30 Reglas De Boxeo | Larry Stylinson

Trigésimo.

"Las rondas finales siempre serán las más dolorosas, el dejar atrás los bellos recuerdos de las cosas que hicimos, eso es lo que siempre perdura en nosotros."

Harry se sentía vivaz con la energía al máximo, hoy era la última pelea y gracias a ello tendría su año de vacaciones y dejaría en alto el apellido Styles dejando ver que ellos no eran alfas débiles e inútiles, él era capaz de defenderse, a él y a su familia, sería capaz de dejarse notar y a respetar.

Ese día temprano se estaba alistando en el gimnasio; la pelea no sería hasta la noche, dejándole un tiempo libre para alistarse y para entrenar un poco.

— Creí que irías a disfrutar éste tiempo con Louis, hijo-. El entrenador veía a su chico pelear contra el saco de box. Ese alfa que era casi o mejor que su padre.

— Louis sabe lo que pasa si gano ésta pelea, prefiero prepararme bien antes de ir con ellos-. Dejó de golpear el saco yendo a por su botella de agua y su toalla.

— ¿Estás seguro de querer participar en la pelea, Harry?-. Will veía a su mejor alumno fruncir el ceño-. No es por nada malo, sólo que ya sabes cómo son en las finales, la gente se vuelve más loca.

— Me he estado preparando todos estos años para esto Will, no me voy a ir sin haber peleado-. Le regaló una suave sonrisa y recogió sus cosas.

— Bien, si tú estás seguro, yo también lo estoy-. Asintió y se dispuso a apagar todo en el boxeo. Por ser la noche tan esperada, el gimnasio había cerrado sus puertas sólo por ese día.

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Llegó temprano a casa y se encontró con la grata sorpresa de ver a su madre y a su suegro sentados en la sala.

— Hey, ¿Me he perdido de algo?-. Se acercó hasta Louis y plantó un beso en sus cabellos, siendo recibido por una suave sonrisa por parte del omega.

— Han venido a desearte suerte, Hazz-. Asintió. Se lo esperaba.

— Gracias, supongo-. Ambos señores sonrieron y Anne tomó la mano de su hijo.

— Sólo quiero decirte que estoy muy orgullosa de ti Harry, has cumplido tu sueño y seguiste los pasos de tu padre, espero que después de esto te dediques a tus hijos y a tu omega-. Harry asintió y abrazó a su madre.

— Eres alguien valiente, Harry, tienes honor y valor, y por eso mismo eres alguien que se puede admirar-. El padre de Louis abrazó a su yerno-. Tú puedes, siempre lo has logrado, hijo.

— Gracias señor, me ponen sentimental los dos-. Se sentó al lado de Louis y tomó su mano-. Estoy seguro que el tenerlos allí conmigo me dará fuerzas necesarias.

— Siempre te apoyaremos, pase lo que pase-. El alfa asintió y enroscó su brazo alrededor de la cintura de su omega. Tendría que salir todo bien, todo como su padre amaba.