no entiendo... -dijo él.
MiA me miró de reojo y reí.
Que inocente es este muchacho...
-Am...Meto solo estara un rato aqui ¿ok? tiene que hacer cosas...
-entiendo. -respondí.
-tengo que hacer soporte en una banda -me contó él.
MiA estrelló su mano contra su cara.
¿no queria que supiera?
-¿que tocas?
- la bateria, el saxofon, el bajo y el piano.
Woow...
-Wooow...eres increible pequeño.
MiA carraspeo y tomó su mano.
-creo que ya es hora de partir. -le dijo a Meto. Él miró su reloj y afirmó con la cabeza.
-Meto...¿estarias en una banda con nosotros?
-no. -respondio MiA de forma cortante. -Koichi, ¿que acaso ayer no me escuchaste? no es bueno seguir cerca de ese demente.
Demente...Odiaba ese término.
-Solo es una banda.
-¿estas dispuesto a verle la cara diariamente luego de lo de ayer? ¿tengo que recordarte qué viste?
Mis ojos se llenaron de lagrimas lentamente y tragué intentando aflojar el nudo en mi garganta.
-no...no tienes...
-ese idiota no merece que estes cerca. ¡que se vaya al diablo!
-MiA...-le habló Meto abrazandose a su brazo. -tranquilisate...
MiA bajó la mirada y tomó de la mano a Meto.
-te veo luego Koichi. -dijo con seriedad y se fue con el pequeño.
Me quedé atorado con las ganas de seguir llorando y me abracé a mi almohada.
Intenté dormir más para no llorar, pero no lo logré.
El tiembre sonó unos minutos despues y me levanté pensando en que quizas MiA se habia arrepentido de tratarme así o se le habia quedado algo.
En cuanto abrí la puerta y vi el cabello negro, la asoté de vuelta a cerrarla y me puse de espaldas a esta.
-¡Koichi! ¡quiero hablar contigo! -me gritó
No podia responder.
Mi corazón latia con mucha fuerza y el nudo en mi garganta era muy doloroso. Quizas incluso más que el dolor en mi pecho.
-Koichi porfavor...
-...vete con Ryoga... -las palabras afloraron de mi boca y hubo silencio.
Creí que se habia ido y abrí un poco la puerta para mirar.
No estaba allí, así que volví a cerrar y me relajé un poco.
Las lagrimas se escaparon por si solas y de pronto me senti aprisionado.
Él me abrazaba por la espalda.
-sueltame! -le grité, pero no lo hizo.
Comencé a forcejear hasta que él aflojó y me soltó.
-lo siento Koichi, no llores porfavor.
-"no llores porfavor" ¡idiota! ¡vete! ¡fuera de aqui!
-solo quiero hablar!
-no tenemos nada que hablar!
-claro que si! ¡sé mi bajista porfavor!
-...
Me quedé en silencio.
No sabia que decir sobre eso.
-Koichi porfavor... -rogó mirandome a los ojos.
limpié una lagrima que corria por mi mejilla y me crucé de brazos.
-no...no sé si puedo...
-porqué?
-porque...porque yo... te amo... -murmuré bajo.
Él bajó la mirada y observó sus manos un momento.
-...yo...yo tambien te amo...
-no digas eso...anoche te vi...mas bien, lo vi. Ryoga en tu casa.
-solo hablamos...
-no te creo.
-es verdad.
-no te creo...tú aun le gustas, lo sé.
-él solo estaba allí para calmarme... estaba confundido y...desesperado...
-y tu crees que yo estaba muy bien?
-...MiA estuvo aqui...
-ah, lo viste.
-si... sé que te hice daño al tomar la decision, pero...no es malo que estemos cerca como compañeros.
-y dices eso luego de todo lo que pasó? no puedo hacer como si nada.
-por favor...eres la unica persona que conosco que toca el bajo.
-pues conoce a alguien más. fuera de mi casa.
-...pe...pero...
-¡fuera!-le grité.
Él guardó silencio y salio por la puerta con la cabeza agachada.
Mis lagrimas comenzaron a caer con más intensidad y corrí a encerrarme en mi cuarto.